Ryuho...¿Quiénes son tus padres?

35)¿Por qué no hacer un hermano para Ryuho?

35

Los chicos seguían muy sorprendidos por todo lo que veían.

Hades por su parte correspondió el beso llevando su mano a la cintura del menor y poder apagarlo más a él.

-Shunny...

Hyoga aún sin poder moverse, veía aquella escena tan dolorosa para él, las lágrimas seguían en sus ojos y resbalan por sus mejillas.

Seiya y Shiryu miraban sorprendidos pero tristeza también por parte del mayor.

-¡Aghh!

El grito lastimero de Hades se escuchó por el lugar, quien asustó a los presentes.

Shun cambió sus ojos a su esmeraldas natural y se separó lentamente del Dios, este con ambas manos en su costado observó como la sangre salía. El caballero de Andrómeda estaba con una cara de tristeza mientras que en sus manos tenía la daga dorada, la misma que antes Saga quiso utilizar en Athena.

La vista atónita de todos se posó en el caballero de Andrómeda, el Dios soltó una risa sarcástica y después llevó su mano a la daga dorada para luego ambos desaparecer.

-¡Shun...!

Las lágrimas también adoptaron el rostro del Fénix y este junto a los demás pudieron moverse, ya sin sentir el cosmos que los negaba moverse.

-.....

Un silencio se formó hasta que la pareja de caballeros dorados, avanzó hasta el lugar de Ryuho.

Esos caballeros no eran nada más y nada menos que Seiya y Shiryu. Lo abrazaron con amor, el menor ante esto de igual manera los abrazo soltando unas cuantas lágrimas.

-Que alegría que estés bien y que ya estés con nosotros.

-Y a mi me alegra estar junto a ustedes.

Shiryu le robó un beso a Seiya, quien se sonrojo y se dedicó a acariciar los cabellos. Ganándose una risa pequeña por parte del pelinegro quien dejó a ambos solos para caminar con dirección a Hyoga, el cual aún no se movía de su lugar.

-Hyoga..

-¿Por qué hizo eso Shiryu...?

-Obviamente quería distraerlo para así atacarlo

Respondió rápidamente Shiryu, luego la voz de Ikki lo hizo mirarlo

-Mi hermano tomó valor para clavar la daga en el cuerpo de Hades, fue algo muy noble y típico de el. Juro que cuando vea a ese maldito me las pagará por haber besado a mi hermano.

Formó un puño con gran enojo, esto hizo pensar al Cisne, cuando el Fénix se enteró por accidente que salía con el oji-esmeraldas hizo un gran escándalo y casi inicia una guerra contra él, por suerte Shun no lo permitió y fue invadido por varias preguntas por parte de su mayor. Pero luego de eso Ikki solamente lo amenazaba con matarlo si lastiman a su hermano pero luego ya estuvo mucho mejor....bueno.....casi...bueno, al menos ya no se veían como perros y gatos....olvidenlo, la cosa es que con eso que dijo el Fénix, pretendía que el otro se diera cuenta que aceptaba indirectamente su relación.

-Ryuho...!

Al escuchar el grito de Seiya, todos miraron hacia su dirección rápidamente encontrandose con la escena de el menor desmayado en los brazos del Sagitariano.

-Debió ser mucho para el..

Dijo Hyoga mirando como Shiryu iba en auxilio de su hijo, Ikki se quedó en silencio para luego darse la vuelta y apretar los puños

-Oye Cisne!

-¿Eh?

-No me importa si vas a hacer algo contra Hades solamente quiero que sepas que YO seré quien rescate a mi hermano, así que no me estorbes

Dicho esto se fue sin mirar la expresión del rubio, este por su parte lo miraba serio pero al final dio una minúscula sonrisa.

-Eso ya lo veremos...

Ikki no hizo caso a lo dicho y se marchó de ahí, Hyoga se acercó al pelinegro y miró como este se encontraba muy nervioso y Seiya tenía unas pocas lágrimas acumulandose en los ojos.

¿La razón? Pues...

-¡Ryuho no respira!

Con Hades

El Dios había llegado a sus aposentos, la gran cama matrimonial posaba con grandeza en el centro de la habitación, las cortinas color vino cubrían las ventanas dando un aspecto más oscuro al lugar pero no por eso era tenebroso al contrario era al exótico a simple vista.

Hades se encontraba sentado en la cama mientras que Shun estaba de rodillas en el suelo con algunas cadenas en sus manos y piernas evitando su movilidad completamente.

La daga dorada estaba en la mesita seguida de la cama, Hades estaba con sus ropajes manchados de la sangre propia que brotaba de su costado.

-No imaginé que me engañarias de esta manera...menos Aún que me atacaras

Habló con una voz muy fría mientras con su mano tomaba los cabellos del menor, quien sólo se limitaba a soltar quejido de dolor.

-Suel..tame....mal...Di..to...

-Oh, parece que regresaste Shadow

Los ojos bicolores del menor brillaron de ira pero al intentar moverse se hacía más daño y más quejidos salían.

Con brusquedad el Dios tomó del brazo del menor y lo lanzó a la cama, Hades se levantó y entró a una puerta de la habitación, luego de unos minutos salió ya con nuevos ropajes limpios.

Camino hasta colocarse al frente de la cama, mirando con superioridad a Shadow, quien no se movía de su lugar, pero unas palabras del Dios lo dejaron helado

-¿Por qué no hacemos un hermano para el pequeño Ryuho...?

Los ojos de Shadow se abrieron a más no poder con mucho temor.

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