Solo Mío

Amigos - 2

- ¿Esa fue la última caja? -Sasha cargaba una caja llena de mis libros- ¿Por qué pesa tanto?

-Tiene libros-le respondí mientras le señalaba donde dejarla, lo que no tardó mucho en hacer

Sasha se dejó caer en mi nueva cama tan pronto como dejo la última caja en el suelo, habíamos tardado alrededor de una hora en descargar el camión que trajo todas mis cosas a la casa de Axel. Él había salido a hacer unas diligencias, pero dijo que no tardaría mucho en volver.

Estamos en vacaciones de verano, por lo que espero poder acoplarme a mi nuevo hogar antes de que inicien las clases. Mis padres se veían bastante tristes cuando nos despedimos, pero les prometí que les llamaría semanalmente (porque diariamente ya sería pasarse), además de que les contaría sobre los progresos que hiciese la doctora Tsifae (se ha encargado de mi caso desde el comienzo).

La madre de Axel, tan pronto él le dijo, se contactó con mis padres y hablaron de los detalles. Ella se oía muy animada con la idea, y le pareció que lo mejor sería que me mudase con ellos antes de que iniciasen las clases, a lo que mis padres le dieron un visto bueno inmediatamente.

-Lamento no poder quedarme a ayudarte a desempacar, pero mi lindo tesoro bello y yo iremos a ver una película que salió recién-Sasha se levantó rápidamente de mi cama y se encamino a la puerta

-No me digas que es la súper románticamente empalagosa que salió hace dos días-suspire cansado y me tire en la cama

-Para que decirte que no si si pues-ella se tapó la boca mientras reía escandalosamente (aun después de tantos años no entiendo para que lo hace)-Nos vemos mañana-se despidió y salió rápidamente, dejándome solo con mis pensamientos y sueño

Después de unos minutos escuchando música de piano termine dormido en la espaciosa cama sin desempacar nada en lo absoluto. Al despertar, Axel estaba terminando de arreglar mi habitación.

-No tenías que hacerlo-gruñí

-Pero ya lo hice-me gruño devuelta

-Entonces yo haré la cena-me levante de golpe, tan rápido que me empezó a doler la cabeza

-Nada de eso, si mi madre te encuentra haciendo la cena me matara-puso sus manos en mis hombros-y me gusta estar vivo-me devolvió a la cama

-Y a mí no me gusta no hacer nada-me quite sus manos-mucho menos deber un favor-me levante

-Genial, entonces tu llevaras a pasear a Princesa en las mañanas de ahora en adelante-me volvió a sentar-Buena suerte con eso

Se retiró de mi habitación, no sin antes avisarme que la cena estaría lista en una hora y que a Princesa tenía que sacarla a pasear a las seis de la mañana. Lo cual realmente no me molesta ya que a esa hora normalmente estoy memorizando canciones de piano para el club de música, algo que realmente me encanta, principalmente porque me dan la oportunidad de tocar el piano en el colegio.

Busqué mi cuaderno de apuntes y lo encontré justo en el escritorio, en la pequeña gaveta que tiene en la parte inferior derecha. En el estaban escritas al menos 15 canciones de piano que había sintetizado de manera que fueran más fáciles de tocar y aprender para los novatos a los que ayudaba, todas provenían de un juego de piano (que lastimosamente no he tenido la oportunidad de jugar por mí mismo) que tenía canciones muy variadas y bonitas.

-Debería agregar otras dos antes de que inicie el nuevo escolar-pase rápidamente las paginas hasta parar en la última canción-practicare esta tan pronto entre

I can not say, es una canción que originalmente no tenía piano, pero el juego hizo que cayese de maravilla con la canción, además de que la dulce voz de la cantante y compositora me tranquiliza de una manera que jamás hubiese podido imaginar.