Capitulo 1

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¿Un día especial? ¿Eso existe? Corrí hacia mi cuarto especial y tire las maderas del suelo para sacar mi diario. 

¿Qué tiene de especial vivir una vida así? ¿Un año más? cumplir 18 años no cambiara mi vida… ya nada puede cambiarla. 

Comencé a escribir en mi diario, donde escribía siempre lo que pasaba cada día era como una forma de entretenerme escribiendo mi propia historia. 

11 de agosto de 1998

Querido diario

¿Todavía tengo sueños? Veamos, mi padre siempre nos trato como si fuéramos animales sucios. Mi madre está encerrada en su cuarto, apenas sale para tomar algo de líquido y ya ni emite ni una sola palabra. Mi hermana duerme en el sótano, prácticamente muere de hambre y frio. Y lo peor de todo a mi hermano logro enloquecerlo completamente. 

Todo esto sucedió en 1990 cuando solo tenía 9 años, mi padre vendió todo el negocio familiar a unos empresarios para dedicarse al cultivo. Su sueño de vivir en el campo lo volvió una persona horrible y cada vez más odiosa. 

Al no tener éxito en sus cultivos, reclamo a las empresas que había vendido el negocio que había logrado crear mi abuelo hace muchos años pero sin existo, obviamente. 

En 1991 comenzó a enloquecer poco a poco, antes lo ayudábamos con sus cultivos y tenían bastante existo pero también lo llevo abajo como la empresa de mi abuelo. 

Todavía no comprendo porque hiso lo que hiso, por un sueño que no valía la pena. 

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Mire por la ventana a mi hermano que trabajaba como loco en el campo de mi padre, con su ceño fruncido y ojos idos. Y seguí escribiendo.

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Lo peor de todo es que tantos químicos y insecticidas afectaron a su salud y sabiendo que se estaba muriendo comenzó a maltratarnos. 

No quiero ni recordar lo que paso después de esos años, pero al producirse su muerte a fines de 1997 todo empeoro, esperábamos vivir tranquilos, pero mi hermano empezó a pensar como mi padre y volvimos a vivir la misma miserable vida. 

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Por la ventana vi que por la calle pasaba un chico, era uno de los hijos del empresario que había comprado el negocio familiar de nuestro abuelo. Cuando mi hermano me obligaba a ayudarlo él se quedaba mirándome, yo realmente me sentía incomoda al saber que un chico tan lindo pueda mirarme a mí.

Pero intentaba no ilusionarme.

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Mañana ya sería mi cumpleaños, no tenía ningún sentido festejarlo. Sabía que nadie se preocuparía porque yo cumpliera un año más y mi hermano me haría trabajar el doble sobre esas asquerosas tierras. 

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-¿¡donde estas!? –grito.

-ahora voy –termine de escribir y guarde el diario debajo de las maderas del suelo para que nadie lo encuentre. 

-rapido-grito y Salí corriendo a ayudarlo-quiero que me ayudes con las plantas de allá y mas te vale que estén bien. Se va y volvió a pasar el chico tan atractivo y se quedo mirándome. 

Mire para todas partes y me acerque a hablarle. Decidí dejar el jueguito de miradas y conocerlo. 

-¿Por qué miras todo el tiempo?

-porque eres muy hermosa –se sonrojo. 

-si claro.

-¿Cuál es tu nombre? –sonrío.

-___, ¿y el tuyo? 

-Michael, pero me podes decir Mike –sonrío. 

-me reí y volví a mirar hacia todos lados. Note que mi hermano iba a volver en cualquier momento. 

-tengo que seguir, perdón-me miro sorprendido y volvió a mirarme en forma tierna. 

-¿Qué te parece si nos vemos esta noche? Me gustaría conocerte mejor además quisiera mostrarte algo.

-no sé si podre…además apenas nos conocimos recién. 

- sí-se ríe- si no puedes no importa, te esperare.

-está bien –sonreí y volví hacer mi trabajo. Solo acepte porque necesitaba algo de emoción, escapar de todo esto y conocer gente nueva. Esperaba tener éxito durante la noche así escapar a ver Mike. 

A la noche agarre mi diario y escribí sobre Mike. 

Tan solo espero que no sea una ilusión mas…

Tearing down The wall (Fanfic LINKIN PARK)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora