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Jungkook se alejo de mi y se fue desapareciendo de mi vista, yo solo me quede parada en ese mismo lugar sin saber que hacer.

-¿Acaso tengo que traerte en mis brazos?- dijo saliendo nuevamente a mi vista a lo que rápidamente me dispuse a caminar insegura hacia el.

su casa era muy grande, no me podría imaginar que tal chico tenia una casa soñada, veía cada rincón, cada pequeña cosa me sorprendía, hasta toparme con unos cuadros, habían dos personas y Jungkook detrás de ellos, sin pensarlo dos veces deduje que eran sus padres, pero parecía reconocerlos, aunque no se de donde.

-Señor Jungkook- mi vista paso de aquel cuadro a un señora de unos 40 años o más que salio de la nada de algún lugar de aquella enorme casa.

-¿Que?- dijo sin mas siendo por completo un maleducado.

-sus padres me avisaron que llegarían en poco tiempo y querían que usted lo supiera de ante mano- comento aquella tierna señora que al notar mi presencia rápidamente acciono- Buenas tardes señorita, perdón por ser tan maleducada- dijo haciendo una reverencia a lo que hice lo mismo- no sabia que tenia visita de una joven tan linda señor Jungkook.

-¿Algo más que quieras decirme?- dijo Jungkook ignorando cualquier comentario de aquella señora.

-No- dijo algo apenada- los dejo nuevamente, con su permiso- dijo para desaparecer de la sala por donde había llegado.

Nos quedamos e silencio hasta que el se levanto del sofá y llego en donde me encontraba.

-Vamos- dijo sin más.

-¿A donde?- dije insegura de mis palabras

-Limítate a hacer tantas preguntas solo haz lo que te digo- dijo para luego tomarme de la muñeca de una forma brusca pero sin hacerme algún daño y llevarme casi a rastras hacia un lugar que parecía ser su cuarto.

Al entrar escuche detrás mio que cerro con seguro aquel lugar tan amplio, quede completamente atónita, sin movimiento alguno que quisiera articular.

De la nada el llego detrás mio posicionando su cabeza en mi hombro derecho y rodeando sus brazos por mi cintura, mis piernas temblaban, sentía que en cualquier momento caería al suelo, pero tome todas mis fuerzas que quedaban y me aparte de el.

-¿Que quieres de mi?- dije al borde de comenzar un llanto eterno.

El se notaba algo molesto por mi acción, me tomo nuevamente del brazo aplicando ahora un poco de fuerza tirándome bruscamente a un pequeño sofá detrás mio.

-No vuelvas a hacer eso, ¿acaso quieres que tu foto este por todas partes?- dicho eso me estremecí, no quería ser violada, no quería que así fuera mi primera vez.

sin duda Jungkook causaba en mi un gran miedo, no quería llegar a enfurecerlo más.

-Por favor- dije aun conteniendo mis lagrimas- no me hagas daño.

-¿Daño?- dijo riendo- solo te haré gozar.

dicho esto Jungkook se abalanzo sobre mi indefenso cuerpo, yo solo intentaba alejarlo de encima mio, pero toda acción era inútil, era más fuerte que yo en todos los aspectos.

me besaba mi cuello, con una gran intensidad, hasta llegar a sentir mordidas, que me ocasionaban dolor, una de sus manos paso de mi cintura a uno de mis muslos eso me estremeció no sabia que hacer solo intentar alejarlo.

-¿Puedes dejar de moverte?- dijo con una mirada más obscura que antes, se veía hecho una furia, causo miedo en mi en un instante dejándome nuevamente sin fuerza alguna- así me gusta- dijo para retomar lo de antes.

𝐀𝐍𝐎𝐑𝐆𝐀𝐒𝐌𝐈𝐀 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora