Deseo Enterrado

Capítulo 1: El comienzo de todo.

La hermosa Alissa de solo 5 años se había enamorado de la lectura, le gustaba el final feliz de los cuentos de hadas, quería ser una princesa como la de los cuentos que su abuelo le contaba.

Aquel día de navidad se había puesto su vestido blanco favorito junto a una corona de flores, seria una princesa del mundo real, ya había planeado pasar la noche con su abuelo que vendría de visita, aprovecharía y le diría que le cuente las historias mágicas con finales felices.

El abuelo Adam estaba sentado junto al fuego, contemplando la nada, disfrutando de la tranquilidad, hace un rato había llegado, incluso ayudo en la cena de navidad pero ya era hora de descansar sin embargo se dio cuenta de que unos pasos se aproximaban...

- Por favor abuelo ¿me podrías leer la historia de la chica que es linda y hay una bestia horrible con buen corazón?- Alissa no esperó respuestas, se sentó en el regazo del abuelo Adam con el libro en manos y se lo pasó.

-¿pero si aun no respondo si te lo leeré princesa? ¿tus padres saben que ya despertaste?¿tu madre no necesita de tu ayuda? recuerda que esta embarazada y se cansa rápido- sabia que su nieta no se rendiría pero quería hacérselo un poco difícil.

-Mis padres están en la cocina y desde que desperté de mi siesta de la tarde, recogí mis juguetes, tengo permiso abuelo, por favor. - lo miró ilusionada, nada la detendría, esa noche su abuelo le leería una de sus historias favoritas.

-Esta bien tesoro.

Alissa estaba feliz, se sentía la persona mas feliz del mundo, pasando unos largos minutos para el abuelo, antes de terminar la historia Alissa sintió un olor horrible, como si algo se quemara, entrando a sus fosas nasales, sin previo aviso bajo de las piernas de su abuelo y fue a la cocina, pero antes de llegar vio un charco rojo, parecía sangre, estaba asustada, fue corriendo a buscar a su abuelo quien pensaba que a su pobre nuera se le había quemado el pavo, pero cuando vio a su nieta correr con cara de preocupación y llorando, se puso en pie inmediatamente y la tomo en brazos sin dejar de caminar en dirección a la cocina.

-dime que pasa princesa. - la revisaba con el fin de ver si se había lastimado.

-huele horrible y hay sangre en el piso abuelo, tengo miedo.- lloraba y sollozaba apenas se entendía lo que decía.

Sin soltarla el abuelo Adam se adentro al pasillo junto a la cocina, que se dirige a las habitaciones, siguió el rastro de sangre y comenzó a llamar a su hijo.

- Danny ¿Dónde estas?- lo escucho llorar y de inmediato baja a su nieta, la sangre era mucha mas y no sabia que se encontraría, no sabia si debía bajarla y apartarla, tenia miedo de que se hayan entrado algunos ladrones y le pudieran hacer daño si la dejaba, pero no quería que entrara, tenia miedo de que ellos estuvieran dentro y la lastimaran, de todos modos era riesgoso, pero prefirió bajarla y alejarla un poco de la puerta, cuando abrió la puerta...

- ¿hijo, que ha pasado? llamare una ambulancia- vio a su hijo llorando con su esposa en brazos con una gran mancha carmesí saliendo de su entrepierna.

-¡NO! no lo hagas, ya no hay mas nada que hacer papá ¿Qué no ves? esta muerta.- lloraba sin consuelo pero Adam no sabia si ayudarlo, llamar a una ambulancia o llevarse lejos a su nieta.

En el marco de la puerta, una pequeña niña hecha un grito desgarrador mezclado con miedo y desconsuelo.

-¡Mami!

Sin pensarlo Adam la tomo en brazos y la saco de la casa, la subió en su auto y comenzó a conducir sin rumbo.

-¡QUIERO ESTAR CON MI MAMÁ!- Gritaba sin consuelo, quería volver, pero su abuelo no podría permitir que volviera a ver aquella escena, su padre sosteniendo el cuerpo inerte de su madre.