La dama de mis fantasías.

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La negrura de la noche se desliza por su contorno

La canela seca se ha fundido en su cuerpo

Una estrella se ha posado en cada ojo

Más allá de su cintura esta el cáliz añorado

Quisiera ser el viento que surca las dunas de su pecho

Quisiera ser la piel que se desliza por su cuerpo

Quisiera ser la negrura entre sus piernas

Quisiera ser todo en ella.

Pero sólo soy la nada, contemplándola en la lejanía

En el silencio de mi aparente indiferencia

Ella, inocente de mis pensamientos

Inspira profundos deseos apasionados

Y quiero ser el primero en tocar la zona prohibida

Acariciar cada curva de su figura

Adentrarme en su aroma y fundirme en su esencia.

Es ella una diosa, tan poderosa y ajena a mi pena

Tan hermosa y distante a mis ruegos

Ingenua, bella y pura.

Ella tan mía en mi fantasía,

Y tan distante en la cercanía del día a día.

Los poemas del cuervoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora