Al día siguiente me dirigí con prisa a la clase que me tocaba, donde Atary me había guiado el día anterior. Dentro ya se encontraban algunos estudiantes que conversaban sobre una serie de televisión que al parecer era nueva y otros sobre una fiesta que al parecer iban a celebrar en alguna habitación. Mientras terminaba de sacar los materiales para la clase, busqué disimuladamente con la mirada a Atary pero, al parecer, todavía no había aparecido.
Suspiré. Decidí subrayar algunas hojas de mi libro de la asignatura que me tocaba a continuación y repasé mentalmente la conversación que había mantenido con mi madre durante la noche, donde me preguntaba si había cumplido lo acordado con ella.
Me sobresalté al escuchar una silla chirriar al moverse del suelo y me giré, observando como Atary se sentaba en la otra esquina, en el que parecía su asiento preferente. Dudosa, me debatí mentalmente sobre si acercarme o no a agradecerle en persona la ayuda que me había brindado pues debía de reconocer que me había salvado y además había chocado con él y después había salido corriendo sin mirar atrás. Pero mi cuerpo se mantuvo rígido al observar a las dos chicas que se habían burlado de mí y como la que me había hablado se acercaba y le susurraba algo a Atary antes de sentarse en su asiento y mirarme con aire triunfal.
Avergonzada, tapé parte de mi rostro con algunos mechones y disimulé subrayando un poco más de texto antes de volver a mirar a Atary, el cual se encontraba tecleando algo en su teléfono móvil. Parecía un tema serio, sus cejas negras se juntaban formando unos pliegues sobre su frente y estaba mordiendo de forma inconsciente parte de su labio inferior.
Era un chico realmente guapo pero parecía peligroso, seguramente de ese tipo de chicos que aparecían en las novelas que mi madre no me dejaba leer, donde fumaban, asistían a fiestas y hacían carreras o apuestas ilegales para ganar dinero. Sin olvidarme del hecho de seducir a chicas y llevárselas a la cama para después ignorarlas. Y bien sabía yo que no era el tipo de chico que buscaba y mucho menos aceptarían mis padres. Yo quería un novio apuesto, inteligente y maduro cuyos objetivos en la vida fueran trabajar y formar una familia, aceptando el hecho de que yo fuera una chica creyente y practicante y respetara mi deseo de llegar virgen al matrimonio. Además, mi madre tenía otros planes, ella quería a mi vecino Richard como futuro marido y cuando algo se le metía entre ceja y ceja, nadie podría pararla hasta conseguirlo.
Suspiré. Quise tener un arranque de valentía y acercarme pero me sentía presionada y observada por esas chicas. Atary parecía leer mi mente porque en ese instante sus ojos conectaron con los míos y mi corazón empezó a latir con fuerza, por lo que bajé la cabeza y sujeté mi dije con fuerza, tratando de calmarme.
Por suerte el profesor no tardó en aparecer y empezamos un tema que él denominaba candente en la actualidad: Motivos que generan bestseller entre el público femenino.
ESTÁS LEYENDO
Atary [Pecados Capitales] #1
VampireLaurie es una joven de dieciocho años educada bajo una serie de reglas inculcadas por su autoritaria madre: No salgas de fiesta, no te emborraches, no mientas, no te enamores, no peques. En definitiva, no caigas en la tentación. Siempre ha sido dulc...