Querido diario...
Los días han transcurrido normalmente, por ahora no he tenido muchos problemas y creo que me estoy sintiendo un poco mejor.
Yo y Ezra nos estamos llevando mejor. Un día le dije indirectamente que me invitara a salir, jaja fue muy estúpido. Como a él también le fascina el café y estaba aburrida en artes le dije:
- Oye comadre ¿pa' cuando nos echamos un cafésido a cotorrear?
Su única reacción en ese momento fue reírse al igual que yo, aunque moría internamente...
¡Fuimos a una convención juntos!, y ME ENCANTÓ. Aunque no sabíamos que chingados hacer, aun así estuvo divertido :). Compré muchos cómics y platicamos <3. Y al final de ella !lo abracé! (Algo súper raro ya que nunca lo había abrazado antes y el no es nada cariñoso).
Pero hoy mi hermana me dio una noticia que realmente no me esperaba... me dijo que probablemente esta embarazada y que soy la única persona a la que se lo dice y confía...
Y no se que demonios hacer...
Si les digo a mis papás mi hermana me odiará para siempre, pero si le pasa algo nunca me lo perdonaría, ya que si la prueba sale positiva ella va a abortar, y quiere mi apoyo... eso no suena nada bien.
~.~.~.~.~.~.~
En la escuela fui a hablar con la psicóloga en el segundo receso... ya no lo soportaba y tenía que hablar con alguien sobre lo que me estaba pasando, dos de mis amigas me acompañaron; Stella y Ana.
Llegue a su oficina con ellas y me senté, le conté lo que me estaba pasando sin miedo a que me escucharan mis amigas, la psicóloga me dijo lo peligroso que era y me recordó lo difícil de mi situación. Pero hablar con ella me dejó las cosas claras y me ayudó mucho.
Lamentablemente me hizo recordar muchas cosas de mi infancia que ya había dejado en el olvido... al instante no pude evitar llorar, Stella reaccionó y me dio un abrazo, al igual que Ana.
No pude parar, me dolió mucho recordar todo lo que pase de chiquita y los sollozos no me dejaban terminar de contarle a la psicóloga. Ella me dijo lo fuerte que soy al haberle dicho y más después de todo lo que he pasado.
Al final, me sentí bien, ya sabía bien que tenía hacer, si es que salía positiva la prueba, convencería a mi hermana de que le dijera a nuestros papás o si no lo haría yo.
Salimos y cada quien fue a su clase, yo no pude parar de llorar y entre al salón con los ojos rojos y la cara húmeda.
Llegue, me senté y seguí llorando en silencio en medio de la clase... realmente no me gusta llamar la atención, pero en ese momento necesitaba que alguien me pusiera atención aun que sea el mugre profesor, que me vio llorando pero aún así no hizo ni dijo nada al respecto.
En la siguiente hora me senté hasta atrás a un lado de Ezra, notó lo triste y desanimada que estaba y se acercó más a mi sentándose en el piso. Me preguntó:
-¿Estás bien?¿Qué pasó? -Me miró fijamente con preocupación-
-Nada -respondí-
El insistió y siguió preguntando, le dije que tenía problemas pero el no se quedo satisfecho con eso, quería saber más. Se acostó en el piso y me miro con unos ojos de preocupación y curiosidad. Me dio tanta ternura.
Después de un rato el me empezó a picar y decir las estupideces que siempre me dice, me reí, y las ganas de llorar desaparecieron. Creo que Ezra era única persona que me podía animar en ese momento.
Le di unos chocolates que traía como forma de agradecimiento por animarme.
En la salida el se quedo a mi lado, me abrazó y me hizo sentir mejor. Y antes dé irme me pidió un abrazo de despedida (cosa que nunca había hecho antes de la convención), yo me sorprendí y me agaché para abrazarlo. Se sintió tan bien... me fui muy feliz a mi casa y no pude evitar sonreír todo lo que restaba del día.
Al final de todo... Ezra no es un mal amigo.
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Querido diario
RomanceEl diario de una chica rara entrando a la adolescencia contando sus experiencias románticas, sentimientos, pensamientos y problemas por los que pasa al desarrollo de la historia