Enamorada De Una Bestia ➵ Jeon Jungkook.

Capítulo 2

Actualidad.

El día de hoy amanecí con los ojos hinchados, anoche fue una de las peores noches de mi vida, no podía creer lo que estaba pasando estaba tan asustada y no sabía qué hacer, estaba apunto de levantarme cuando entra un guardia a dejarme un plato de comida en la cama.

—Señorita ___, aquí está su desayuno —me entrega la bandeja —. El señor Jeon me pidió de favor que le trajera a una enfermera para que le checará sus heridas.

—¿Por qué te pidió eso? — pregunté en seco.

—Por su salud señorita —dejó la bandeja y se retiró.

Comencé a comer lo poco que el guardián me había traído, me dolía todo el cuerpo. Simplemente hasta el simple hecho de comer sentía un inmenso ardor en mi cuello, mis brazos, piernas. Todo mi cuerpo se encontraba en mal estado.

[...]

Momentos más tarde, llegó la enfermera a revisar mi cuerpo.

—Dígame señorita ¿Que le pasó? —inquirió ella, preocupada.

Mis heridas son bastantes profundas, quería expulsar mi furia con alguien. Simplemente desahogarme por lo que pasó ayer en la noche, dudaba mucho en responder  le a la enferma. ¿Digo la verdad o no?

Me quedé callada.

—¿Pasa algo? —preguntó la enfermera seriamente.

—Aaah —suspiré, pues quería desahogar mis penas con alguien.  Aún no sabía si era buena idea o no.

—Todo estará bien...

Finalmente me decidí por decirle la verdad quizá ella podría ayudarme.

—Bueno, le diré que anoche pasó...

—Ella cayó de las escaleras anoche, fue algo muy terrible— intervino Jungkook entrando a la habitación.

Al verlo aproximándose entre en pánico.

—Señorita tranquila—mencionó la enfermera.

—Ya estoy aquí princesa, relájate —dijo Jungkook con una mirada intimidante.

La enfermera comenzó a revisar mis heridas mientras ella lo hacía, Jungkook me veía fijamente para que no hiciera nada en su contra.

Momentos después, la enfermera se fue, me dejó a Jungkook y a mí solos en la habitación. Un silencio recorría por toda la misma. En verdad no quería dirigirle la palabra después de lo que pasó en la noche. Aún tenía miedo.

—Mi dulce _____, perdóname — Jungkook se colocó de rodillas en la orilla de la cama y tomó mi mano para poder besarla. Maldito hipócrita. —Se que tienes miedo.

Solté mi mano y con mucho miedo traté de alejarme de él.

—¿Que tienes dulzura?— inquirió —. No temas, no te quiero lastimar.

—No...

—Princesa por favor.

— No te me acerques —pedí atemorizada.

Jungkook jaló mi brazo y me recostó en la cama a su lado.

—Princesa, perdóname no sé que pasó ayer conmigo — dijo Jungkook con cinismo.

—No, déjame sola —repetí desconsolada.

—No era mi intención lastimar te créeme no quería hacerte daño.

La habitación quedó en profundo silencio, no estaba completamente segura si quería perdonar a Jungkook, anoche me hizo mucho daño; jamás lo ví capaz de ponerme una mano encima, con tan solo recordar lo que pasó me pongo a llorar, pero que tonta soy...