Hoja uno: Tiempos de crisis.

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27 de Julio del 2008



un texto antiguo cuando era un adolescente empedernido y poeta. (lo sigo siendo)

Creía no volver a tocar un papel después de tanto tiempo. El tema de la universidad, el estudio, el trabajo, poca vida social que tengo, sacaron esas ganas de escribir que tenía. Si bien no escribo, quiero que sepas que eres mi tercer diario y el último que deseo escribir, porque se vienen cosas grandes, supongo. Señor papel, pasaron 7 años de la última vez que escribí un diario, un resumen de flash informativo. Estudie Ciencias Económicas en la Universidad Nacional, ¡si! Herencia familiar, realmente siempre fue satisfacción de mi familia el hecho de ser "Alguien" si posees un papel que diga "Se graduo de", si bien Mama es diseñadora textil y papa agrónomo, poseen la teoría del "ALGUIEN" como si antes de un título universitario no somos "Alguien", me parece estúpido, pero ellos son aquellos que creen que los pobres son pobres porque no quieren salir de la situación en la que están.

Sigamos. Me llevo más tiempo del que pensaba y no señor papel no me enamore en la osadía universitaria, me costó empezar era pleno 2001 y trabaje de cosas que quizá más adelante te cuente porque no de aquellos trabajos que uno habla orgulloso con sus amigos del buen salario y las posibilidades de escalar, imagínate señor papel un país quebrado donde cualquier ingreso sirve, lo hice y pague tres años de mi carrera. Mi mama se quedó sin trabajo poco después del corralito, estaban recortando personal en la compañía ORMAS, era importante por sus creaciones de alta costura, cuestión lavo dinero con Menem, llego de la Rua, se terminó la joda y cayeron profesionales débiles por ajuste de personal. Desde ese entonces se dedicó a ser modista tiemplo completo en casa, en Villa del Parque, aclaró porque como es tu primera vez en mi escritorio y me costaste 10 pesos por ser tapa dura debes saber datos relevantes. Mi papa todo ese tiempo trabajo 24 por 7 dentro de una fábrica, lo veía poco en esos años, bueno como toda mi vida creo que es el resultado de mi homosexualidad. Si bien hoy puede ejercer su profesión, por cinco años no, tuvo que amoldarse a las necesidades de la capital y el mercado. No me enamore después de mi último noviecito o quizá mi cerebro en todo estos años trato de volver a sentir esa sensación tonta de estar plenamente con una persona que no tenía decido quedarse, pero fracaso una y otra vez. Estuve en pareja, si, todas toxicas que mis trastornos alimenticios y la relación con mi familia, pero estuvieron allí aunque no gastaría los músculos de mi mano en relaciones que solo fueron un dolor de cabeza.

Estoy escuchando la ambulancia en la avenida y un disco de Nelly furtado en la radio, en la noche de "ROMÁNTICOS" muy triste todo para ser Buenos Aiares pero hace unos meses vivo solo en un Mono ambiente digno de quién no desea compartir sus adicciones y trastornos con alguien, entonces hace que toda esta situación deplorable de un hombre de 27 años no sea tan patéticas.

Las calles son adoquinadas, bares en pleno San Telmo un lugar ensueño, me costó conseguir un lugar que sea como describí en mis anteriores tomos de dramatismo literario. Es un edificio antiguo, pequeño y con vista a la ciudad. Aquí estoy en medio de un desorden con mi taza de café un velador de pie y con el cuaderno que compre en promoción por la avenida Corrientes, sentado en mi escritorio lleno de libros que deberían estar en la repisa blanca de arriba de mi cabeza, importante aclarar, tomando café, como siempre.

¿Por qué alguien decide escribir? Mi mejor amiga Lisa, la borracha, me dijo que trate de descargar , que me notaba cansado y estresado, fue hace un tiempo en una noche que decidimos a comer después de tanto, siempre siento que debe estar un poco harta de aguantar mis ataques madrugueros, los llantos de domingo y los lunes de sonrisas falsas, si soy de los que intentan demostrar que todo está de maravillas, pero soy frágil como el papel mache, siempre lo hice, las cosas no cambian después de años.

Mi último diario fue la historia dramática de comienzos de mis trastornos y ataques de pánicos, mi ex, deberíamos ponerle una insignia porque con Lisa todo tiene un nombre falso, a ver, pensemos, que te parece "señor X" Suena a un actor pornográfico, pero no se me ocurre nada en este momento.

En fin acá puedo ser, no te haces una idea lo difícil que significa "SER" en el 2008 siendo homosexual, hasta dudo encontrar trabajo por lo menos por unos meses o años.

