Chico Diferente [Wigetta]

Capítulo 1

(Aclaro que Samuel es mayor de edad)

Narra Samuel

Es un día normal, me levanto con pereza de mi cama y me dirijo hasta mi espejo con el fin de arreglarme un poco para después ir al baño con mi teléfono en manos. Una vez en el baño, hago mis necesidades matutinas mientras me distraigo en el teléfono, lavo mis manos y me cepillo los dientes, una vez limpio salgo para dirigirme a la cocina para hacerme algo de desayunar.

—Veamos que tengo para hacerme desayuno—Abrí la nevera encontrándome con una caja de cereal, leche, frutas, carne y verduras. Lo normal en una nevera excepto por el cereal que no sé cómo llegó ahí.

Decidí servirme un simple tazón de cereal con leche. Luego de desayunar me fui al baño para darme una ducha, abrí la regadera para que se le fuera el frío al gua mientras me desnudaba poco a poco y una vez desnudo me metí a la cascada artificial. Después de 20 minutos salí con una toalla en la cintura hacia mi habitación para cambiarme, decidí ponerme una camiseta morada de las tantas que tengo, unos pantalones de mezclilla azules y unos Adidas negros
.
Acomodé mi habitación dejándolo perfectamente ordenado para luego coger mis cosas y encaminarme al garaje para sacar el coche e irme al trabajo. Había un poco de tráfico pero no era mucho problema ya que salí más temprano de lo usual de mi casa, mientras esperaba a que los choches avanzaran, dirigí mi vista a la calle viendo como algunos chicos lindos pasaban pero no me llamaban mucho la atención. Una vez que salí del tráfico seguí mi camino llegando a tiempo al trabajo, aparco el coche y salgo mientras me aseguro de cerrar bien las puertas, mientras camino por el edificio me encuentro a Alex.

—¡Hola Samuel!

—Hola Alex—Le devuelvo el saludo mientras lo abrazo a lo que él corresponde.
—¿Cómo has estado?—Me pregunta mientras acomoda unas cosas que llevaba en manos y decido ayudarle mientras le respondo.

—Excelente ¿Y a ti?

—Perfectamente— Me respondió felizmente, yo ya suponía el porqué de tanta alegría — ¿Te prestó atención el jefe?—Alex se sonroja ante mi pregunta.

— O te callas o te reviento la boca de una ostia

—Tío es que eres demasiado obvio cuando te sonrojas.

—Ya, ya. Simplemente él llegó y me tocó la mejilla para luego mandarme a acomodar estas cosas

—Y tú como colegiala enamorada le hiciste caso—Me reí, a veces me encanta joder un poo a Alex

—Joder Samuel, déjame en paz tío

—Bueno, bueno ya paro. Te dejo que tengo que cumplir horario

—Hasta luego.

Alex es uno de mis únicos dos ex’s y ahora es mi mejor amigo, nos la pasamos juntos mucho tiempo hablando de todo pero sobretodo de sus amores, aunque es un poco más bajito que yo es una monada de persona excepto si lo haces enfadar. Una vez llegué a mi oficina me puse a hacer todo lo que tenía pendiente para hoy, estuve unas cuantas horas arreglando unos problemas en algunos reportes y también acomodando el desastre que hizo uno de los nuevos, después de arreglar el desastre le enseñé y ayudé para que no se repita hasta que por fin llegó la hora del almuerzo. Me dirigí al comedor y luego de pedir mi comida me  fui a sentar con Alex.
—¿Cómo te ha ido por los momentos?—Me pregunta mientras da un mordisco a su comida a lo que le relaté algo enojado todo lo que me ha pasado hasta el momento— Ya tranquilo que lo mío tampoco es fácil.

—Lo tuyo es más fácil, solo tienes que hacerle caso a tu Sugar Daddy

—Samuel cierra la boca—Se sonroja y me da un pequeño golpe

—Sabe que es verdad, tú tienes el más fácil y el más divertido para ti. Lo que falta es que te pida para follar y le regales el culo

— Cállate, sabes que eso no va a pasar…—Me dice decaído

— ¿Qué no va a pasar?—De repente el jefe llega por detrás y se pone entre nosotros pero más cerca de Alex.

—¡N-Nada!—Se apresuró a decir Alex—Tranquilo jefe, no es nada grave—Le expliqué al jefe a lo que él me miró no muy convencido.

—Si ustedes lo dicen, me retiro ¡Buen provecho!—Sonríe para luego agarrarle los cachetes a Alex y besarle la frente e irse como si nada

Alex, por el shock del momento empieza a tartamudear y ponerse completamente rojo como un tomate—Tierra llamando a Alex, responde Alex—Dije intentando llamar su atención pero siendo un rotundo fracaso. Alex se quedó perdido en sus pensamientos imaginando escenas no aptas para menores, él es un pequeño muy pervertido. Después de unos minutos por fin logró decir algo en un pequeño susurro—Ya no me lavaré más la frente—Me reí.

Al finalizar el almuerzo seguimos con nuestros trabajos como si nada excepto porque Alex temblaba un poco, el tontito está demasiado enamorado de nuestro jefe que por cierto se llama Francisco Garnes, Staxx o Frank para la gente de confianza y lo sé porque escuché a Luzu decirle así. Luzu es otro encargado de la empresa y es el mejor amigo del jefe, se rumoreaba que son pareja pero es completamente falso ya que luzu está casado con una rubia de nombre Lana.

Terminada la jornada de trabajo busqué a Alex para despedirme, luego de un rato buscando lo encontré con el jefe, estaban acomodando unas cosas—Nos vemos Alex, hasta mañana—Me despedí mientras lo abrazaba por detrás a lo que él se sobresalta y casi tirando lo que tenía en manos—Coño Samuel no me eches esos sustos—El esconde algo detrás suya pero no le tomé importancia—Hasta mañana—Se despide mientras me separaba y volvió a lo que hacía.

Caminé hasta donde dejé mi coche en la mañana, lo encendí y conduje inmediatamente hasta mi hogar. Al llegar dejo el carro en el garaje y entro a mi casa— Que buen inicio de semana— Dije mientras me estiraba un poco para desentumecer mi cuerpo. Caminé hasta la cocina para hacerme una saludable cena y mientras cenaba veía algunos vídeos de lugares de Madrid. Luego de cenar limpié todo y me dirigí a darme una ducha rápida, me puse mi pijama de unicornio y me acosté en mi cama para luego quedarme profundamente dormido.

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Modificado 2021 uwu