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Ya era de día y me sentía cansada.

Ayer al llegar a mi casa luego de quitarme con Taehyung de aquel lugar infernal decidí ir a la ducha, no aguantaba mi cuerpo en ese momento.

Me desvestí quedando completamente desnuda, frente al espejo donde claramente no miraba mi cuerpo, no, miraba los chupetones que me dejó Jungkook momentos antes.

Al recordar esas escenas mi cuerpo se endureció, en mi mente sólo pasaba que esos chupetes fueron hechos como si estuviera lamiendo una paleta, sólo que sin piedad y de manera abusiva.

Me cambié para ponerme mi uniforme, con suerte y los chupetes se quitaron con maquillaje, tenía miedo a que alguien me los viera ahí.

Luego de salir de casa fui directo al bus de la escuela, no era alguien que le gustara el caminar hacia ella.

Llegué a las afueras del Instituto esperando a la llegada de Han que me había hecho esperar unos 5 minutos.

-Lo siento- dijo sonriendo al verme- se me hizo tardecito

-Calla y vamos- dije para ir caminado hacia nuestro salón.

Al llegar nos percatamos de que no había llegado el profesor aún, por lo que aproveche el momento y me recosté en mi banca.

Todo era paz y tranquilidad hasta sentir vibrar mi celular

Era una llamada, de un número sin registrar.

Dude en aceptar, pero usualmente mi padre me llamaba de distintos números ya que no tenía un celular fijo.

Acepté la llamada para acto seguido llevar el celular a mi oído.

Hola linda.

Respondió una voz gruesa que ya reconocía, un sudor frío comenzó a recorrer por todo mi cuerpo en ese instante.

¿Jungkook..?

Claro bebé, ¿quien más seria?

¿que.. ocurre..?

Hoy pasaré por ti después de tu escuela, necesito terminar lo de ayer.

Eso ocasionó que mis órganos se contrajeran, sin duda Jungkook ocasionaba muchos sentimientos en mi, algo indescriptible que sólo me atrapaba.

No aguanto más por verte.

Soltó una risa y me colgó, no sabía que hacer, sólo decidí recostarme nuevamente y maldecirme por todo lo estupido que yo comencé.

Las horas pasaron volando, algo que no quería que pasara, la hora de Educación Física habia culminado, todo mi cuerpo empapado de sudor, algo que no me ocasionaba nada de asco, ya que sólo era algo normal en el cuerpo.

Han se acercó a mí como siempre para saber si me ducharia pero no dijo ni una sola palabra y sólo tomo mi mentón y lo levantó.

-¿QUIEN TE HIZO ESO?- gritó mi loca amiga.

-¿que?- dije sin entender, aún no comprendía nada.

-ESOS CHUPETÓN...- no la deje acabar, le tape su boca en seguida.

-TE LO EXPLICARÉ- conteste rápido, estaba asustada, no sabía que decir ante ello.

-bueno, espero tu respuesta- se cruzó de brazos y me miró.

Le conté todo, todo lo que pasó, en realidad ella se quedó callada, no dijo nada hasta haber acabado, lo único que musitó es..

-¿Pero es lindo?- sin duda tenía una amiga muy diferente.

𝐀𝐍𝐎𝐑𝐆𝐀𝐒𝐌𝐈𝐀 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora