Dave Williams—¿Que hiciste qué? —me dice Charles y toma un trago del vaso de whiskey que tiene en mano.
—No sé en qué estaba pensando, no pude evitarlo.
—¿Como decías que se llamaba?
—Jane Harper.
—¿Es pelirroja? —Charles deja el vaso en el porta vasos y me mira.
—Si... ¿La conoces?
—Me topé con ella el otro día en el ascensor. Dijo que la atropellaste.
—¿Qué tanto hablaron?
—Solo le pregunté a que piso iba y le pregunté sobre su yeso.
—Bien uhm..., tengo una reunión con la Srta. Turner en 5 minutos. Te dejo. —le doy dós palmadas en el hombro y salgo de mi oficina. Voy a donde Paige —mi secretaria— mientras ella ve algo en el celular.
—Paige. —ella da un pequeño brinco y guarda el celular rápidamente.
—Sabes que no tengo problema, siempre y cuando no haya nada importante que hacer. —le recuerdo y ella asiente.
—¿La Srta. Turner ya está en la sala de
reuniones?—Sí, acaba de entrar.
—Gracias Paige. —al entrar a la sala, ella está leyendo unos papeles y al verme se pone de pie y me da la mano profesionalmente.
—Es bueno volver a encontrarnos Dave.
—Sr. Williams. —digo corrigiendola.
—Bien, ¿En qué quedamos? —ella toma asiento al igual que yo.
—Solo negocio un 20%.
—Por Dios. Te doy el doble por un 40%
—20 o nada. No es negociable. —Martha aprieta el bolígrafo qué tiene en mano y respira con frustración.
—Nunca he negociado nada de esta empresa con nadie. Un 20% es lo máximo que puedo dar.
Ella lo piensa y jadea la cabeza.
—Está bien. —me da la mano para cerrar el trato y se pone de pie para irse.
—Tendré el contrato listo para mañana. —me avisa y asiento abriéndole la puerta.
Probablemente esta ha sido la reunión más rápida en toda mi carrera.
Me voy a mi oficina y al entrar, veo a Harper y a Charles hablando animadamente.
Jane percata mi presencia y me sonríe. Hace días no la veo.
—¿Por qué tan sonríente? —pregunto y me siento en mi escritorio.
—Papá está estable. Todavía no puedo verlo pero estoy feliz de que esté bien.
—Me alegra escuchar eso. —le sonrío y me paso la mano por el cabello. Creo que debería cortarlo.
—Charles ella es Harper, Harper el es Charles. —ambos me miran sin decir nada y ahí es cuando reacciono. Estaban hablando cuando entré, deben de conocerse.
—Dejaste tu abrigo hace días en mi casa. Quería traerlo pero estaba ocupada. —ella parece estar bien después de lo que pasó esa mañana. Pensé que todo iba a ser más incomodo ahora pero es igual.
—Gracias. —le respondo.
—Te había dicho que cuando mi padre esté estable hablaríamos de trabajo.
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Jane la Zorra.
RomanceJane es una joven de 24 años que vive con su padre en un pequeño pueblo de Ohio. Jane descubre que su padre tiene un cáncer estomacal y busca una manera rápida y sencilla para ganar dinero. Muchos la juzgaran por el trabajo que eligió pero ella tra...