En un angevo roble vivía una pequeña ave,
cada mañana cantaba al despertar,
vacío el pajar en el que sólo él cabe
todo en silencio como nunca solía estar.
Días y noches pasaban sin respuesta,
el roble perdía el deseo de florecer,
cuenta el lindo cielo y sus lluvias
qué el árbol vive pero muere por él.
ESTÁS LEYENDO
Desde mis entrañas
PoesíaPoesía, quien por más vieja más bella. Recuerdos de mi mente cuando escribí aquel día en febrero "Niégame" poesía intima desde lo oscuro y secreto de mi alma. Amar con pasión lo que desde niño añoré, el deseo de tener lo que nunca tuve lo conseguí c...