Mirame [Wigetta]

2. A

*Capítulo 2*

~Guillermo~

Al llegar a casa estuve pensando el ¿Por qué le di mi número a un desconocido? Es que soy bobo, el hacer semejante cosa me podría llevar a algo peligroso, pero creo que no importa, al final lo hice por algo que desconozco.

Entré a mi habitación para tirarme a mi cama y dormir pero unos ojos marrones, penetrantes y oscuros; hicieron que diera un brinco para despertar de mi corto sueño.

Pues no podré dormir... Esa mirada de aquel hombre no deja de pasar por mi mente; fue una sensación rara el estar con él pero no sé como describirla.

Bajé a comer con mi mamá y mi hermano pequeño, mi madre hablaba sobre que en dos meses terminaría la preparatoria.

Tengo dieciocho años, pero la mayoría de las personas me ven pequeño, los amigos de mamá me dicen que tengo quince años y otras personas dicen que dieciséis años, realmente ni yo sé el por qué me veo joven.

Luisa, mi madre, empezó a hablar sobre si mi hermano ya tiene novia o novio, ella sabe sobre mi sexualidad y piensa que mi hermano también le gustan los hombres pero...

A: ¡Ya! Mamá, no me gustan los hombres ni las mujeres ,¡Guillermo! Dile a mamá que soy.

G: Un niño -sonreí- dile tú... Es tu vida no la mía.

L: Por favor, ya paren hay que cen-

A: Soy una persona que no le gustan las relaciones con nadie mamá -dejó de comer para mirarla- y deja de preguntarme.

Se formó un silencio que mi hermano rompió al salir de la sala y subir a las escaleras.

G: Lo que provocas -me levanté.

L: ¿Por qué ninguno de los dos me dicen lo que quieren? -suspiró.

G: Porque no nos comprendes, pero eso no es lo más doloroso, sino también el como me dijiste sobre lo de mi padre, y aparte recuerda lo que me dijiste el día que salí del "closet" y él estaba presente, así que la confianza depende de un hilo, mamá -subí a mi habitación.

2 semanas después

Salí a la tienda por la comida que necesita mi mamá para el desayuno, volví a casa y fuí a darle lo que me pidió.

L: Gracias.

Sonreí y salí de ahí para ir a mi habitación, al subir y pasar por la puerta de mi hermano sin querer escuche un "te quiero" pensé en detenerme y oír lo que dice pero no quiero invadir su privacidad, así que entro a mi habitación.

*Ring... Ring*

Mi móvil sonó anunciando que tengo un mensaje.

Lo tomé y encontré un mensaje de alguien desconocido, que raro no recuerdo haber dado mi número, lo abrí y ya recordé a quien le di mi número estúpidamente.

+34  1 *** *** ***

Hola hermoso, perdón el no hablarte pero estaba ocupado, ¿Cómo estás?

Joder, ya lo había olvidado. El señor de dudosa procedencia al cual le dí mi número, ha vuelto.

Por un lado no quisiera responder, pero por otro lado me agrada que llegara el mensaje.  Es algo tonto, ¿No?