Prisioneros.

. Dieciocho.

Había pasado aproximadamente una semana desde aquello en el sofá, cosa que no se volvió a repetir.

Por que bueno 'el sofá es muy incomodo y la cama es más espaciosa'

En toda esa casi semana el tema que en un principio zoro queria hablar ni siquiera se mencióno, ya sea por que se les olvidó o por que simplemente temían dañar esa buena atmósfera que tenían ambos.

Zoro murmuró removiendose en la cama.

Tocó con su palma un lado para ver o sentir si había alguien allí, mas solo estaba frío y sin nadie.

Frunció su ceño recordando donde y como lo había hecho el día anterior.

Se levantó con cuidado para sentarse en la cama completamente desnudo, se resfrego los ojos y grupo comenzando a levantarse.

Caminó hasta encontrar sus bóxer, los cuales se coloco para seguido salir de la habitación y bajar las escaleras que daban inmediatamente una vista a la sala de estar y la cocina,en donde estaba luffy, cortando quien sabe qué.

Bajo Con cuidado con una sonrisa casi boba en su rostro y camino sabiendo que luffy lo miraba de reojo teniendo cuidado de no cortarse.

-buenos días, lu - luffy bajo en cuchillo y le sonrió con todos su dientes, una sonrisa brillante, llena de cariño, felicidad y amor.

La primera vez que vio una de esas sonrisas en la cara de luffy se sorprendido bastante, mas ahora le encantaba verlas.

-¡buenos días, zoro! ¡¿Como amaneciste, bebé?! - preguntó, zoro sonrió.

-bien. Y ¿tú?

- ¡super! Pero con hambre. Asique decidí hacerme de cocinero, ya verás, comerás la comida más exquisita del mundo- zoro río bajo cuando luffy le miró.

Sus ojos se conectaron y sus miradas decían mucho, demasiado, tanto, que no podrían expresarse con palabras.

- sabes... Mejor me iré a colocar algo de ropa... No quiero ser tu desayuno - luffy pareció descolocarse antes de hacer un mohín en forma de berrinche.

-¿ te crees mucho, eh? - zoro alzó una ceja ante la pregunta irónica del menor.

Pero dijo absolutamente nada, se dio media vuelta y comenzó a caminar hablando mientras movía sus caderas de un lado al otro.

-sólo no quemes la comida - cuando estaba subiendo las escaleras sintió la mirada penetrante de luffy recorrer desde sus hombros hasta sus piernas.

- no te creas tanto, ni estás tan bueno- bufó luffy.

Zoro rio mientras se estiraba y dejaba salir un gemido de placer al sentir sus huesos mejores tras ello el estiramiento.

Luffy sintió como su pantalón comenzaba apretarse, siendo esto lo único que tenía puesto, debo decir que no traía bóxer o algo por el estilo.

Zoro siguió subiendo las escaleras moviendo sus caderas de un lado al otro sintiendo la mirada de luffy bajar hasta su trasero y luego subir hasta su espalda que estaba llena de mordidas, marcas de besos y chupetones, la mirada bajaba hasta sus piernas que estaban igual o peor que su espalda.

Suspiró sintiendo algo que hace mucho no tenía: felicidad.

Cuando llegó a la punta donde separaban los caminos miró a luffy por encima de su hombro y sonrió de lado.

-¿decías, señor tengo un ereccion que puedo ver desde aquí? - luffy abrió la boca, zoro pudo ver la diversión en su cara.

- ganas esta vez, Roronoa. Solo esta vez y solo por que estas más bueno que la carne - zoro nunca pensó que al ser comparado con la carne y salir vencedor lo hiciera sentirse tan bien y victorioso.