Capítulo 1

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Era una mañana de un Lunes, me sentia inspirado para escribir mi "Texto del día", quizá será sobre el amor, aunque nunca he experimentado ese sentimiento.

Hice mi rutina diaria: ir al baño, bañarme, lavarme los dientes, y tratar de reventarme lo granos que los tengo desde los 13 años. Después de eso tengo que ir a la escuela donde trabajo como profesor de Literatura. Mis alumnos piensan que soy un mongolo estúpido que nunca se ha enamorado y escribo miles de poesías a mis "preciados peluches".

Pero hay veces que me quieren, por ejemplo: cuando me invitaron un chicle sabor a basura, nunca lo habia escuchado pero no pierdo nada probando. (Estaba del asco)

Otro día mis alumnos decidieron crearme la famosa red social: "Facebook". Mande solicitudes de amistad pero en un mes solo me acepto mi madre, y cuando le dije que era yo, ella borro su cuenta.

Estaba a punto de llegar al trabajo cuando me empezó a doler la cabeza. Fui a una farmacia muy cercana, y a la hora de pedir la pastilla, la hermosura de la farmaceutica no podia con mis ojos, vi su identificacion y su nombre era: Anazaida Stone.

Solo tartamudeaba el nombre de la pastilla. Decidí concentrarme en lo que fui a hacer, Anazaida me pregunto mi nombre para poder entregarme la pastilla entonces le dije mi nombre: Mayorga.

Ya era tarde, quiza me despidan, me tenia que ir de inmediato, tenia clase con los alumnos de 2do de secundaria y ellos son normales conmigo -si, muy normales- me invitan comida, les gusta mi "Texto del dia" -ya que no quieren que lo borre de la pizarra-, pero hay algunas veces que parecen que lo odian.

Bueno pero ese no es el problema, el problema es que no dejo de pensar en Anazaida.

Después de comprar la pastilla, fui al aula de 2do. En cuanto entre, mis adorables -sí, muy pero muy adorables- alumnos, empezaron a abuchearme y tirarme papeles en forma de bolita.

En cuanto proyecte la clase, les dije a los alumnos:

- Chicos, copien en sus cuadernos el "Texto del día" -djie tratando de verme serio.

Fue ahí cuando me di cuenta de que tal vez, supongo, creo.. que no me estaban escuchando.

Todos gritaban y corrían por el salón, cuando de repente me di cuenta de que mi alumna, Camille, estaba conversando y haciendo mas escandalo que todos.

Como "Buen Profesor", tenia que ponerle fin a ese comportamiento.

- Señorita Queen -dije para llamar su atención.

- Señorita Queen -dije un poco mas alto

- ¡Señorita Queen! -prácticamente grite.

- ¡¿QUE?! - respondió gritando.

- Ya, no me pegues - llore, mientras cubría mi cara con los antebrazos.

Todos empezaron a burlarse y reírse, lo único que pude hacer fue salir corriendo para llorar tranquilo.

Iba a ir a mi refugio, el baño, la ultima puerta a la derecha, ese es mi lugar.

Cuando estaba llegando me resbale y me golpeé muy fuerte el trasero contra el muro, intente levantarme pero volví a resbalar.

Me quede tirado en el suelo, lamentando mi patética vida, cuando derrepente vi esos mocasines bien lustrados que tanto amaba.

Anazaida.

Me di cuenta que llevaba un uniforme de limpieza y un balde.

- ¿Estas bien? -pregunto con su dulce y chillona voz.

- ¿Trabajas aquí? -le pregunte.

- Sólo los Lunes, Miércoles y Viernes.

Genial era farmacéutica y limpia inodoros, ¡Que mas se puede pedir! ¡Era perfecta!

Me ayudo a levantarme con delicadeza y me pregunto si yo era el "Señor" , en realidad seria "Señorito" ya que no estoy casado, que le compro la pastilla.

Lunes en la mañana esta en la farmacia, y luego va a la escuela, y los demás días: Martes y Jueves trabajaba en la farmacia cercana a la escuela, podía verla casi todos los días. Excepto Sábado y Domingo, esos días no trabajo, me quedo en mi casa inspirándome para mi "Texto del Día", ya que no tengo amigos, y la única persona que ha sido amable conmigo es Anazaida, porque mi mamá no me quiere.

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