¡Te elegí a ti!

Capitulo 1

Domingo, mi día de descanso, en el que me despierto solo para almorzar y luego vuelvo a la comodidad de mi cama para seguir durmiendo o para pasarme el resto del día viendo películas, suelo disfrutarlo de esa manera porque sé que al día siguiente volveré a la rutina de ir al colegio, y que mejor que descansar mentalmente un día antes de eso, aunque a quien vamos a engañar, nadie en su sano juicio va a clases con energía, pero por lo menos trato de convencerme de que yo sí.

Un golpe y risas, eso basto para que abriera los ojos con dificultad. Mas risas y yo ya estaba removiéndome y gruñendo en mi cama por esos ruidos tan molestos que estaban interrumpiendo mi dulce sueño, a quien se le ocurre reírse y hacer ruido tan temprano?

Estire un poco mi brazo para alcanzar mi celular y ver la hora, 12:56pm.

Con razón –dije gruñendo en un susurro y tapando mi cara con la almohada, estaba decidida a volver a dormir, hasta que escuche que las risas y algunas voces se iban acercando a mi habitación, al instante reconocí la pequeña risa de Lissa y una voz mucho más gruesa y rasposa, mi papá. 

Y sí, debería estar levantándome de mi cama y corriendo a abrazarlo porque no lo veo hace casi 2 meses, pero mi sueño y sobre todo mi flojera siempre han sido más grandes que otra cosa, incluso en esta ocasión.

Hay que sorprender a tu hermana –escuche como le dijo mi papá a Lissa. Estaba a punto de levantarme para ponerle seguro a mi puerta, pero en menos de un segundo ya tenía a dos cuerpos encima de mí dejándome casi sin aire.

SORPRESAAAA –gritaron los dos mientras se reían de las muecas que hacia claramente para intentar zafarme de ellos.

Me quieren sorprender o matar? –dije haciendo que ellos se levanten de encima de mí

Si hija, yo también te extrañe –ironizo mi papá con una pequeña mueca sarcástica, pero divertida. En ese momento reí mientras me lanzaba a abrazarlo. Lo había extrañado mucho.

Sabes que si te extrañe papá, pero también sabes lo mucho que odio que interrumpan mi sueño –dije mientras me separaba de él y este me daba un beso en la frente.

Lo siento hija, pero fue idea de Lissa –dijo señalando a mi pequeña hermana haciendo que la mire y me dé cuenta de su mueca de confusión.

Yo? –dijo poniendo una mano en su pecho simulando estar ofendida, gesto que definitivamente aprendió de mí –Papá no seas mentiroso, tú fuiste el que me dijiste que viniéramos a sorprender a Isa –lo señalo de manera acusadora.

Lissa, que te he dicho de mentir? –dijo este con voz acusadora también pero con tono divertido.

Hey papá, no intentes zafarte, yo te escuche cuando decías lo de "sorprenderme" –dije haciendo comillas y mirándolo con los ojos entrecerrados.

Bueno, bueno. Dejemos este tema que estoy aquí para disfrutar con mis princesas, no para acusarlas de algo que evidentemente yo no hice –dijo alzando los brazos en son de paz –Y tú Isa, vístete que vamos a almorzar y tengo algo importante que anunciarles –dijo saliendo de mi habitación con Lissa en sus brazos.

Apenas se fueron, arrastre los pies por mi cuarto hasta llegar a mi armario y escoger mi ropa, unos jeans ajustados y una sudadera estilo crop top holgada de color negra, deje mi ropa sobre la cama y antes de entrar al baño me asegure de dejar cerrada con seguro la puerta mi habitación, no quería que volvieran a entrar mientras me vestía. Entre al baño y me deshice de mi ropa, abrí la ducha y deje caer el agua sobre mi cuerpo, era mi momento de reflexión.

En menos de un mes salgo de vacaciones, y eso significa, entrar a la universidad. Para ser sincera aun no tengo claro que voy a estudiar, pero lo que sí sé es que me voy a dar mi año sabático, no me culpen, mi hermano me dio la idea y aunque mi mamá no estuvo de acuerdo cuando se lo dije, al final termino aceptando con la condición de que durante ese año, la ayude con la empresa, y a mí no me quedo más que aceptar, todo sea por mi año sabático. Aunque también durante ese año tengo pensado ir a Ecuador por unas semanas para luego ir a Canada y finalmente regresar para disfrutar el año como se debe junto a Ari y Carlos, porque sí, ellos también decidieron tomarse el año y tenemos pensado viajar a algún lugar del mundo y perdernos en culturas e idiomas diferentes, es algo así como nuestra meta de mejores amigos.