35 Gun

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Capítulo 35


—bien Sean, se un buen chico y paga lo que debes—dijo Taydem mirando a un chico pálido de cabello negro.

—¿pagarte? oh Taydem aún trabajas para otros, amigo sal de ahí antes de que eso acabe como el Titanic—dijo Sean riendo.

Taydem le siguió la corriente y se rió antes de soltarle un golpe en el abdomen, el muchacho de cabello negro se inclino un poco y escupió algo de sangre.

—son 2 grandes Sean, te di la droga hace un maldito mes, ya deberías tener el dinero completo—dijo el rubio molesto.

—¿porque te molestas en seguir haciendo esto? Dealon esta acabado—dijo Sean.

—no es un hobbie, es mi maldito trabajo asique dame la plata y cierra la boca—el rubio ya estaba bastante irritado.

—vamos Sean conoces las reglas, te damos la droga, tu la vendes, te quedas el 30% y Dealon el resto, solo has lo de siempre—dijo Ashton.

—chicos, que tal si me dejan en paz y a cambió yo los recibo de buena fe, vendí toda esa mierda y tuve que invertirla de nuevo, el negocio de Dealon va a  caer y no me puedo quedar sin contactos—explicó Sean.

—no me importan tus proyecciones de vida idiota, quiero el dinero y lo quiero ya—dijo Taydem casi gritando, su paciencia ya se había acabado.

—dime Taydem de que es ese golpe ¿fue Dealon? ¿fue alguien que te amenazó por culpa de él?—dijo mirando atrevidamente el rubio, Taydem lo miro mal.

—¿que sabes tú de esto? ¿acaso tuviste que ver con esto?—preguntó molesto, señalando su ojo morado.

—yo no, pero todos sabemos que Dealon ya es hombre muerto y tú puede que corras con la misma suerte ya que le hiciste caso, cual simio—dijo Sean riendo.

—¿de que hablas?—preguntó nervioso Ashton.

—el banco y la joyería, todo el mundo sabe que fue Dealon, pero aquí viene lo mejor, ambos desfalcos fueron obra de un grupo de mafiosos muy peligrosos que operan en Long Island, no como las ratas de aquí, todo lo que ellos hacen sale perfecto por una simple razón, tienen clase para robar, utilizan toda la tecnología que pueden y el tipo que les ayudo a ustedes, era un hacker de ellos, porque crees que desapareció cuando hicieron lo de la joyería, el les robo la información, los contactos, la idea, todo, salió de allí sin dejar rastro y con Dealon encontró a dos idiotas que fuesen capaces de arriesgarse a algo así—dijo Sean mirando a Taydem y Ashton.

—¿osea que técnicamente el hacker les robo todo al hacer el desfalco por su cuenta, eso significa que nosotros les robamos tambien—dijo Ashton asustado.

—así es y ahora ellos saben donde están ustedes, quienes son, bueno todo, asique no se los puedo ofrecer una vez más vengan conmigo, escapen antes de que esos tipos vengan por ustedes porque ellos tiran a matar—respondió Sean.

Taydem miró al suelo, luego saco una pistola a la que le quito el seguro y en  menos de 30 segundos ya había detonado la misma apuntando al suelo, muy cerca de donde Sean se encontraba, tanto Ashton como el muchacho de cabello negro lo miraron algo sorprendidos.

—¡Diablos! ¿Que te sucede Taydem?—gritó espantado el hombre.

—¿Que me sucede? Te diré que mierda me sucede, no ocupo que nadie me diga que me cuide, se cuidarme solo, ¿viste ese disparó? se hacerlo mejor con al menos 10 armas distintas y tengo bueno puntería, asique espero el día que algún hijo de puta venga por mí, porque no planeo irme solo al infierno, ahora dame el maldito dinero y no me hagas gastar otra bala—dijo furioso, Ashton lo miró entre asustado y sorprendido.

Sean lo miró serio y observó la seriedad en el rostro de Taydem, sus ojos habían dejado de ser azules, su pupila estaba muy dilatada, eso que tenía en su rostro era una especie de irá que nunca había visto en los ojos de menor, pero que para se honesto no quería conocer a fondo.

—Sean hermano, dale el maldito dinero—dijo Ashton preocupado, Taydem no tenía buena fama con las armas, cuando entró al negocio le dijeron que había matado a alguien a quema ropa y aunque Taydem le contó la historia y aclaro que fue el altercado con Tyler para ser honestos verlo así no le generaba confianza.

Sean saco los dos mil dólares de su billetera y se los dio a Ashton con Taydem aún apuntando a su cabeza, después de aquello el muchacho de cabello negro puso las manos en alto y retrocedió hasta salir del callejón, Ashton miró a Taydem esperando la reacción del rubio.

Taydem guardo el arma y de un momento al otro comenzó a golpear con mucha fuerza la pared de concreto que tenía enfrente, Ashton se quedó unos segundos en shock pero al ver que la mano de Taydem comenzó a sangrar abundantemente lo detuvo a como pudo.

—¡Taydem, alto!— gritó Ashton.

—vamos—dijo el rubio sin mas, mientras sostenía su mano y salía del callejón.  Su cabeza era un mar de pensamientos, todo lo que Sean dijo tenía sentido, Dealon era demasiado tonto para conocer a un hacker así.  No se arrepentía al cien por ciento de lo que había hecho, sin esos dos robos, la operación de su hermana sería aun un sueño y tener las cuentas hospitalarias limpias tambien, pero ahora tenía que cuidarse y esperar lo peor.

Al llegar al edificio fueron a lo que Dealon llamaba su oficina y ahí estaba, sentado en su escritorio contando dinero.  Taydem entró de golpe lo que no estaba permitido y tiro los 2 mil dólares en la mesa, Ashton miro a Dealon ponerse de pie de forma imponente, no estaba feliz.

—Mocoso mal educado, te he dicho mil veces que no entres así, ¿porque tardaron tanto y porque estas re decorando el piso?—preguntó Dealon señalando el rastro de sangre que dejaba el rubio.

—Sean no quería pagar, dijo que no había razones para hacerlo ya que eres hombre muerto—dijo Taydem furioso.

—asique le gusta meterse donde no le llaman, bien hiciste lo que debías si el dinero esta aquí, ahora deme la pistola y toma tu parte del dinero—dijo Dealon acercándose a Taydem para que le diera la pistola.

—las armas se quedan con nosotros—dijo Taydem firme, Dealon le dedico una mirada y se acercó a el.

—sabes las reglas mocoso, las pistolas son solo para trabajo, no pueden andar con ellas, es peligroso—dijo Dealon, Ashton estaba sacando la suya cuando Taydem lo detuvo.

—¿peligroso? no me digas que ahora te importamos, la maldita pistola es mía, yo la compre, Drake las cuidaba para que no nos atraparan con ellas, pero tu eres capaz de matarme con mi propia arma—dijo Taydem.

—bien, ¿cuales son? las sacare de la lista, ahora lo que pase con ellas es su problema—dijo Dealon mirando al menor, si Dealon le daba la razón con eso es porque era cierto, los tres tenían sentencia de muerte.

—Colt 45 y Beretta 22—dijo Taydem antes de salir del lugar.







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