Mi pacto con la brisa

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Le susurré a la brisa,
con una lágrima en la mejilla,
que algún día,
todos mis sueños alcanzaría.

Pase rachas malas,
donde el folio fue mi almohada,
la tinta eran mis babas,
porque escribiendo me liberaba.

Me cultivé con todo lo que pude,
aun lo sigo haciendo,
escogí mis mayores referentes,
para estar a la alturas de sus versos.

En este mundo de escaparate,
la literatura es revolucionaria,
porque aunque pocos la comparten,
quien lo hace, se sacia.

Los mundo inventados,
los romances imposibles,
las tragedias del asesinato
y las comedias irresistibles.

En mi alma, en todo mi ser,
hay versos, rima y prosa,
que todo lo quiere romper.
Tengo cientos de historias que quiero contar,
miles de cosas que suelo pensar,
reflexiones que se me terminan de olvidar
y sentimientos que quiero expresar.

Le debo tanto a los libros,
tanto a las personas que lo escribieron,
tanto aquellas que me lo recomendaron
y puede que también al destino.

No me considero poeta,
ni mucho menos escritor,
porque aun no les llego a la suela
de esos autores que me dieron la inspiración.

Pero aunque, aún no lo sea,
que aún me queda mucha vereda,
le prometí a la brisa de la primavera,
"dame tiempo y verás lo que me espera".

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⏰ Última actualización: Jan 03, 2020 ⏰

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