-Centurión Severo a mi- le hable al centurión que se encontraba matando a uno de los bárbaros que estaban atacando a nuestra ciudad.
-si, señor- dijo el centurión acercándose corriendo hacia mi con su cara de agotamiento y su uniforme con manchas de sangre barbara y amiga.
-Lleva esto a la parte mas alta de la entrada donde lo vean los barbaros para que así termine esta luche y Roma se alze con la victoria- le tendi una bolsa de cuero, dentro tenia lo que necesitábamos para ganar esta agotadora batalla.
Lo vi salir corriendo hacia las murallas y voltee hacia el palacio del Emperador Nerón que estaba siendo alcanzado por una orda de bárbaros y a lo lejos escuches sus gritos exigiendo que lo salvaramos y protegieramos.
Corrí a ayudar a mis hombres matando a varios bárbaros a mi paso ya no faltaba mucho para que esto por fin acabara y pudieran ir mis hombres por fin a descansar.
Roma estaba destruida casi por completo por este ataque bárbaro yo no podía permitir eso.
-señor una orda de bárbaros nos atacan por ambos lados tenemos dispuestos media centuria en esta zona para defender al emperador y además una torreta con un escorpión para darnos cobertura - me grito un legionario esperando mis ordenes.
-Proteger la entrada legionarios la victoria casi es nuestra, Formad Filas y preparad Pilum- dije poniéndome enfrente de la linea de defensa- lanzar a mi orden - mientras mis hombres se preparaban pude ver a los bárbaros venir corriendo hacia nosotros, mande a uno de los legionarios a manejar el escorpión y los demás nos quedamos a pelear abajo, en cuanto los bárbaros estuvieron a distancia de nuestro pilum di la orden de lanzar y después sacamos nuestras gladius para pelear cuerpo a cuerpo.
Mucha sangre fue derramada afortunadamente logramos contener a casi todos unos 10 lograron entrar al palacio y entre con algunos hombres a detenerlos.
En cuanto entramos nos salieron cuatro bárbaros a nuestro encuentro peleamos contra ellos hasta neutralizarlos, después continuamos y vimos a otros 3 entrar en la habitación del emperador mande a cinco de los 7 que llevaba a matarlos tenia que localizar a los otros 3 y acabar con ellos al llegar a la alcoba de alado los encontramos pero no me di cuenta que habían usado el aceite de las lámparas para prenderle fuego a mis soldados cuando íbamos pasando, so pude hacer nada por ellos ya que enseguida cargaron contra mi.
Empezamos a pelear y por un momento pensé que moriria peleando contra ellos pero afortunadamente los soldados que habían ido por el emperador llegaron a ayudarme y logramos salvar al emperador de eso.
-¿Quien es el comandante de esta defensa? -preguntó el Emperador
Di un paso al frente -Soy yo emperador ¿que se le ofrece?
-bien usted me escoltara a y me protegerá hasta que todo esto termine ¿Entendido? -me dijo algo preocupado
-Si señor -le dije y empecé a seguirlo hasta una habitación oculta antes de entrar mande a mis hombres a que reforzaran las puertas del palacio hasta que todo esto termine y después entre con el Emperador Nerón a su pequeño escondite.
El emperador empezó a prender algunas antorchas y lamparas que había en la habitación la cual era redonda h por todos lados se veia la cara del Emperador y de sus hijos realmente era ridículo estar ahí pero todo sigue un propósito
-y digame comandante ¿cual es su nombre?- me pregunto con una sonrisa muy forzada como cuando estas alterado
-mi nombre es Marius -conteste mientras observaba una pintura de el con dos mujeres teniendo relaciones sexuales.
-Y digame comandante Marius ¿usted cree en los fantasmas?- pregunta hizo que volteara a verlo algo extrañado.
-¿Señor? ¿Porque la pregunta? -pregunte algo extrañado
-bueno es que Damocles creo que viene por mi -contestó ahora temblando de miedo el Emperador
-bueno Emperador eso es solo un mito pero mejor yo le voy a contar una historia que me paso a mi...
