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El reloj marcaba las doce de la media noche y taehyung recorrió su habitación con desdén. En el techo habían algunas estrellas que tenía cuando era un niño, ahora que había crecido no tenía la libertad que cuando era un niño. Cuando el era un pequeño, su imaginación no tenía límites, adoraba jugar con su hermanastro y este siempre era bueno con el, lamentablemente jeon era algunos años mayor que el y a pesar de que su físico cambio bastante, su actitud sobre protectora no lo hizo. Estaba completamente mal, no podía hacer eso, enamorarse de su hermanastro estaba mal, terriblemente mal.
— Tal vez siga despierto — Se levanto de su cama, tratando de no hacer mucho ruido con sus pies descalzos, caminando con lentitud hasta la habitación de jungkook. Se podía ver que la habitación aun estaba encendida, probablemente estaba terminando algún trabajo de la universidad.
Abrió lentamente la puerta, mirando por un pequeño espacio — ¿Hermano? — Susurro, sin embargo solo recibió pequeñas quejas las cuales no sonaban exactamente normales. Prestando mejor atención, dirigió su vista hasta su hermano, quien estaba sentado de espaldas en su escritorio, moviendo su mano frenéticamente, gimiendo y en el monitor estaba... La foto de una reconocida cantante.
Tal vez fueron los nervios, la poca capacidad de su cuerpo para actuar con audacia, pues el solo imaginar a su hermano haciendo ese tipo de acciones, causo que una carpa de formaba en su pantaloneta. Cerro la puerta de golpe, tomando con sus manos su parte baja y huyendo cual cobarde al verse en peligro. No estaba seguro de que haría, tampoco que haría si su hermano le llegara a preguntar y en todo caso de que siquiera supiera que era el ¿como le miraría en las mañanas al desayunar?.
Corrió a su cama, envuelto en sus sabanas como una oruga y apretando su parte baja con fuerza. Tenía sus ojos bien cerrados, sus labios apretados con fuerza, se estaba sofocando. Como si de la nada su habitación fuera el mismísimo verano y su cuerpo respondiera acalorado.
Se escucho el sencillo golpeteo de la puerta, llenando a taehyung de un atisbo de miedo. La sola idea de que fuera jeon, le causo un escalofrío que viajo hasta su erección vibrante, mordiendo con fuerza su sabana para no soltar algún extraño sonido.
— Tae tae, ¿estas despierto? — No respondió, pues le era imposible hacerlo. — Sino contestas entraré — Pudo escuchar el sonido de la manija siendo apretada por las manos de su hermanastro, debía hacer algo y pronto.
— ¡E... Estoy bien!, ¡s... solo no entres! — El sonido se detuvo, aliviando a taehyung y dejando que se escapara un suspiro de alivio que fue alcanzado por los oidos de jungkook.
— Entraré de igual forma — Estaba en problemas, pues el sonido de que la puerta había sido abierta le hizo llenarse de un intento nerviosismo. Dejo de respirar por un momento, en cuando sintió su cama hundirse en el borde — Que posición tan curiosa, pareces una oruga — Por una pequeña abertura en las persianas, un poco de luz entro y así puso ver la sonrisa cálida de jungkook.
— D-de verdad... N-no sabía — Apretó mas su entrepierna, esperando que dejara su aparente excitación por la voz ronca de jungkook, sin embargo al parecer esto solo causo palpitaciones en su falo, mordiendo su labio con fuerza y sin mirar a jungkook — Ve a dormir ya es tarde kookie — No recibió respuesta, solo un suspiro lujurioso.
— Tu lo viste ¿verdad? — Su mirada era severa, casi asustando a taehyung quien se hizo cada vez mas pequeño en su espació apretando con mas fuerza.
— ¿Que cosa? — Le costaba hablar, pero podía controlarse.
— Se que fuiste tu, quien me vio masturbándome — La cara de taehyung era un completo sonrojo, no sabía que decir ni que hacer, solo quería ocultarse bajo tierra y no salir nunca jamás. Dejo de hacer presión y se removió un poco para liberar sus manos. Se sentó olvidando - no por completo - su erección.
— ¡L-lo olvidare! — Exclamo con determinación en sus ojos, causando que jeon sonriera burlesco. Taehyung tenía la actitud similar de un pequeño niño, aparte de su aparente belleza física, era un chico puro y alegre. Desde que jungkook tuvo la oportunidad de conocerle, supo que era un valeroso familiar pero al parecer a su cordura se le olvido aquello. Tal vez olvido que sus padres estaban casados - no en las mejores condiciones, pero lo estaban - no podía simplemente tener erecciones por ver a taehyung en poses sugerentes, como cuando buscaba debajo de los sillones y levantaba su trasero cubierto por esos ajustados chándales, cuando comía pastel de leche y quedaba embarrado por la deliciosa crema blanca o cuando soltaba pequeñas quejas al lastimarse.
— No quiero que lo olvides — Pero que mas da, jeon quería a el cuerpo de taehyung y lo tendría de cualquier modo.
— ¿Eh? — Jeon se levanto de la cama de taehyung y fue directo a la puerta, cerrando y poniendo seguro. — ¿Q-que haces?.
— Esta casa es bastante amplia, tu padre y mi madre nos pusieron lejos de su habitación para evitar que escuchemos sus discusiones, además hoy salieron a tomar y sabes que ellos son imposibles de levantar cuando el alcohol les causa efecto — Su sonrisa era todo menos alentadora, su rostro se veía burlón, intimidando a taehyung. — Todo es oportuno ¿no lo crees? — En realidad taehyung no tenía nada que decir, mas que ver a su hermanastro dela te suyo — Es ingenuo de tu parte, pensar que no me e dado cuenta de tu erección — Sonrojado, rápidamente cubrió su entrepierna con una almohada un poco dura.
— Mng ah~ — Un lívido sonido salió de sus labios, pues debido a que era un novato referido a todo lo que fuera tocarse, prácticamente su pene era sensible a cualquier rose mientras estaba erecto.
— Tu jeon jeon te hará sentir muy bien.
