El dia que me internaron

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Estaba dormida y por fin había despertado. Estaba en una cama acostada en un lugar que no conocía. No me podía mover, ya que estaba amarrada de las manos, cuello y piernas. Tenia tanto miedo que mi cuerpo empezó a arder en llamas, cuando estuve a punto de ser completamente quemada, aparecio un anciano con barba blanca y le dio a un botón. Al darle a ese botón, el techo empezó a soltar agua. Estaba libre y empapada, me levante de ahí rápidamente y me aleje lo mas posible del anciano.

—¡Quien eres!¿Eres un violador pervertido?¡Socorro!— Grite desesperada.

—¡Tranquila, Natsuki!

—¿Donde estoy?— Pregunte al anciano preocupada.

—Natsuki, has incendiado tu casa.— Hablo el seriamente.

—¿Que? No puede ser...— Dije asustada.

—Lo siento pero... Eres una amenaza para la sociedad, y posiblemente, para el mundo. Así que seras internada en este reeducamiento de seres sobrenaturales.— Explico caminando hacia la salida.

—¿Y mis padres, han aceptado?

—Natsuki, tus padres murieron en el incendio que provocaste "tu".

El señor se fue y yo seguí por donde se dirigía.

—Te enseñare tu cuarto.— Explico el.

Caminamos por el internado hasta llegar al primer piso, donde habían solo puertas rojas y un jardín un poco grande. Nos paramos e una puerta y el señor toco la puerta.

—¿Si?— Dijo una chica abriendo la puerta.

Era una chica rubia y guapa, para mi impresión, tenia los ojos azules.

—Es nueva, ocupate de ella.—Ordeno el anciano.

—Vale.

Cuando el señor se fue, la chica me miro emocionada, me cogió la mano y me adentro en el cuarto.

—¡Holis! Me llamo Dana, encantada.— Se presento.

—Igualmente, me llamo Natsuki.— Hable un poco confundida.

—¡Te presentare a los demás!

Se levanto del sofa en el que nos habíamos sentado y salio, luego volvió con un chico de ojos azules, pelo rubio, y una camisa azul.

—¡Este es Adriel!

—¿Quien es esta?— Pregunto Adriel mirandome extraño.

—No seas asi.— Hablo un chico de pelo rosado y ojos verdes.—Encantado, me llamo Axel.

—¡Igual, soy Natsuki!— Conteste.

—Natsuki, Axel es el mas irritante, siempre es demasiado majo.— Dijo Adriel.

—No le hagas caso, el es el rarito. Adriel nunca habla con ninguna chica.— Hablo Axel.

—Vaya...¡Adriel, tienes que sonreír mas!— Le sugerí al rubio.

—Me voy, tengo cosas mejores que hacer.— Dijo Adriel y se fue.

—No le hagas caso, es un idiota.

—¡Ya lo veo! Esta amargado...

—¿Que has dicho?—Preguntó Adriel volviendo rápidamente al cuarto.

—Ha dicho que estas amargado, sordo.— Hablo un chico de pelo morado oscuro con unos ojos grises sin ningún entusiasmo.

—Tu calla, si eres un aburrido.

—¡Y ese es Tarek!— Explico Dana.

—Encantado.— Dijo Tarek con una pequeña sonrisa acercándose a mi para besarme la mano elegantemente.

—¡Este me gusta!— Dije mirando a Tarek.

—¡Bueno, ya basta, me voy!— Añadió Adriel.

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