La hija de Slenderman [Editando]

La Hija De Slenderman

El conocido Creepypasta Slenderman se enamoró de, nada más y nada menos qué de una humana.
Fruto de éste amor, nació una niña. Mitad humana, y con las habilidades que posee tal creepypasta. Las cuáles al ir creciendo la niña, esas habilidades se irán  desarrollando sin ella notarlas.

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Sinopsis

La madre de la niña castaña se encontraba sentada en la mecedora, con la niña en brazos mientras la alimentaba con un biberón. Se mecia suavemente, logrando así que la niña durmiera de nuevo. Ella había despertado de una pesadilla, que por cierto; no era nada agradable. En el rostro de la pequeña permanencian lágrimas saladas resbalando por sus mejillas rosadas.

La ventana de la habitación de la pequeña niña permanecía abierta, la luz de la luna alumbraba la habitación y un suave y refrescante brisa de otoño pasaba por esta.

La madre, cuyo nombre es wendy. Se levantó de la mecedora con cuidado de no despertar a la pequeña que yacía en sus brazos; quitó el biberón de los labios de la pálida niña, la dejó con sumo cuidado sobre la cuna de la niña. La niña nombrada _____(tn) tembló un poco, dando a demostrar qué tiene frío. Tomo una manta de color rosado claro, que estaba sobre una pequeña mesa, la colocó sobre la anatomía de la infante con delicadeza. Se apartó de la cuna y se dedicó a observar por la ventana la gran luna. La brisa caía en su cara relajandola. Wendy suspira. Siente unos cálidos brazos rodear su cintura, se estremece. Pero luego se tranquiliza al darse cuenta que es el Padre de la niña que yace dormida en su cuna. El coloca su cabeza sobre el hombro de la mujer la cuál abraza y susurra en su oído.

-¿Que tienes de especial para enamorarme así?

-Nada -Respondió ella.

-¿Nada?

-Si, nada -asiente suave con la cabeza. Él sonríe.

-Según tú, no tienes nada de especial. Para mi, tu eres especial en todo. En tu personalidad, tu forma de ser, tus emociones, tu físico..., simplemente tu eres especial, e incluso perfecta a mis ojos.

Ella no hiso más que sonreír, nadie le había dicho cosa más hermosa.
Ellos solo estaban enamorados. Y fruto de su amor permanecía acurrucada durmiendo en una cuna, tapada con una manta color rosa claro.