Un día en tu eternidad

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  • Dedicado a Ann CM
                                    

SER UN DIA EN TU  ETERNIDAD

 

Hay un mar de rojos sobre suelo firme,

oscuridad sobre el firmamento,

un extraño aroma a ébano en el aire,

y un silencio absoluto corre por el bosque.

Y tú, silenciosa, contemplas el pasar del tiempo.

¡Serena! como la noche,

¡Inmutable!, como el tiempo

¡Perdida! como barco a la deriva,

¡Pobre mujer eterna!

¿Cuántos atardeceres has visto apagarse?

¿Cuántas noches has contado las estrellas en soledad?

Porque para ti la felicidad es tan efímera,

como un día en la eternidad.

Dime, doncella eterna,

¿Cuánto más le vas añorar?

Él se extinguió bajo el cáliz de tu beso,

Llevándose consigo tu alma.

Entonces, ¿por qué le insistes en amar?

¡Oh! Dama mía,

Entrégame tu sonrisa,

Regálame una caricia, 

Déjame ser un día de felicidad

En tu eternidad.

¡Olvídale!,

Como habrás de dejarme en el olvido.

¡Acéptame!

Como el viento acepta su destino.

No me niegues el sabor de tu beso

Ni el mirar de tus ojos

O el calor de tus abrazos.

Entrégame tu amor,

Como yo me entrego con fervor.

Seré yo una noche para ti

Serás tú una vida para mí,

Mi princesa inmortal,

Mi amada celestial.

Nota del autor:

Este poema lo hice pensando en una amiga, me dio a hablar de la inmortalidad, espero sea de su agrado.

Gracias por leer.

Saludos :3

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