INTERNET [kookmin/adaptada]

seventeen

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"¿qué estás haciendo?" preguntó park al momento en el que esas manos se introdujeron por debajo de su bata, mientras el cuerpo ajeno se pegaba más al suyo. trató de mantener la calma al momento en el que los labios de jeongguk se rozaron con los suyos, haciendo que un suspiro escapara de su garganta antes de poder sentir sus cálidos labios presionándose contra los propios.

«sabe a fresas y arándanos» pensó jeongguk, ya sin sentimiento de culpa. sus huesudas manos subieron por sus muslos desnudos, posicionándose en el trasero de jimin; «soy un matador» se dijo con algo de orgullo, enterrando sus dedos en la zona. el más bajo soltó un ligero jadeo mientras sentía la erección en los pantalones del más alto chocar con su abdomen, deslizando su propia lengua por el labio inferior del chico de una forma tortuosa.

park jimin no sabía que hacer, sus manos subían nerviosamente por la cabellera de jeon, tironeándolo un poco. e incluso otro pequeño gemido atravesó su cavidad bucal cuando éste comenzó a presionar su cuerpo sobre su erección.

cuando jimin da un salto, este ya estaba sobre jeongguk, cerrando sus piernas sobre su cadera, comenzando a rozarse tortuosamente sobre él.

«soy un matador, pero este jodido pelinegro me dará un paro cardiaco» comentó en su mente, mientras sus manos -aún en su trasero- comenzaban a incitarlo a moverse más rápido, caminar con el chico entre sus brazos iba a hacer que por impotencia lo acorralara contra la pared más cercana. y es que los labios de jimin parecían estar destinados a los de jeongguk, o al menos eso pensaba él, pues cuando el chico presionó sus dientes sobre el inferior de jeongguk, lo mordió tan lento, tironeándolo hacia su persona con bastante fuerza. él supo que quería a jimin, lo necesit-

"¿jeongguk? ¿estás ahí? te ves extraño, si quieres dejamos esto para otra noche" murmuró desde las escaleras del segundo piso haciendo que las mejillas de jeongguk se tornaran rojizas sin poder mirarlo de frente.

"no no, ve cambiate. corre, yo te espero" dijo el castaño para escuchar como finalmente se quedaba solo, dejándose caer sobre el sofá del comedor. quería golpearse contra la mesa «acabo de tener una fantasia sexual con park jimin, un puto sueño, siento que voy a llorar» se repetía una y otra vez, incluso algo hiperventilado.