Lío De Amor. -Juan Pablo Villamil.- #1 | WATTYS 2020

Cap. 36

Antonia 10 de noviembre.

Dos meses habían pasado desde la ultima vez que lo vi, si habíamos mantenido contacto, pero, realmente todo se sentía diferente, mayormente por que sentía la enorme necesidad de tenerlo junto a mi, y lo peor de todo, es que hace casi una semana no hablaba con el, me hablaba con los chicos y siempre preguntaba por el, me decían que estaba bien, pero que llegaba a sentirse muy cansado, lo cual no dudaba, pero algo aún no me cuadraba, y ellos sabían lo que pasaba.
Hoy había hablado con mis hermanos, y me habían dicho que volverían el fin de semana.

3:30 pm

Había salido de bañarme cuando mi celular comenzó a sonar. Era Juan Pablo. Moría de nervios, pero mis nervios no pudieron más que yo, así que conteste la llamada.

Llamada.
Antonia: ¿Hola? -intente sonar lo menos nerviosa-
Villamil: Antonia, perdón por no haberme comunicado. Necesito hablar contigo
Antonia: ¿Que pasa? -me senté en la cama-
Villamil: Tu y yo no podemos seguir juntos, verás, he conocido a alguien más, y creo que, creo que la quiero... perdóname
Antonia: ¿Sabes que las cosas se hablan frente a frente? ¿O tú maldita vergüenza puede más que tu?, sabía que pasaba algo, sabía que el que te hayas desaparecido incluía algo más, no me molesta el hecho de que ahora estés con otra persona, me molesta que no hayas tenido el valor de haberlo dicho antes -corté la llamada-
Fin de llamada.

Arroje el celular al piso en el ataque de rabia que estaba teniendo. No quería verlo, no quería siquiera escucharlo, estaba tan molesta con el, y con la vida en ese momento, que no podía dejar de pensar tantas cosas malas que podría decirle a Juan Pablo.
Termine de arreglarme y baje a la cocina limpiando mis lagrimas, agradecía a dios que mis padres no estuvieran, tome el bote de helado de chocolate y lo subí a mi habitación nuevamente.
Coloqué alguna película de Netflix y comencé a comer el helado. En cada bocado recordaba cada cosa bonita que pase con Villamil, hasta que no pude más y me solté a llorar por completo. Lo odiaba, odiaba que me haya mentido, odiaba no haber sido lo suficiente para él pero sobre todo odiaba no poder odiarlo como tal.
Mi celular volvió a sonar, esta vez era Emily, debía contestarle si no, armaría una guerra por ignorarla.
Intente calmarme y limpie mis lagrimas nuevamente.

Llamada.

Antonia: ¿Hola?
Emily: ¡Tony!, Fernando nos ha invitado a una fiesta en su casa, ¿vamos?
Antonia: Eh no, Ems me siento algo cansada, preferiría quedarme en casa -suspire echando mi cabeza para atrás-
Emily: ¿Estas bien?, ¿es por que no has hablado con Juan Pablo? -preguntó confundida- Amiga no debes deprimirte por es...
Antonia: Juan Pablo y yo acabamos de terminar -solté de repente mientras limpiaba unas lágrimas que habían caído-
Emily: ¿Que?, iré para allá, buscaré a Camila, adiós -colgó la llamada-

Deje el celular a un lado de mi, y me dispuse mínimo a arreglar un poco mi cara, estaba hecha un asco. Maldito Juan Pablo.
Después de un rato las chicas llegaron y enseguida me brindaron un abrazo.

Camila: Ahora, cuéntanos qué pasó -preguntó mientras me guiaba a mi habitación-

Suspire y tome mi helado, y me dispuse a contarles todo.

