Eres mío, Bombón ¤JiHope¤

Yo te quiero mucho más, Chimchim

-Hobi ¿dónde estás? - Preguntó en gritos el menor entrando al departamento con un paquete envuelto en un papel y un ostentoso moño morado.

-¡Acá estoy, Minnie!- contestaron desde el fondo del pasillo, más bien, del umbral del baño. El rubio sonrió de una manera lasciva, sabía que era lo que le iba a regalar a su mayor y para qué propósito.

El menor se acercó lo más sutilmente al cuerpo del contrario tratando de ocultar la caja, pero fue imposible, pues el rubio no sabe disimular. Sin embargo, Hoseok puso una cara de sorpresa cuando se la mostraron.

"Jiminnie, por favor no me regales cosas... haces que mis sentimientos crezcan más por ti y también.... algo más"

-Ábrelo, quiero ver tu cara cuando veas que hay adentro- Anunció el menor en el oído del contrario para después, lamer su lóbulo y dejar un rastro de saliva con la punta de su lengua por todo su cuello. El mayor pegó su cuerpo contra la pared mientras sostenía la caja con fuerza, solo cerró sus ojos por la sensación de la lengua de Jimin, para después, abrir la caja, sus ojos se pusieron como platos, de la sorpresa, adentro de la caja había condones, chocolates, un pequeño vibrador, aceites esenciales de vainilla y fresa, más chocolates y lo mejor de todo, lo que hizo olvidar lo primero fue... un peluche de charmander... Sí, un pequeño peluche de Charmander, pero esperen... Esto era demasiado bonito para ser verdad ¿cierto? de la cola salía una cuerdita, con más condones y bueno, chocolates.

"¿Qué hiciste Park Jimin?" "Vaaaa, que importa..."

El mayor dejó caer la caja con todo sus cosas al piso y abrazó como su vida dependiera de ello a su compañero, besó sus mejillas repetidas veces, al igual que su boca, esos labios le daban deseos por más, siguió con pequeño besos de pico, pues sus brazos rodeaban el cuello de Jimin y lo podría lastimar si no tenía cuidado, siguió así mientras caminaba hacia la habitación despacio.

- Gracias por el regalo, fue demasiado inesperado, pero dime... ¿Por qué tantos condones Park Jimin?- Agradeció con voz melosa, pero dando un toque grave al pronunciar su nombre, tumbando al menor en su cama siguiendo con aquellos besos pequeños.

El rubio sonrió juguetonamente pícaro al sentir su cama tocar su espalda.- No querrás saber para qué tantos condones, bombón- dijo con voz gruesa intentando quitar la playera de su mayor quien se encontraba arriba de él.

-Ohh sii, quiero que me lo digas, mmhh nop, mejor demuéstrame para que los compraste Chimchiminnie-Susurró subiéndose arriba de él por completo y acomodándose entre su entrepierna, para así, poder moverse de adelante a atrás, firme, pero suave, dejando escuchar esa perfecta voz que tanto le excitaba, la voz gruesa de su menor.

-Mghhh Hobi, arghhh.

Prosiguió con su vaivén de caderas, hasta sentir aquel bulto tan conocido.

-Chimchim..

-¿Sii?

-Hazme tuyo... por favor-rogó en susurros el mayor.

-Lo iba hacer de todos modos- Jadeó mientras que le quitaba por completo la playera. Hoseok cerró los ojos por lo bien que sentía que Jimin le diera besitos, chupara y lamiera sus tetillas, era la Santa Gloria. Sin embargo, los trincó cuando sintió las frías manos del contrario tocar su espalda baja y de un momento a otro, sintiera las suaves sabanas de la cama y la respiración de Jimin sobre su cuello, la manos de él encarcelaban las de Hobi, al igual que su chico, pero trabado cuerpo, se hallaba de manera posesiva arriba del mayor.

-Y-yo quiero...Yo te qui...e-ero..- Tartamudeo nervioso el menor agachando su mirada, posandola sobre el pecho de Hoseok.

"Mierda Jiminnie, no tienes que tartamudear, yo no sólo te quiero"

- Yo te quiero mucho más, Chimchim-Anunció firme, giró su cabeza para darle un beso, uno tan suave y cálido, lleno de amor y pasión. El contrario le correspondió el beso, un poco nervioso y feliz, esta vez, quería hacerlo de una manera especial, nada de cosas "salvajes" ni "castigos placenteros" hoy no. Hoy sólo quería hacer feliz a su Bombón.

Pero antes de eso, el rubio volvió al pasillo, por la caja, agarró un condón y lo aventó a la cama.

Los besos fueron haciéndose más amenos, la ropa, una a otra se veía volar por toda la habitación hasta que se quedaron con solo sus boxers; los besos húmedos en todo el cuerpo de Hoseok se hicieron presentes al igual que suaves mordidas que le plantaba Hobi al menor tratando de reprimir los gemidos que le provocaba.

-Minnie, quiero... arghh- Hoseok arqueó la espalda al sentir la fría mano del menor hacer contacto con su miembro, soltó un gemido alto cuando Jimin comenzó a mastubarlo con un vaivén rápido e intenso, pero se detuvo para quitar lo que faltaba de ropa.

Volvieron con los besos húmedos, desde el ombligo hasta llegar a esos labios rosados que tanto le encantaba besar, un beso lento que a poco se volvió un beso fuerte en el momento que Hoseok dejó entrar la lengua de Jimin al recibir una mordida de éste provocando que gimiera, mientras que se besaban, el menor se ponía el condón para luego acomodarse entre las piernas de su mayor, quien a pesar de darle una estocada suave, gimió alto, seguía sin acostumbrarse al ancho del pene que le hacía disfrutar casi todos los días.

Las estocadas de Jimin se hicieron más rápidas o lentas según el desempeño de los besos con su Bombón, las manos de Hoseok se posaron sobre la espalda del contrario, haciendo círculos en toda su anchura, pero de vez en cuando la espalda del rubio ardía cuando el pelirrojo lo rasguñaba al sentir las embestidas fuertes.

-Minnie... ahí... bebé... justo ahí-Imploró el mayor arqueando su espalda para tener más fricción a las embestidas del menor quien, hizo caso sin rechistar, dejando de besar a su dulce y exquisito Bombón para concentrarse en darle placer, pues no dejaba de gemir y agarrar las sábanas con fuerza.

Las estocadas se hicieron más fuertes con un vaivén aún más rápido que de costumbre, no tardó mucho cuando los dos arquearon su espalda como señal de que llegaron al clímax juntos, la esencia de Hobi salió manchando el abdomen de su menor y de él mismo mientras que Jimin se corrió dentro, no obstante, logrando manchar un poco las sábanas, pero no importaba.

La habitación emanaba calor desde todos lados, especialmente de la cama, donde se hallaban los dos chicos, rendidos uno sobre el pecho del otro, bien dormidos, de todas las veces, esta había sido más especial. 

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Después de medio año, vengo aparecer, LO SIENTOOOO MUCHOOO 
Supuestamente yo, la última actualización ya salía el menos querido en esta Fic, pero al parecer se quedó en notas TwT como un borrador y mi celular  ya murió ;( 

(nunca lo pongan arriba de sus bocinas cuando estas estén sumamente altas) 

Intentaré recompensar todo eso