5 Razones Para Odiar A Springtrap [Tobring]

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—¡Tobías! ¿Puedes explicarme qué mierda es esto? —Gritó, arrugando el papel que se encontraba en sus manos.

—Oh, sabía que te pondrías así. —Se recostó en su silla, despreocupado.

—¡Pues claro que iba a ponerme así! ¿Qué esperabas? ¿Qué sonriera y te dijera «¡Oh si Toby! ¡Estoy enamorado de ti!»?

—Vamos teñida, admite que estás enamorado de mí. —sonrió, pícaro.

—¡Estás demente! ¡No admitiré algo que ni siquiera es verdad! —Se negó, molesto. Se negaría siempre, después de todo, Toby no tenía cómo comprobarlo.

—Claro que es verdad, tengo pruebas. —Insistió, sin dejar de sonreír. Sabía que el orgullo de Springtrap no le haría aceptar nada.

Pobre Spring, su plan de negarlo todo estaba en la perfecta y hermosa basura. Sintió la vergüenza recorrer su cuerpo, pero no se daría a torcer tan fácilmente.

—¡Mientes! ¡No tienes pruebas para comprobar nada! —Volvió a negar, meneando su cabeza.

—¿Ah, sí? —Preguntó, haciendo memoria para recordar una frase.

—¡Sí! —Desafió, sonriendo. Creía que llevaba las de ganar.

—“Te odio porque con todo y defectos, creo que me estoy enamorando de ti.” —Repitió esa frase. Esa frase que se suponía no debía de leer, pero que, sin embargo, lo hizo.

Springtrap sintió un calor infernal en su mejillas, calor que se expandió por absolutamente toda su cara. Ese calor fue en aumento, al ver a Toby retirar un papel arrugado de su sudadera. No lo pensó dos veces, se lanzó sobre el para recuperar el papel.

—¡Devuélveme eso! —Forcejeó, tratando de recuperarlo.

—¡No! ¡Estas son mis pruebas, yo me las quedo! —Respondió, mostrándole la lengua. Se sentía victorioso.

—Ugh, como sea. —Se alejó, cubriendo su rostro con ambas manos.— ¿Cómo te enteraste?

—Te vi lanzarlo, y de curioso fui y lo recogí. —le respondió Tobías, encogiéndose de hombros. Lucía tan puro e inocente... Descontando que era un asesino, tranquilamente pudo haber sido la inocencia en persona.

—No se suponía que tú supieras. —Musitó, avergonzado.

—No me importa, después de todo, te odio. ¿Recuerdas?

—Sí, lo recuerdo. —sentía su corazón echo pedazos, pero no lloraría. No demostraría su debilidad.

—Hey rubia, mírame. —pidió, teniendo una idea en su mente.

—¿Qué? —se dió la vuelta, cumpliendo la petición.

Y en ese momento, pasó. Toby unió sus labios con los de Spring, que estaba confundidisimo. ¿No había dicho que le odiaba? Cuando se separaron, Toby susurró.

—Te odio, porque cada vez que digo “Te odio.” tú sigues creyendo que es verdad.