Emily: ¿En serio hizo eso?, ¡que maldito idiota! -murmuró enojada-
Antonia: Eso no es lo peor de todo, lo peor es que llegan el viernes por la mañana y seguro llegará con su nueva novia -sorbí mi nariz- mínimo llegarán cuando esté en la escuela, de verdad ya me veo sin ganas de volver a casa
Camila: Pues volvemos contigo, ¿okey?, no estarás sola -me abrazo nuevamente-

Las chicas decidieron quedarse a dormir conmigo, querían que me sintiera acompañada. Hoy es miércoles, solo quedan dos días para verlo ser feliz con otra chica que no soy yo.
Decidimos dormir pues teníamos que madrugar para la escuela.
Nos levantamos a las 6:30, entramos a las 7:20, y la escuela estaba cerca de casa.
Así que decidimos irnos caminando.

Viernes. 7:20 am

Hoy llegaban los chicos y mi idiota ex novio.
No sabía como estar, quería esconder la cabeza bajo la tierra para no verlo.
Llegue a la escuela algo temprano, pues aún estaban llegando los alumnos y docentes.
Estaban por entrar a la escuela cuando escuché que alguien me hablaba. Enseguida voltee.

Antonia: ¿Que haces aquí? -lo mire confundida-
Villamil: Venía a pedirte perdón -se acercó a mi-
Antonia: ¿Perdón? ¿De que o que?, ¿perdón por haber jugado conmigo?, déjame decirte que ya es muy tarde, no quiero verte -negué con la cabeza dándome vuelta para entrar a la escuela-
Villamil: -tomó mi mano haciéndome girar- Si Antonia, perdón, perdón por él daño, lastimarte no era mi intención -murmuro mirándome-
Antonia: Solo contéstame algo... ¿todo fue de verdad? -lo mire directamente a los ojos tratando de no llorar- ¿me amabas?
Villamil: Por supuesto que si, te amo Antonia, solo que, estoy confundido -bajo la mirada-
Antonia: ¡Si me amaras estarías conmigo!, tú no me amas, y no me amaste, ¿qué necesidad tenías de perder tu tiempo conmigo? -solté algunas lágrimas suspirando-
Villamil: Me diste los mejores meses de mi vida, te juro que todo fue real, no desperdicié nada -tomó mi mano-
Antonia: No, suéltame -me solté de su agarre alejándome un poco- ¿no crees que es un poco cínico de tu parte venir a decirme que me amas cuando estás con otra chica?
Villamil: Solo venía a pedirte perdón, Antonia, no quiero que me odies
Antonia: Muy tarde, se deben pensar en las consecuencias antes de actuar, ¿sabes?, no te me acerques, es más, no vuelvas a dirigirme la palabra, eres un grandísimo idiota Juan Pablo Villamil -negué mientras caminaba rápidamente dentro de la escuela-

Detrás de mi pude escuchar como me llamaba, las lágrimas salían de mis ojos, así que me dispuse a entrar rápido al baño. Me encerré en un cubículo y solté todas las lágrimas que debía soltar y no acumular.
Escuché el timbre indicándome que ya era hora de entrar a clases, así que me limpié la cara y me arregle el maquillaje. Salí del baño y caminé a mi clase. Química, no la compartía con las chicas, así que estaría sola y tranquila para pensar.
La hora pasó rápida, me tocaba matemáticas, en esa estaba con Emily y Camila, nos sentábamos juntas.
Entre al salón de matemáticas y ahí estaban ellas.

Emily: ¡Hey! ¿Llegaste tarde? -me miro confundida-
Antonia: No, estaba en el baño -me encogí de hombros-
Camila: ¿Estas bien? Tienes los ojos rojos -tocó mi brazo-
Antonia: Juan Pablo vino a verme, a disculparse más bien... le dije que no quiero verlo -arrugue la nariz ligeramente-
Emily: ¡Tremendo idiota!, hiciste bien, Tony, no te dejes caer por el... mereces a alguien mejor
Camila: Y ahora si o si iremos contigo a casa, y tienes que demostrarle que estás mejor sin él -acarició mi espalda-

Asentí suspirando. Me tocaría un largo y difícil día, no quería llegar al momento donde debía conocer a la nueva conquista de Juan Pablo Villamil, no me gustaba si quiera pensar en todo lo que deje e hice con el, estoy molesta conmigo misma por amarlo tanto como para no poder gritarle todo lo acumulado.