ALMAS ANCLADAS (Harry Potter, 3° generación)

Capítulo 26

Lily no debió correr para llegar a clases temprano. Sin embargo, lo hizo, chocandose con cierto chico rubio que trataba de evitar.

- Hey -. Dijo Scorpius. - ¿A donde vas tan rápido, chica Potter?

"Lils", ella pensó, tú me llamabas Lils. No creía que fuera saludable volver a verlo, sabiendo que no recordaba nada de ella.

- DCAO -. Murmuró la chica. - Llego tarde

Y se supone que Scorpious sabía eso. Él sabía todos sus horarios, iban a clases juntos. Scorpius le había ayudado a practicar hechizos que no le salían, a estudiar cuando se estaba muriendo de sueño. Y ahora ni sabía a donde se dirigía.

- Bueno, mejor no te atraso

Y se apartó de su camino. Lily, sintiendo como su corazón se desmoronaba, siguió avanzando hacia el salón de Defensa contra las artes oscuras.

El resto del día no fue mejor. Extrañaba sentir la presencia de Scorpious a su lado. Estaba acostumbrada a que él se apoyara en la mesa mientras comía o conversaba con Tina. Pero ahora no estaba, en cambio, lo podía ver en la mesa de Slytherin riendo a carcajadas de algo que Albus le había dicho. ¿Seguiría besándose con su hermano? Esperaba que la respuesta fuera no. No soportaría si algún día Albus se apareciera en la casa diciendo que él y Scorpious eran novios.

Entonces el rubio miró en su dirección, sus ojos grises encontrándose con los verdes de ella. Lily volteó la cabeza rápidamente y se encontró con la mirada de Tina.

- Por cierto, ¿qué pasó después de que fueras a la casa de los Malfoy?

La miró. No estaba de humor para contarle a su amiga lo que había pasado. Que ahora Scorpious no se acordaba de lo que habían pasado juntos.

- Después te digo -. Murmuró.

Sintió que alguien le tocaba el hombro. Finn Thomas-Finnigan la miraba preocupado.

- ¿Estás bien después de lo de...?

- Sí, Finn. Estoy bien, gracias.

El chico asintió. Miró en la dirección de Lily, hacia Scorpius y Albus.

- Albus... ¿Está bien?

La pelirroja asintió.

- Todavía tenemos pesadillas sobre eso pero... todo bien.

Finn apretó los labios y volvió a mirar a Albus. Como no dijo nada, Lily se volvió a Tina, que la miraba con cara de ¿como es que tu ex sabe lo que pasó y yo no?  Iba a decirle a Tina que le explicaría después de comer hasta que Finn habló:

- ¿Sabes si Albus está saliendo con Scorpius?

Lily creyó que nunca iba querer tirarle un puñetazo en la cara al chico tanto como la vez que le dijo que ella le era infiel con otro, pero al parecer sí. Finn debió darse cuenta aue había tocado una fibra sensible y se disculpó.

- Solo quería saber -. Murmuró.

Luego se dio la vuelta y la dejó en paz. Lily suspiró y se apoyó en la mesa.

- Venga, Lils. Vamos a la sala común.

A regañadientes, siguió a Tina. Cuando llegaron a su habitación, explotó: Le contó todo lo que había pasado en la mansión Malfoy, lo que pasó en el bosque, y, por fin, la decisión de Scorpius. Tina era buena consolando a la gente. Dejó que Lily se apoyara en su hombro mientras sollozaba.

- Lily, piensa que ahora es feliz.

- Su padre está loco.

- Pero sigue siendo su padre, entiende que no tuvo mucho tiempo para conocerlo.

Lily sabía que estaba en lo cierto, pero no quería admitirlo. Con un suspiro tembloroso, se separó de Tina.

- Gracias.

- Para eso somos amigas, ¿no?

Lily sonrió.

- Voy a mandar una carta a mis padres.

Después del incidente de las vacaciones, sus padres se habían vuelto aún más sobreprotectores. Albus y Lily no tenían permitido ir a la mansión Malfoy. Hasta James, que no se hablaba con Scorpius, no podía ir. Obligaron a Albus y a ella prometer que enviarían cartas todos los días.

Por eso, Lily se dirigía a la lechucería, para avisar a sus padres que seguía viva y en una pieza.

Maldito sea el momento en el que el señor Malfoy se había vuelto igual de sobreprotector que sus padres.

Scorpius miraba como su lechuza emprendía el vuelo, para luego mirarla a ella y sonreír. Lily bajó la vista. No quería que la viera sonrojada.

- Hola, Lily.

- Hola.

El chico rubio miró la carta que tenía en la mano.

- ¿Te ayudo?

La chica pelirroja negó con la cabeza. Se acercó a su lechuza blanca y ató la carta. Se armó de valor y giró hacia Scorpius.

- ¿Estás saliendo con mi hermano?

Había planeado preguntarle más sutilmente, haciéndole plática para luego preguntarle "casualmente". Pero las palabras salieron de su boca sin permiso, haciendo que el chico se sorprendiera.

Después de unos segundos para asimilar la pregunta, el rubio sonrió.

- ¿Te molesta?

Eso fue suficiente para que Lily se rompiera más de lo que estaba. Su hermano sabía lo que sentía por el chico, ¿de verdad sería tqn cruel como para hacer eso? Aguantando las ganas de llorar, se dirigió a la puerta para irse corriendo de ese sitio.

No se esperó que Scorpius la sujetara de la muñeca.

- Oye, no te molestes. No estoy saliendo con tu hermano. Solo era una broma, pero creo que no te agradó.

- ¿No son novios? -. Preguntó.

- Nop. Estoy soltero, por si te interesa -. Oh, claro que le interesaba. - No, espera, tu familia me da miedo. Mejor... ¿estás llorando?

Lily se maldijo así misma. Se secó las lágrimas con el dorso de su chaqueta.

- Lo siento, yo...

- ¿Quieres que sea el novio de Albus? Oye, no sé que hice, pero no me gustan los...

- ¡No quiero que salgas con Albus!

Scorpius levantó una ceja. Lily recordó el tiempo en el que le gustaba mirar hacerlo eso, ya que ella no podía.

- Entonces, ¿por qué lloras?

- Eso no te incumbe.

El chico parpadeó, luego la miró y volvió a parpadear.

- ¿Qué pasó en vacaciones? -. Preguntó, agarrando a Lily de sorpresa.

- ¿Qué?

- ¿Fuiste a mi casa?

Lily empezó a ponerse nerviosa. Se supone que nonse acordaba de nada ¿cierto? ¿Debería contarle? Pero no podía, sería extraño para los dos. Ella quedaría como si estuviera desesperada.

- No sé de que me hablas.

Dicho esto, salió rápido de la lechucería, dejando dentro a un Scorpius confundido.

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Matenme si quieren, en serio, ya no hay problema.
Lamento mucho haberlos dejado, trataré de actualizar en estas dos semanas de vacaciones que tengo (enfatizo el trataré, no sé si lo lograré)
Gracias si siguen acá después de meses sin actualizar, se merecen el cielo :3

Con amor,
Taiana ❤️