MI PRIMER NOVIO

4.- ¿Quién se cree ese chico?

Cuando Ian intentaba irse a su lugar después de lo que me había dicho, el profesor Marco lo llamo.

— ¿Ian verdad? — dijo en tono de pregunta a lo que él asintió. — Será mejor que te sientes junto a Aranza por si te surge una duda — y se lo ordeno.

¡No!, ¡Porque! Ese chico ya me caía mal y justo al lado mio tenia que estar un lugar disponible, eso no es justo. Al parecer Ethan se dio cuenta.

—  No te cae bien, verdad — dijo burlón. Yo solo asentí.

Sin mas, comenzé a realizar los ejercicios que el profesor pidió, trate de hacerlos a toda velocidad para demostrarle al tal Ian que quizás si necesitaría de mi ayuda.

Al principio estaba muy fácil y los respondí rápidamente, pero llegando al ejercicio número 15 por mas que traté de acordarme de como se hacían no lo logre y cuando aparte la vista de mi cuaderno me di cuenta que Ian ya se dirigía hacia el escritorio del profesor, así que sólo me quede observando.

— Profesor he terminado — dijo en tono fuerte que pude escuchar a la perfección, a parte de todo presumido.

— Muy bien joven Ian — le respondió el profesor sorprendido por la rapidez con la que acabó.

Deje de hacer los ejercicios y presté atención a lo que mi profesor favorito hacia con Ian.

— Valla que me sorprende joven, sus ejercicios son correctos y los realizo con mucha facilidad. Como recompensa tendrá un punto extra en su calificación final — le dijo.

— La verdad los ejercicios estuvieron muy fáciles profesor y gracias por el punto pero no creó que lo necesite — dijo orgulloso.

— Bueno entonces muchas felicidades — .

— Gracias —.

Y me quedé en shock porque él tan solo llevaba 2 horas en mi salón y había obtenido un punto como recompensa, me había ganado, además había sorprendido a mí profesor y hasta se había burlado de mí, pero esto no se va a quedar así yo tengo que competir por el primer lugar.

Ian regresaba a su lugar después de obtener su punto extra.

— Aranza no acabas — hablo Ian con una sonrisa en su rostro, burlándose de mi una vez mas. — Si necesitas ayuda, me dices — término de hablar y se sentó.

Ahora de verdad creé que le pediré ayuda, eso no pasará jamas.
Aunque ahorita si me hace falta, pero no le pediré nada  a él.

Me distraje tanto en mis pensamientos y cuando escuche alguien hablo.

— ¿No piensas hacer nada, la clase casi termina? — de nuevo Ian, que no podía callarse de una vez.

— No sabia que  tenia que darte explicaciones — le conteste molesta.

— Oye tranquila solo trato de llevarme bien contigo pero si no quieres está bien — hablo Ian y solo lo ignoré.

Retome los ejercicios que estaba haciendo y trate de resolverlos. Cuando terminé me dirigí al escritorio.

— Ya Ara — así me dice el profesor.

— Sí, me los puede revisar — le pedí.

Puse atención a los gestos que hacía mi profesor y al parecer mis ejercicios estaban correctos.

— Y ¿están bien? — le pregunté ya que no decía nada.

— Si, la mayoría, te fallo el ultimo ejercicio — dijo. Y se dispuso a explicarme. — Muy bien Ara, sigue así.

Y el punto extra se fue de mis manos.

Decepcionada regresé a mi lugar, la clase de Física había terminado y teníamos 15 minutos de descanso y decidí ir a hablar con Ximena.

— Ahora regreso — le avise a Ethan.

— Claro — me dijo amablemente.

Me fui al fondo del salón en donde se encontraba mi excasiamiga.

— Hola Xime — la saludé.

— ah Hola — respondió sin mucho interés.

Estaba un poco nerviosa porque no sabia como decírselo, pero con la actitud que tenia opte por hacerlo de cualquier manera.

— Xime solo vine a decirte que... a partir de hoy ya no tienes que andar conmigo, es decir no me gusta la forma en como eres y tratas a las demás personas, también creo que no te caigo bien. Así que fue lindo estar contigo pero ya tengo un buen amigo — termine de hablar y Ximena estaba muy confundida.

— Enserio te crees muy importante como hasta para avisarmelo, deja decirte que no me importa lo que hagas y tienes razón nunca me has caído bien así que, me alegra que te hayas dado cuenta. Un amigo, hablas de Ethan el nuevo verdad — comenzó a reírse — quizás él solo te hable para sacar provecho de tus calificaciones como yo lo hice, eres demasiado aburrida y no creo que le intereses a alguien — término de hablar y eso no me lo esperaba, era muy sensible y ya estaba a punto de soltarme a llorar.

No me di cuenta que Ethan estaba atento a esa  conversación, solo lo supe porque se movió de su lugar y llego justo frente a Ximena.

— ¿ qué acabas de decir ? — le dijo enojado a Ximena.

— Solo digo la verdad Ethan — .

— Si no fuiste capaz de tener una amiga como Aranza por tenerle envidia, no digas que yo haré lo mismo que tú, porque si yo estoy con ella es porque me he dado cuenta que es muchísimas veces mejor que tú y que todas ellas — dijo señalando con su mano a todas. — Así que solo dejala en paz quieres — termino de hablar.

Me tomo la mano y me llevo de regreso a nuestros lugares.

— Oye, muchas gracias por lo que hiciste — le agradecí cuando ya estábamos sentados en nuestros lugares.

— ¿Por decir que eres diferente a las demás? Gracias a ti por ser así — me dijo eso cuando el profesor entró y no pude decirle nada mas.

Ya un poco mas tranquila y con las lágrimas controladas por no llorar, puse atención a la clase y en esas 2 horas no paso nada extraño.

Narra Ian:

Claramente ví como Aranza estaba controlando sus lágrimas, las que esa chica creo que se llama Ximena le estaba provocando, quería partirle la cara pero obviamente no podría por que es mujer y jamas he lastimado a una. Lo mejor que pude hacer fue salirme del salón e ir al baño, ella ya tenía quien la defendiera a pesar de que solo llevaba un día en esta escuela sabía que se llevaba demasiado bien con Ethan y él ya se dirigía hacia la dirección de Aranza.

Desde que entre al salón, Aranza me pareció muy tierna se veía como una niña pequeña, además era de baja estatura lo noté cuando estaba de pie hablando con Ximena.
Cuando el profesor de física me ofreció su ayuda lo único que pude hacer fue rechazarla.
Sí el profesor hacia eso era porque ella es buena en física la materia que a mi me encanta, eso la hacia mas interesante y cuando rechazé  su ayuda noté claramente como se enojo y fue lo mas tierno que he visto, y así fue como decidí hacerla enojar cada que pudiera.

Quisiera conocer mas a esa chica ...