Para ti

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CAMILA

Desde que me mudé con papá he vuelto a ser su pequeña, y eso incluye el sobreprotejerme y el querer controlar mis movimientos. Sin embargo he sido muy firme con ello. Los días en que me quedo a dormir con Lauren, he tenido que mentirle diciendo que tengo trabajo en el estudio. Por supuesto como todo padre duda pero sé que si le digo que estaré con Lauren, se negará rotundamente y dirá que ella debe venir a visitarme.

A pesar de esos inconvenientes, ese par comienza a mejorar su relación, Lauren no permitiría que mi papa nos separase y el parece ya entenderlo. Aún así no deja de molestarla con detalles como "¿apoco aún no terminas la carrera?" O  "¿Tus papis ya te dieron otro auto?".

Y la realidad no es así. Lauren estuvo ahorrando desde hace años y se compró otro auto. Yo misma la acompañé a la agencia y le ayudé a elegir su nuevo "bebé" como ella le llama. Papá sabe que es una mujer increíble y que está haciendo lo mejor que puede por ganarse su aprobación. Aún cuando a veces se mete por mi ventana a escondidas y me hace el amor mientras mi padre duerme.

-Deja de pensar en esa niña- la voz gruesa de papá me interrumpe mis increíbles y sexys pensamientos de mi novia y yo en la cama.

-Papá, ¿cuándo dejarás de llamarle niña?

-Cuando deje de serlo- sonríe.

-Ella no es una niña, papá. Ella tiene un trabajo, está por terminar su carrera como maestra para unirse a la escuela oficialmente.

-Le dices adulto a esa niña que mientras su equipo de hockey está en pleno juego le muestra su lengua a los demás niños cuando la suyas anotan- me mira con una ceja levantada.

Aunque no lo crean papá me ha acompañado a algunos partidos de Lauren con su equipo, y casualmente mi hermosa novia se ha dedicado a hacer el ridículo en esos partidos.

-Ella solo bromea, trabaja con niños, sabe cómo comportarse con ello, y jugar de esa forma- me encojo de hombros mientras reviso los fideos que se están cocinando.

-Sí, claro. ¿Y que dices de el día que le dijo "Snape" al entrenador del otro equipo?

-Bueno, el sujeto en verdad se parecía a Severus Snape, amargado, feo y gritón- me reí recordando cómo Lauren defendió a un niño de otro equipo cuando su Coach lo estaba regañando de una forma muy fea- además estaba defendiendo al pequeño.

-Sí como no, y al subir al auto dijo "Pobre Dobby, estúpido Snape, ¿Quién se cree para gritarle de esa forma?".

Comencé a reírme  mi novia era tan estúpida diciendo esas cosas, pobre niño, sus orejitas eran grandes y estaba demasiado delgado.

-Y ahora tú te ríes de sus tonterías, no creo que sea un buen ejemplo para ti.

-¿Y qué es lo que quieres papá?- dejé de picar el tomate y lo miré.

-Quiero lo mejor para ti.

-Ella es lo mejor para mi- lo vi negar- La amo.

Era la primera vez que lo admitía en voz alta, ni siquiera se lo he dicho a ella. Su mirada se suavizó.

-Hija, ella está acostumbrada a los lujos, a obtener lo que quiera cuando quiera, nunca tomará nada en serio, siempre estará bromeando, si algo deja de gustarle lo dejará, y no quiero que te lastime de esa forma.

-Papá, ella jamás me lastimaría. Lauren me quiere. Sé lo que su familia tiene, pero créeme cuando te digo que desde que vive aquí se ha hecho responsable de sí, no les pide nada a sus padres, ella simplemente se paga sus cosas. Y si lo sé, es muy bromista y dice cosas tontas... pero, me hace reír, me hace reír tanto que a veces tengo miedo de mojar mis pantalones. Y si ella un día me deja, sé que será porque no me ama, no porque se aburra de mi.