Buscando Mi Lucero© RivaMika [Finalizada]✓

©Capitulo 2

“ Tengo la teoría de que cuando uno llora, nunca llora por lo que llora si no por todas las cosas que no lloro en su debido momento ”
— Mario Benedetti —

🌻🌻🌻

Levi

Regreso a mi casa con mucho ánimo si así se le pude llamar; salir del colegio Titan sería un peso menos — No quiero seguir viendo gente ambiciosa — Aunque sólo haya una posibilidad del 5% que el colegio Alas de la Libertad sea igual; lo intentaré.

— ¡Isabela!

— ¿Qué desea señor Levi? — Agacha su cabeza ante mi, haciéndose inferior a mi algo muy molesto

— Kenny no puede entrar a esta casa, informarle al de seguridad y a todo el personal

— Claro

~▪~

Opté por salir de esta casa para despejar mi mente con algo de ejercicio; al salir del auto encuentro un grupo de chicos y chicas observando mi andar y mi auto, susurrando barbaridades — Gente tan más ilusa — No soporto ver personas de ese tipo.

Entro al gimnasio, está algo vacío, sólo los entrenadores en su hora de almuerzo

— Levi — Grita alguien a lo lejos

Gire mi rostro para observar a la persona que me llamaba, es Erwin que viene con una sonrisa en su rostro

— Pensé que no habías venido, ya que no te miraba comiendo

— Estoy a dieta

— Entonces ¿iniciamos con el entrenamiento?

— Dale

Antes de empezar con los entrenamientos de cardio hicimos un calentamiento para prevenir los calambres; terminamos de calentar e iniciamos con la bicicleta estática

— Me di cuenta que te ibas a transferir a otro colegio ¿verdad?

— Corren rápido los chismes… Si me cambiaré a otro colegio tal vez hayan personas que valgan la pena o no sean ambiciosas

— Las personas siguen siendo igual en todos lados

— ¡Claro! Sólo hay una posibilidad del 5% — No hubo respuesta de Erwin sólo un silencio absoluto.

Coloque mis audífonos en mis odios, busco el álbum donde tengo las canciones guardadas de Twenty One Pilost música muy relajante para mis oidos

Seguí con mis ejercicios tranquilamente, hasta que un correo llegó, pare un momento y leí el correo.

Levi, ven rápido a la casa
Kenny Rivaille

Dejé mis rutinas.

— Adiós Erwin; tengo una emergencia
— Hasta la próxima

Llamé al chófer para que me venga a traerme, salí del gimnasio sin despejar la mirada del correo. Levante mi vista y ahí estaba el chófer esperándome.

— ¿donde vamos señor?

— A la casa

Mi pensamiento no salía de ese correo ¿Para que me necesitará Kenny? No hay cosa peor que el me hable. Mis pensamientos despejados por el chófer.