Capítulo Dos. .

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Desperté exactamente en el mismo lugar y de la misma manera de siempre, pero eso no es importante.
Entre a mi habitación, me duche y demás.
Creo que comer en este lugar de verdad está acabando con mi apetito.
Camine hacia el comedor, tome mi desayuno y me dirigi a mi mesa, saben a quien encontré ahí? a mi querida amiga Sam.
Decidí ignorarla y sentarme a desayunar igualmente, hasta que me dirigió la palabra.

- Hey TN, ¿Cómo te encuentras el día de hoy? - me hablo contenta y llena de confianza, decidí no responder y continuar comiendo, la escuché suspirar pesadamente - Oye, se que te trate mal pero realmente quiero arreglar las cosas contigo, ¿que dices? ¿amigas? - vi en sus ojos un brillo esperanzador cuando voltee a observarla, me encontraba tan confundida, ¿por qué ella? ¿y por qué ahora? - Y. . ¿qué te parece? - insistió con una sonrisa, se veía honesta, aunque. . - No lo sé. .- respondí en un bajo tono de voz ella al parecer llegó a oírme. - No te preocupes, lo entiendo. . - sus ánimos parecieron haberse esfumado y su sonrisa fue reemplazada por una expresión de tristeza.
- Aunque si cambias de opinión podrías acompañarnos hoy en la noche, nos juntaremos en uno de los cuartos a pasar tiempo por si quieres venir - al terminar de hablar se marchó, dejándome allí sentada, confundida por su repentina actitud amigable.

[. . .]

Ya eran las 1 de la madrugada y todas las empleadas se encontraban dormidas, ya que acostumbramos a dormir a las 10. Seguramente me arrepentiría más tarde pero de verdad necesitaba saber por qué, por qué me invitaron a mi. Salí lo más cautelosa posible de mi cuarto y entre en la habitación que me habían dicho.

Al entrar pude notar las miradas de todos en mi, fue bastante incómodo.
Esperaba lo peor y típico en una película aunque no fue así, todos se comportaron amigables conmigo. La pasamos bien y cuando casi iban a hacerse las 3 de la madrugada a una de las niñas se le ocurrió contar una historia de terror.

- ¡Chicos, chicos! ¿Ustedes saben lo que dicen sobre este bosque? - hizo una pausa para crear tensión y despertar el interés en los otros, luego continuo - Dicen que en él habitan los asesinos más peligrosos y sanguinarios, criaturas extrañas y tenebrosas. - se quedo callada para despertar aún más intriga en los demás, algunos ya lucían bastante asustados - Una de ellas es conocida como "Slenderman", un monstruo de apariencia semejante a la de un hombre, dicen que no tiene rostro, su piel es pálida y blanca como la nieve; viste de traje y posee unos peligrosos tentáculos para ayudarlo a despedazar a su víctima. - a este punto todos lucían aterrados, incluyéndome. - ¿Y saben que me dijeron también? Que sus víctimas favoritas ¡son los niños! - pegó un grito asustando a todos, algunos se enojaron y comenzaron a reclamarle mientras que ella simplemente reía.

- ¿Por qué no vemos si lo que dicen es real?, alguno tendrá que salir afuera para comprobarlo; contará hasta diez y si no sucede nada "paranormal" vuelve a entrar. ¿les parece? - todos o al menos la mayoría estuvo de acuerdo con la idea de aquella otra chica, tengo un mal presentimiento sobre esto.

- ¡De acuerdo! ¿quien va primero? - preguntó esta vez un niño, todos voltearon a verme. Estaba por negarme cuando siento como me sujetan por detrás dejándome sin movimiento en mis dos brazos, me asuste y intente soltarme pero mas de ellos me sujetaron y a la fuerza me empujaban en dirección a la puerta para que saliera del orfanato. Lograron empujarme fuera y cerraron la puerta detrás mío.

- ¡Hey, esto no es divertido!, ¡déjenme entrar! - todo se veía muy oscuro, hacia frío y tenia miedo - ¡Debes contar hasta diez! - Me puse a llorar mientras contaba con la voz temblorosa y entrecortada por el llanto, golpeaba la puerta inútilmente. Ya no oía risas, se habían ido.

- ¡¿Quien esta ahí?! - pregunté aterrada, había escuchado unos pasos demasiado cerca de mi ¿y si se trataba de aquel monstruo del que hablaba aquella niña?

- . . . - no respondió, pero yo sabía que ahí había alguien o algo, su sombra era demasiado alta para ser una persona "normal", eso no era humano. Lo escuche dar pasos y intente retroceder pero la puerta cerrada detrás mío me lo impedía, tenia demasiado miedo.
Creo que me desmaye del susto o algo así, ya que todo se volvió obscuro y al otro día desperté en la cama de mi habitación.

Raro, pero decidí ignorarlo como si hubiera sido un sueño. Un horrible sueño.

Otro capítulo editado,, yey¿

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Otro capítulo editado,, yey¿

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