¿Saldrias conmigo? III

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Todavía era la voz de Kiba, pero ahora era yo quien trataba de hacer la lógica. Pero no pude romper con Hinata. Simplemente no pude Aunque quisiera.

...

"Estoy en casa."

"Oh Naruto. Bienvenido a casa". Hinata se acercó a saludarme en la puerta y me dio un rápido beso en los labios. Yo le sonreí.

"Entonces, ¿cómo fue tu entrenamiento de gimnasio?"

"Estuvo genial. No lo creerías, pero Kiba, el chico con el que entrené ayer y que también fue el que viste en la tienda, también estuvo allí y nos entrenamos nuevamente juntos". Dije emocionada

"Eso es ... genial. Ya no tendrías que levantar solo". Dijo Hinata. Ella le dio una pequeña sonrisa pero esta vez me di cuenta. Su estado de ánimo ha cambiado. Me pregunto qué le dije a ella que lo hizo así.

"¿Hey, qué pasa?" Pregunte preocupado

"¿Mal? No, nada está mal". ella tartamudeó

"Vamos. Estás tartamudeando otra vez. Sólo tartamudeas cuando estás nervioso". Y me alegré con eso porque cuando la conocí, tartamudeaba por completo cuando hablaba conmigo. Ahora ella podría hablar directamente a mí en conversaciones normales.

"Nada Naruto. Nos hemos hecho ramen."

"¿En serio? Oh, muchas gracias Hinata". Estaba tan feliz que la abracé. Ella es la mejor novia de todas. Para un chico gay que es.

Me senté en la silla junto a la mesa del comedor y luego Hinata subió con el tazón de ramen de miso de cerdo caliente, humeante, sabroso. Mi comida favorita es un regalo del cielo. Y viendo que era Hinata quien lo servía, ella definitivamente era un ángel.

Tomé una cuchara y luego fui a probar el caldo primero. Soplando primero para enfriarlo un poco.

"Hmmm. Esto es delicioso Hinata". La elogié cuando el caldo se abrió camino hacia mis papilas gustativas. No sabía por qué, pero para alguien que venía de una familia de clase alta llena de sirvientes, ella "sabía" cómo cocinar.

"Gracias. Me alegra que te haya gustado". Ella se sonrojó ante mi comentario. Oh, lo hice de nuevo. Pero, ¿qué podría hacer si ella está desesperadamente enamorada de mí?

Así que comencé a comer mi ramen y Hinata también lo hizo. Su ramen hecho en casa realmente era delicioso y mucho mejor que esos ramen instantáneos en una taza, pero nada puede vencer al ramen de Ichiraku. El viejo Teuchi es el mejor fabricante de ramen de la ciudad. Ah de todos modos basta de los ramen. Así que a mitad de la comida, que fue de solo dos minutos, sí, como rápido, reuní el coraje para hablar de lo que Kiba me dijo.

"Así que uhm, Hinata?" Pronuncié, llamando su atención.

"Sí."

"Kiba me invitó a ir a entrenar a parkour con él. Dijo que me enseñará lo básico y sabes cuánto quería hacer eso".

"Recuerdo que me dijiste que querías probar el parkour. ¿Cuándo vas a entrenar? ¿Tienes a alguien más contigo?" Preguntó y juro que la última pregunta tenía un tono ligeramente diferente.

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