Capítulo: 05

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Segunda parte del capítulo cuatro.

¡Es tan bueno el haber terminado!

Mujeres lindas, sin ataduras ni preocupaciones, viviendo con mi amigo mientras disfruto de la mejor vida sexual que cualquier hombre podría desear ¿Qué podía ser mejor que eso?

Domingo a las once y ya estaba llevando a otra chica completamente diferente a mi piso, ella era rubia, unos grandes ojos y mucho más delgada que Heejin, su cabello tenía ondas, además de que estaba muy bien vestida, caminábamos con tranquilidad mientras me hablaba de su mejor amigo, Johnny. Vaya nombre de perro tenía ese sujeto.

Observé las frías calles de la ciudad, estábamos ya cerca de casa y eso estaba bien, no quería congelarme más en tal horrible invierno, no dudaba que pronto nevaría y para entonces esperaba estar en mi cama con Jinsoul, pasando un muy caliente momento.

Jinsoul me señaló con un poco de descaro a uno de los hoteles más conocidos de por los alrededores, agudicé mi vista y me encontré con lo que ella tanto estaba admirando, un chico enorme y castaño tenía sujeto de la cintura a uno un par de centímetros más bajo, delgado y con cabello negro.

—Sí... —Susurré, había algo raro ahí, algo que no me hacía sentir que fuera una pareja como cualquier otra.

—Están saliendo del hotel ¡Dios! ¡Vaya que son lindos! Jamás había visto una.

Mientras ella estaba más que entretenida en su descubrimiento, los chicos se detuvieron cuando el más pequeño sintió frío y el gran castaño se quitó la chaqueta para ponérsela sobre los hombros, fue por esa fracción de segundo que el de más bajo giró su rostro que sentí algo dispara justo en medio de mi pecho, mis piernas temblaron y mis manos se contuvieron en fuertes puños, junto con un muy raro escozor en mis ojos.

Hoseok...

Era Hoseok, saliendo de un hotel.

¡Con un hombre!

Capítulo: 05

—Oh... ¿Nos viste?

Solté un bufido cuando me respondió de esa manera. Inevitablemente, después de ver a Hoseok con ese estúpido, llevé a Jinsoul a su casa diciéndole que había recordado tenía un pendiente que atender, cosas de la Universidad. Ella al parecer entendió y si no lo hizo, ni siquiera me di cuenta, yo tenía la esperanza de encontrarme a Hoseok en casa cuando volví, pero no estaba... Y no llegó hasta altas horas de la madrugada, lo sé porque lo esperé hasta casi las tres antes de que el sueño me ganara.

— ¿Quién era ese? —Ignoré su estúpido comentario ¿Por qué actuaba tan normal?

Encima que me hizo preocupar y no contestaba a su celular ¿Ahora me respondía de esta manera tan casual?

No podía ser más estúpido. Apreté mis puños para no decir algo más, mientras me acercaba más hacía él. Hoseok estaba de espaldas, secando los platos que teníamos desde la mañana anterior en el fregadero.

—Un chico de la Universidad, no creo que lo conozcas... Va en grados superiores.

Bueno, eso era algo, había deseado partirle la madre a ese estúpido, ahora sabía que cuando me lo cruce, pues ya tendría una razón para hacerlo.

— ¿Y entonces...? ¿Cómo? —Volví a cuestionar, sintiendo de nuevo ese dolor en el pecho, tratando de ignorarlo cuando Hoseok volteó a verme, arqueando una ceja, actuando como si mi comentario fuera algo completamente tonto.

—Lo conocí una vez en los baños, yo me estaba preguntando si él era igual a mí, y al parecer sí lo es.

— ¿Igual a ti? ¿Acaso crees que eres uno de ellos?

Good friends [Taehope]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora