Cambios.

Prólogo

En una academia de baile, se encontraba un profesor con sus alumnos sentados al frente y con los padres detrás. Cuando estuvieron todos, el profesor empezó a hablar.

—Bueno chicos, tenemos un viaje a Corea por dos meses, en lo cual elegiré a unos pocos solamente, por decir, elegiré a siete u ocho bailarines— respira profundo y sigue hablando —Si fuera por mi, los llevaría a todos, pero la cosa es que no se puede, se los digo a ustedes y a los padres que están presentes para que no haya malos entendidos y que me pregunten todo los que les haga falta saber— finaliza el profesor.

—Profesor, ¿Por qué razón o por quién tiene que elegir solamente siete u ocho bailarines?— pregunta una alumna muy curiosa por saber.

—Florence, la razón es porque tengo que llevar a personas que se destacan demasiado bien y por quién me ha dicho la cantidad que debe de ser, es Park Sehun— contesta de manera neutral el profesor.

—Y, ¿Por qué 2 meses?, Si se puede saber— pregunta una mamá.

—Por ser una competencia media exigente, y los coreanos, más que todo, son muy avanzados por lo que tengo entendido— responde amablemente el profesor.

—¿Quiénes son los elegidos?— Pregunta otra alumna alegre.

—Bueno Micallef, pero antes que nada, tengo que decir que no se tienen que ofender nadie, ni los padres, porque yo elijo a los que más me conviene a mi para llevar, como dije antes, si fuera por mi los llevaría a todos, pero no es una competencia como estamos acostumbrados a ir, así que no quiero arriesgarme a que los traten mal a todos, por lo tanto prefiero eso, y respeto lo que me dijo Park Sehun, de solamente llevar siete u ocho bailarines, así que no se ofendan y la verdad los aprecio a todos, para mi todos me sirven, en esta ocasión no se puede ir todos; y por último antes de nombrar a los que voy a llevar conmigo, tienen que levantarse y ponerse uno al lado del otro, frente a sus demás compañeros de baile, ¿Entendido?— a lo cual sus alumnos y los padres respondieron con un si —Bueno, los elegidos son los siguientes: Kate, Micallef, Cisco (Igor), Righteous (Marcos), PA (Baker), Florence (Floro), y yo Heather (Nauru)— que ya estaban formados uno al lado del otro. —Bien entonces irían ellos conmigo y espero que me entiendan, yo los adoro a todos, los quiero llevar a todos, pero a la vez los quiero cuidar, a ellos los elegí, por la razón de que ellos se tomarán mejor las cosas, aunque sean duras, no quiero que por esto, sufran los más pequeños y al resto cuando los lleve, porque en Corea, todos son exigentes y te dicen todo como debe ser, aunque duela, te lo dicen, también por eso no los llevo conmigo— responde con suma tristeza.

—¿Por qué no lo llevas a Carlow?, Si dijiste siete u ocho bailarines, puedes llevar a uno mas— pregunta una mamá, en tono medio enojada.

—Bueno, como dije, llevo a los que más me conviene llevar, su hijo, Carlow, se distrae demasiado, se la pasa jugando y aparte es quedado, algo que nos arriesgaría a todos, y es una muy buena oportunidad para aprovechar, como dije antes, hubiera querido llevarlos a todos, pero los Coreanos son demasiados exigentes— responde seriamente el profesor.

—Váyase bien a donde le parezca llegar, pero no cuente con Carlow más, el no vendrá más de ahora en adelante— molesta se va con su hijo del salón de ensayo.

—Me quedo con un alumno menos, pero al menos, le dije la verdad de lo que pensaba de su hijo— respira alivianado —por cierto para los padres, haya se encargan de recibirnos, guiarnos y pagarnos un hotel, por los dos meses que estemos y yo pedí los pasaportes con anticipación para viajar, por esa razón a ciertos padres, les cobre estos últimos tres meses, así se les hacia mas liviano pagar después, obviamente de ida y de vuelta, solamente quedan por pagar mil pesos que se podrán pagar después de mañana en el aeropuerto— aclarando al final lo que daría como finalizado la reunión.