My promise, is a promise

Melissa.

Desperté en la cama de mi habitación, no recuerdo a verme quedado dormida, sólo recuerdo estar con Matt, y platicar.. Mire alrededor de mi cama buscando señales de el pero no estaba, se había ido.

Me levanté, lave mi cara, cepille mis dientes, luego mi cabello y por último baje a desayunar, cuando bajaba escuche ruidos en la alacena...

-Matt..? -dije bajando cuidadosamente

Pero no contestaron así que agarré un palo de golf que había ahí, probablemente del esposo de mi madre. Me acerque a la cocina y cuando vi un movimiento tras de mi actuando por mis reflejos rápidamente gire con el palo en la mano y lo golpee en la cara. Y ahí acabo mi vida.

"Había golpeado al esposo de mi madre, o la que se hacía pasar por madre."

-Joderr! -grito el tipo tapándose la cara con sus manos rápidamente salió mi madre de la cocina gritándome lo estúpida que soy.

-En mi defensa, debieron de avisarme que llegarían ahora. -me encogí de hombros.

Mi madre obviamente me ignoro y siguió con su estúpido esposo revisando le la cara, trajo hielo y se lo puso en toda la cara. Uuuh, que asco, deberían verle la cara. Está más deformada de lo que ya estaba. No se sí reírme o preocuparme por mi vida. Seguro mi madre me matara más al rato.

-Estas consciente de lo que hiciste skylar ? -Aquí vamos! Mi mamá ya empezó. Habrá hasta 4 guerra mundial.

-Si.. -dije haciendo una mueca -Me han servido las clases de defensa que tome cuando era pequeña, lo recuerdas?

Me dio una mirada asesina y volvió a atender a su rata que tenía como marido.

-Buenos días -sonreí y subí rápido a mi habitación antes de ser degollada por mi hermosa y fabulosa madre.

Me duche y luego me cambie para salir, tengo que ir al instituto. Baje y el esposo de mi madre estaba recostado en el sillón con una bolsa de hielo nueva. Sonreí divertida y salí rápidamente de casa para evitar un suicidio.

Llegue al instituto y lo menos que quería era lo que me esperaba, todos murmuraban cosas y me miraban, fue horrible.

Mire a amenazante a una tipa que dijo que era una bruja demente. Esta se hecho hacia atrás y me miro con miedo.

-No soy ninguna bruja loca, maldita idiota. -le grite y todos me miraban asustados y supe que estaba enojada, dios no, controla te. La tipa se desmayó y yo sólo me fui por el pasillo haciendo que todos se pegarán a las orillas como si yo apestara.

Y entonces apareció Andy entre todos.

-Hey.. -susurro abrazando me. -lo siento.

-Es que no puedo ser normal. -le dije llorando.

-Sabes que eres la persona más loca que e conocido, desde que te subiste a bailar borracha en mi fiesta de cumpleaños eres mi loca y de nadie más bebé. -me separe y le sonreí.

-Gracias -el me limpió las lágrimas y besó mi mejilla. -Eres el mejor

-Eso lose -sonrió, rodé los ojos por su ego. -Vamos? -me sonrió -tenemos las mismas clases ahora.

-Si, vamos.. -lo mire -Y Melissa?

-No la miro desde ayer. -Hizo una mueca y alzo los hombros

Me quede pensando, Melissa nunca falta a clases, y no me a llamado por teléfono, es raro.

-Que raro -junte mis labios en una línea

-Si..

Nos fuimos a clase y así pasaron todas las demás, aburridas, mucha gente me miraba con miedo y no se me acercaban, en el almuerzo estaba haciendo fila para comprar algo y me le quede mirando a un chico muy guapo, benditos sus padres... Pero como era de esperarse el chico corrió asustado de mi. No se sí fue mi mirada acosadora o fue que ahora todos saben que soy un maldito fenómeno, no hay mucha diferencia, mi cara era de pedofilia cuando lo estaba mirando.