Mi perdedor favorito (Richie Tozier)

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El dolor de cabeza me estaba matando, los chicos del grupo gritaban haciendo notar su entusiasmo por el comienzo del verano, mientras que la señorita McDoran entregaba las notas finales anunciándonos en orden de lista, para mi desgracia mi apellido era Sangster, y peor aún, tenía que esperar junto con Richie Bocazas Tozier. Y no me malentendían, el chico me agrada, siempre y cuando mantenga la boca cerrada. Richie es el payaso de la clase, y es un boca suelta, por eso siempre se mete en problemas con Henry y sus amigos.

-Sonia Sangster- al escuchar mi nombre me pare de inmediato, tome mis cosas y me dirigí al escritorio de la señorita McDoran- felicidades, tienes 10 de calificación final. Disfruta tu verano.

-Gracias señorita McDoran- Tome mi boleta de calificaciones y me dirigí a la puerta, escuche que llamaron a Richie, pero cerré la puerta, ya sabía que él tendría una buena nota pero le esperaba un sermón acerca de su comportamiento.

Al salir me topé con Víctor y Belch, marionetas estúpidas y sin cerebro de Henry, al parecer esperaban a su líder.

-Eh Sangster- vociferó Belch mientras se acercaba por detrás.

-Ahora no Belch, me duele la cabeza y no estoy para estar aguantando tus estupideces o las de tus amigos.

-Solo necesitaba saber si no habías visto al tetas que va en nuestro grupo

-Belch, querido idiota, si el chico va en tu maldito grupo, ¿cómo esperas que yo sepa quién carajos es, o a donde se dirige?

-Muy bien capullo si no sabes, pues no sabes, solo que si lo llegas a ver dinos ¿sí?

Entonces vi a un chico gordo que se quedó petrificado al ver a Víctor y Belch que estaba frente a mí. Tendría que darle tiempo.

-¿Para qué?- pregunte tomando a Víctor de la chaqueta y a Belch por el hombro.

-Henry lo quiere coger, porque no le dejo copiar el examen, y reprobó el año, su padre lo va a matar.

-Uh que horrible- mire como el chico bajaba las escaleras a toda velocidad y me agradecía con la mirada- bueno chicos, me tengo que ir.

Camine deprisa y me dirigí a mi casa, tenía mil cosas por hacer, y si no las hacia mi padre se pondría furioso, al llegar a mi casa limpie todas las habitaciones, lave la ropa sucia, acomode los trastes limpios y lave los sucios, limpie las ventanas e hice la comida. Al llegar mi padre, comimos juntos sin dirigir palabra alguna, al terminar mi padre se quedó sentado en la mesa, eso solo significaba una cosa, íbamos a tener una charla diferente.

-Sony, deja esos trastes, y siéntate a la mesa por favor- pidió mi padre sereno, y así lo hice.- ¿recuerdas que cuando eras más pequeña, había un chico que por aquellos tiempos tendría tu edad?

-Si papi, recuerdo que su nombre era Thomas y que mami solía cuidarlo cuando tú lo traías

-Bueno Sony, él ahora tiene 18 años, y su madre, al igual que la tuya, falleció

-Eso es terrible papi, pobre Tom, de seguro la está pasando sumamente malo

-Sonia, él vendrá a vivir con nosotros- dijo papá, supe de inmediato que no solo quería decirme que ese chico vendría a vivir con nosotros, porque en realidad no tenía sentido alguno que lo tarjera a vivir con nosotros porque si, digo de ser así ya habría traído a los niños del orfanato a vivir con nosotros también- Sonia, Thomas es tu medio hermano

Estaba atónita, como era posible que soltara eso así como así. Comprendí entonces porque mi madre y el peleaban tanto cada vez que Thomas venía a la casa, comprendí porque mi madre no toleraba verlo, comprendí que papá tenía otra mujer, pero lo más probable es que mi madre fuera esa otra mujer, ya que Thomas era más grande que yo por 5 años.

-Oh- fue lo único que pude decir- ¿puedo levantarme ahora?

- El vendrá mañana, y cuidara de ti, yo estaré llegando tarde porque trabajare doble turno, te quiero Sony, sé que esto no es fácil de asimilar pero necesito que seas buena- dio un largo suspiro mientras yo jugaba con mis dedos- puedes levantarte, ve a dormir, yo lavaré los trastes de la cena.

Me dirigí a mi habitación pensando en lo sucedido, odiaba el hecho de que mi padre me hubiera mentido, lo odiaba a él, porque estaba con mi madre si ya tenía un hijo, el problema no era el hijo, el problema era que si ya tenía una mujer, porque meterse con mi madre, porque jugar así con todos. Solo queda esperar a ver a mi medio hermano por la mañana, entonces caí en cuenta que tenía 8 años sin ver a Thomas.