Jamón y Zorretes (Daria x Saya)

Tomadas de la mano

Nota de la escritora: Atencion, el comportamiento de Saya y Daria en este fanfic no es legitimo al de ellas, ya que no sabria como ellas se desenlazarían en situaciones así. sin más que decir disfruten de la lectura :3

Sentí como el mundo se detuvo por solo un momento... Ese momento en el cual mi mejilla izquierda estaba roja y caliente, pero no por una razón de amor... Sino por otra cosa... Era la mano de mi amada la cual me había abofeteado. Toco mi propia mejilla para después mirar a Daria.

-¡¿Cómo pudiste hacerlo?! –Exclamaba con los ojos llorosos. – ¡Después de haberte abierto mi corazón!

-No, Daria, estás mal pensando todo... -Intento calmarla pero se me era realmente difícil.

-Lo vi con mis propios ojos, Mireya... ¡Con mis propios ojos! –Estaba totalmente desesperada, no sabía qué hacer... Nunca espere que este momento fuera a suceder. Pero no siempre fue así.

Tres meses atrás.

Hace un mes que me había mudado en la misma ciudad que vivía Daria, el primer día que nos vimos y fue súper emocionante. Siempre la había querido achuchar ya que es una de las personas que hace tiempo quería verle cara a cara.

A pesar de que hablábamos mucho por mensajes de Telegram sentía una necesidad de estar a su lado que no era ni medio normal. Durante un tiempo lo consideré amor pero renuncie a la idea de declararme porque sabía que no íbamos a llegar nada. Ese sentimiento aún sigue dentro de mí, no se apago con el tiempo, sino que se hizo aún más fuerte.

Ya que vivíamos cerca la pasábamos muy bien juntas, y me presento a sus amigos. Todo era realmente bonito, pero cada vez me sentía más insatisfecha conmigo misma y con nuestra relación de amistad. Quería ser algo con ella, pero no sabía si ella sentía algo por mí... Creo que le tenía miedo al rechazo, y después de mi última relación tenia un poco de inseguridad.

Un sábado nos quedamos solas en un parque. Aquel día nos habíamos reunido a pasarla bien con nuestros amigos pero poco a poco todos se fueron a hacer sus cosas... Siempre que la miraba me quedaba atontada y cada vez que me hablaba... Sentía como mi pequeño corazoncito se aceleraba levemente, creando una sensación de opresión que solo era capaz de liberar suspirando ocasionalmente.

Nos encontrábamos sentadas en columpios hablando tonterías, algún que otro tema de hacer covers juntas, pero hubo un momento en que se hizo el silencio durante unos segundos. Tenía mi mente en blanco y no sabía que más decirle, sin embargo ella rompió el hielo con una pregunta que siempre iba a recordar.

-Oye, Mire, desde que llegaste aquí. ¿Te sientes cómoda? –Volteo a mirarla, ya que se me hizo rara la pregunta.

-Esa es una pregunta un tanto rara.

-Sólo contéstala –Me dice mirándome a los ojos y por alguna razón siempre me perdía en su mirar... Esta chica simplemente era maravillosa...

-No, hay algo que se me resulta un poco incomodo... -Le respondo mirando hacia otro lado.

-¿Y qué es lo que te incomoda? –Me quede totalmente callada, no sabía si responderle porque la verdad me incomodaba el hecho de sentir lo que siento, y no tener el coraje de decírselo... Y hablarle como si fuera una simple amiga. -¿Piensas decírmelo? –Interroga de nuevo al yo no soltar ni una sola palabra.

-Yo... No sé si deba... -En ese momento, ella se levanto del columpio y se coloco enfrente de mí. 

-¿Daria? –Interrogo un poco extrañada por eso.

-¡Estoy harta de esa actitud! ¡Siempre quieres decirme algo pero a la final nunca te decides! –Mis ojos se abren de par en par y mi corazón se coloca a palpitar como loco, me estaba poniendo realmente nerviosa. – ¡Somos amigas, ten más confianza en mí!

Suelto un suspiro al saber que era imposible seguir ocultándolo más y ya debía dejar de ser tan cobarde, debía enfrentarme a mis sentimientos... Debía decírselo todo. Me levanto de mi columpio y de frente la miro a los ojos.

-Me gustas Daria –Ella se quedo en total silencio, simplemente estaba esperando su rechazo. Pero no fue así... Sin decir una sola palabra aquella chica que me volvía loca me envolvió en sus brazos, dándome un cálido abrazo.

Nosotras nos abrazábamos mucho y siempre iban en plan de colegeo, pero este abrazo era diferente... Iba a decir algo al respecto pero mi voz no salía, fue en ese momento cuando su melodiosa voz cerca de mí pronuncio aquellas palabras que darían el comienzo a todo.

-Tú también me gustas... -Un alivio lleno mi ser en ese instante, por alguna razón tenía varias emociones mezcladas. Entre nervios, angustia, felicidad... Y amor...

Lentamente mis brazos se fueron aferrando a su espalda, correspondiendo su abrazo. Después de unos instante de permanecer así ella se separa un poco de mí. Estaba realmente cerca pero aún así no quería quitarle la mirada de encima.

-Mire... -Dice en voz baja para así levantar un poco mi mentón y acercarse un poco hacia mí. Cerré mis ojos lentamente, mientras sentía como sus suaves labios de algodón tocaban los míos. Por un momento sentí que estaba en las nubes, y aunque el beso no duro mucho realmente lo disfrute como nunca.

Nos volvimos a mirar y con una sonrisa tonta que se me había dibujado en el rostro ella acaricia mi mejilla levemente con su mano, para así regalarme una sonrisa. Me sentía en la cúspide total... Decidimos irnos de aquel parque, y continuamos hablando de nuestras tonterías y más cosas... Pero con la única diferencia de que... Estábamos tomadas de la mano. 

Creador de la portada: @AlenShadow (En Twitter)