Creo que debo cortar con los rodeos ¿no?

Recaí, hace un mes señor papel, Lisa lo notó, me vio, no lloró esta vez como a los 15 cuando se dio cuenta que pesaba 57 kilos cuando siempre fui alto y robusto, "Grandote" Diría mi Nona. Esta vez es peor, siento que voy tocando fondo de nuevo, no quiero nombrarlo, pase toda mi vida tratando de pelear, para que entiendas no son drogas, estaba en la secundaria y me decían "Gordo puto", ¿te suena algo? fue después cuando solo era "Puto" la realidad en aquellos años es que nadie en mi entorno se dio cuenta, hace mucho ejercicio decía mi madre y mi padre a mis tíos que no entendían como yo lo que estaba pasando. Había empezado un día con sacar algunos alimentos del plato, las harinas, el pan, luego siguió dejar de tomar Coca Cola a tomar solo agua saborizada light, salir a correr por los bosques de Palermo, siempre odie la actividad física me rehusaba, es imposible no acordarme de mi niñez cuando escribo o cómo me obligaban hacerlo. Luego siguió las dietas por una semana, después todo se resumió a pérdidas de peso mágicas, una manzana por día, litros de agua y atracones que terminaban en purgas interminables de veneno. Hasta los 20 años no viví, creo que nunca viví hasta pisar la universidad, además dudo haber pisado los 60 kilos en todo este tiempo, pero se vive.

Trate señor papel no caer, trate de que no sucediera, pero hace tres meses estoy en mi departamento que peso por peso compre tratando de acostumbrarme a los cambios, a mi nuevo trabajo y a la soledad. Habrá sido el cambio, me costó aceptarlo, está aquí, volvió y promete quedarse y es tan forra que nuevamente vino sin que mis padres, hermanos y amigos, /excepto lisa/ se dieran cuenta. Hace poco menos de un mes compre un espejo, me había propuesto durante años de tratamientos y terapias pagas para "curar mi homosexualidad" según mi padres, no comprar espejos, mi psicóloga fue la propulsora de muchas de mis decisiones maduras. Ana fue mi mentora para superar muchas situaciones de la vida misma, jamás se atrevió a decirle a mis padres, ellos creían fanáticos religiosos que intentaba cambiar mi vida, sin percatarse que me encantaba ser gay, sentir a los hombres. Ilusos.

Ana me ayudó y murió de un cáncer fulminante hace un tiempo. El espejo es hermoso, pero no mi reflejo de cómo volví a caer en esto. Señor papel fueron años de ir al baño de huéspedes, de salir y no entrar a baños que no fueran ese, años de no ir a cenar con mis amigas para no verme en uno o para no comer, alimentarse de lo mínimo e indispensable.

Hasta el día que decidí comprarlo y ponerlo sobre la pared del baño. Verme esa noche fue lo peor que pude haber hecho en años. Me toque cada parte de mi cuerpo, mientras caían gotas de sudor por mi espalda, podía sentir mis pupilas abrirse en cada espacio que miraba para encontrar el cuerpo que pensé haber dejado a los 15, no se había ido, volvió, tanto que tengo miedo de quedarme solo, por eso decidí escribirte señor papel, necesito soltarlo.

Lisa vino ayer, siempre nos juntamos los miércoles porque cursa cerca de casa, esta en su último año de psicología, si bien no puede, por ética profesional hacer análisis de amigos o familia lo hace, soy como su rata de laboratorio, aunque esta vez me juego en contra. Mientras estaba preparando café, le comentaba que había conseguido un trabajo de medio tiempo para un call center ilegal en zona norte. Basto un segundo para darse cuenta,

-¿Te crees que soy estúpida? Tu heladera está vacía, te tiemblan las manos, tu cara hinchada ¿Tuviste un atracón? Y no digas nada, porque sé que lo vomitaste.

La idiota me conoce, vio esto tantas veces que hasta llegamos a distanciarnos. Pero esta vez me quebré y no aguante, hacía mucho tiempo que no comía, estaba a agua, me sentía débil y necesitaba, lo vomite.

Estoy hace muchos días vengo comiendo poco, trabajando mucho, tomando pastillas para dormir, con ansiedad, estoy derrapando, lo sé, te cuento de manera corta porque me tengo que ir señor papel, estoy oxidado con volver a escribir, necesito narrar, quiero escribirte poemas y contarme mis dramas, es una promesa para Lisa, un alivio para mí. Sé que no me va vencer, no quiero internarme.

Hasta la próxima...

Atentamente: Liam

Huesos de PapelWhere stories live. Discover now