G-Pop! //Kookmin

Identidad

El dulce muchacho de ojos miel se debatía sin poderlo evitar, por una parte estaba exponer su integridad física vistiéndose de mujer sin identificarse con las tendencias trans. Negarle a la gente su existencia para poder cumplir su misión sanadora. O, negarse y quedarse todo el brillo para sí mismo.

Ahí estaba uno de sus principales defectos, no poder decir que no. Le era muy difícil refutar a las cosas, y esta vez, decidió que tampoco sería la excepción. Park Jimin se haría cargo de compartir su renovada filosofía de vida incluso si para ello tenía que utilizar falditas y pelucas.

  —Está bien, estoy dispuesto a hacer lo que sea necesario.

El líder de la compañía le sonrió satisfecho con su respuesta, pues sabía que aquella promesa de la música llevaría a G-Pop! a la cima, pues les daría todo lo necesario para encontrar el éxito. 

Ninguna otra persona les había generado lo que él, pues su voz era similar a la de una chica, suave y delicada. Sin embargo tenía ese toque sedoso y acaramelado que pocas personas poseen, lo que dejó sin demasiadas palabras a su público. Ninguno de los otros dos presentes se atrevió a ponerle un sólo pero, pues ya estaban hartos de ver a tantas personas tan similares sin esa chispa que el pequeño poseía.

Jimin salió de la sala con la promesa de volver al siguiente día para que le hicieran chequeos médicos, exámenes de sangre y pruebas de resistencia física. Además, según entendió, tendría clases de "feminización" que le explicarían entonces; aquello se le antojó demasiado curioso y hasta cierto punto ridículo, ¿acaso ninguna de las hermosas mujeres que había visto resultó suficientemente buena como para que lo hayan tenido que elegir a él?

Fuera de ésta, un señor muy bajito y delgado lo esperaba con un papel. Park Jimin le miró, expectante por la situación en la que se encontraban, ¿tan pronto quería un autografo?

  —Necesitamos que firme este contrato de privacidad, pase lo que pase de ahora en adelante, a la empresa no le conviene que usted diga algo que pueda desacreditar a nuestra institución— explicó mostrándole el contrato. Con razón no se sabía mucho sobre lo que realmente pasaba dentro de las compañías 

Lo hojeó rapidamente, notando que la vigencia era perpetua, a menos que la empresa le diese indicaciones contrarias; el castigo por no cumplir con ello eran cinco años de cárcel. Jimin se mordió ambos labios preocupados, eso era demasiado arriesgado. Sin embargo, toda la emoción del momento le hizo creerse capaz de firmar aquel contrato y cumplir con él; tomó la costosa pluma fuente de la mano del caballero y plasmó su marca en todos los sitios donde era requerida.

Con la misma alegría salió de la agencia, dispuesto a atiborrarse de comida hasta más no poder, como despedida de todo lo bueno en el mundo, pues conocía superficialmente lo estricta y restrictiva que solía ser la alimentación de los artistas coreanos.

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          J E O N   J U N G K O O K

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Tan solo a un piso de distancia del sitio donde Jimin demostró sus habilidades, la reconocida banda masculina Blood realizaba uno de sus principales ensayos antes de su primer comeback del año. Seis majestuosos chicos únicos en su campo a quienes no les había bastado conquistar su continente sino que tenían a su público internacional completamente  embelesado por su aptitud y la incuestionable belleza de sus integrantes.

Jeon Jungkook, el menor de ellos, les ayudaba con los pasos más complicados, simplificándolos en sencillos pasos, sus compañeros asentían, comprendiendo lo que este les desglosaba. Después de un rato todo fue mejor y los seis chicos se movían en una increíble coordinación, no por nada tenían premios por ello.

Sonrió cuando finalmente terminó, y emocionado por la afluencia de chicas hermosas que se iban a presentar a la entrevista, cubrió su rostro con una barba falsa y lentes oscuros para poder bajar a mirar sus caritas frescas y adorables, así como seleccionar en su mente a sus candidatas favoritas para formar parte del nuevo grupo de chicas. Él sabía que las cuatro chicas que ya estaban también eran muy hermosas y tenían voces llamativas, eran altas en comparación a los demás grupos femeninos, no había ni una sola abajo del uno setenta, por lo que todas ya tenían tres de sus caracterísiticas de tipo ideal: medir más de 1.68, poder cantar y cumplir con estrictos estándares de belleza física. No las conocía mucho por lo que aún no podía hablar de sus personalidades. 

De cualquier manera, aunque alguna de ellas le llenase las expectativas, tendría que esperar tres años para invitarla a salir, debido a la conocida regla que especificaba la prohibición de tener pareja hasta después de que el grupo demostrase ser rentable y se posicionase en los primeros números entre los fans. Lo que generalmente demoraba de dos a tres años. Aunque en Blood tardó unos cuatro.

Volviendo al tema de las participantes, su favorita era una delgada chica de piel tostada y corte de honguito, en segundo sitio estaba considerando a una chica de ojos pintados al estilo manhwa y, ¿eso era un chico firmando un contrato fuera de la sala de grabación? Su corazón se aceleró al ver aquellos gruesos labios de muñeca, y esos ojos alargados... pero era un chico así que consideró mirar a otro sitio. Sin embargo no pudo, la especie de magnetismo que tenía ese hombre daba algo de miedo.

Daba mucho miedo no poder dejar de mirarlo.

//Se siente feo estar siendo completamente ignorada, jajaja. Pero por algo se empieza siempre, ¿no es así? Muchos besitos en el culo//