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3:33 de la madrugada.. parpadeas con fuerza y rapidez para intentar quitarte la pesadez del sueño, respiras hondo y te levantas a tomar algo, hasta este momento es una actividad normal y que nos parece más cotidiana que ajena. Mi pregunta es ¿cuántos de aquellos que se levantaron tuvieron la más ínfima curiosidad de mirar por sus ventanas o balcones? mi pregunta también es ¿cuántos se empezaron a cuestionar los horarios, los días, los minutos?

Somos como un rayo en una tormenta eterna, somos una fina capa de tela en un manto con dimensiones planetarias. Nos damos cuenta de cosas así, al mirar por nuestros balcones y ventanas y ver a los autos pasar, el movimiento típico, como cada uno es una historia, como cada persona que ves puede estar muerta mañana, puede tener un bebé, puede ser despedido... todo en un pequeño lapso entre que lo ves y se vuelve difuso.. entre lo que mirás y olvidás.
¿cuantás vidas vidas te pasaron por al lado el día de hoy? ¿a cuántos les recordas sus rostros?

Pensá en el tiempo en el que tocó nacer, las cosas que para vos son nuevas, los records que alguna vez viste en vivo que van a ser recordados por generaciones futuras.. las personas que amás y no fueron fruto de la familia, si no que dió la casualidad que te las encontraste varados en la misma infinidad que vos, en un ambiente determinado o en una ocación particular... ¿a cuantas cosas no le damos la atención que merece? las pequeñas cosas que pensamos que son ordinarias y en realidad hacen grandes diferencias.

Xiónes RelfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora