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Anoche volvió aquel loco, solo que esta vez estaba saludándome, era un loco, si no he llamado a la policía para que lo investigue es porque le estoy dejando pasar el jueguito y se arrepienta y desaparezca de mi vista.

Hoy era el día, mi último show. Al terminar mi acto mis fans lloraron, me conmovió y me fue imposible no llorar con ellas, mi carrera la había disfrutado hasta lo último que mis fuerzas dieron. Mañana me harán una fiesta mis compañeros de trabajo, para celebrar todo mi tiempo bueno y desearme éxitos en lo siguiente que fuera a hacer. No tenía decidido aún qué hacer con mi vida luego del teatro, así que pasaré acostado viendo televisión, tal ves engorde y yo que sé comience a beber.

- Te extrañaremos mucho Jungkookie - lloraba Hoseok en mi hombro mientras me abrazaba.

Yo también los extrañaría, extrañaría mi vida de actor, a las fans, todo, hasta los agotadores viajes.

Esto era lo que me mantenía con vida.

Me dirigí a mi armario con la esperanza de no encontrar alguna otra cosa misteriosa y desquiciada parte de una broma de mal gusto. Al llegar y tomar mi mochila bufé y giré los ojos. Tomé la caja que ahora remplazaba la demás cosas, revisé su contenido y dentro de esta estaba todo, la rosa, el cuchillo, las dos cartas y también un dedal.

En serio esto se debía a una mala broma, dejé la caja en el armario y me fui.

No más actuaciones.

Bajo El Telón. |J.K|  [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora