《chapter one•School》

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《capítulo uno•Escuela》

LA MUJER RUBIA REDUJO SU TAMAÑO Y SUSPIRÓ. Zeus la había citado a ella y a Poseidón para hablar de un tema que desconocían ambos.

Subió a la terraza del Empire State mientras era seguida por el Dios de ojos azules, pudo ver al Dios del Rayo apoyando un brazo en la pared de alambre mientras miraba hacia el cielo que era decorado por nubes grises que parecía que en cualquier momento iba a llover.

-Hermano -saludó Poseidón pero Zeus no lo miró.

-Zeus -saludó igual la Diosa.

-¿Qué ven ahí? -Preguntó señalando las nubes.

-Nubes de tormenta -respondieron el Dios de los Mares y la Diosa del Amor al unísono.

-Sin rayos... robados -declaró Zeus por fin mirándolos y se dio vuelta caminando por el espacio.

-¿Qué quieres decir? -Preguntó Afrodita sin entender.

-¿Piensas que yo lo robé, hermano? Tenemos prohibido robar nuestros poderes -se ofendió el hombre hacia su hermano.

-Nosotros sí, pero nuestros hijos no -los miró como si estuviera acusándolos.

-¿Estás loco? No veo a mi hija desde que era una niña -bramó Afrodita acercándose a pasos rápidos a Zeus encarandolo.

-Y yo no veo a mi hijo desde que era un bebé, ninguno sabe de nosotros -habló el ojiazul molesto, no dejaría que nadie hablara mal de su hijo.

-La omnipotencia te ha cegado -afirmó la mujer con indignación.

-....

-No dejaré que le toques un pelo a mi hijo -negó Poseidón tomando el cuello de la camisa de su hermano mayor pero éste se soltó bruscamente.

-Si no son los ladrones del rayo tendrán hasta el 25, el día del solsticio de verano, sino, las consecuencias serán grandes -declaró.

-Zeus, escucha, esto no es propio -intentó Afrodita hacerlo entrar en razón-. Deberíamos discutirlo en un Consejo, investigar quien el verdadero culpable -ella no dejaría que su hija saliera perjudicada.

Sus Ojos Cambiantes ーP. JacksonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora