Aquél "Tenemos que hablar" de Tony fue el inicio de toda una serie de tragedias. Peter miró el taller de su padre (cabe mencionar que muy pocas veces tiene permiso de acceder a este lugar) su vista se posicionó sobre un rubio de ojos azules, este le miró un poco nervioso.
—Hijo, necesito que tomes esto con calma ¿De acuerdo?
Peter asintió en respuesta a su padre, seguía sin entender que hacía ese tipo con ellos, hasta dónde sabe ellos dos no son los mejores amigos y podía jurar que no estaban en una misión u hora de trabajo, porque Tony Stark jamás involucraba a su único hijo en asuntos peligrosos.
—Papá tengo catorce años no cinco, soy lo suficiente maduro para cualquier situación
Deseó jamás decir aquello.
—Rogers y yo estamos saliendo
—¡Qué! —Los ojos color café se posaron sobre Tony y después en Steve—. ¿En serio, con el anciano? ¡Pero papá, tu lo odias!
Anthony rió de manera casual, como si la situación no fuese tan importante o como si el rubio no estuviera muriéndose de vergüenza, Peter se encogió de hombros al no entender a su padre, probablemente se trataba de una broma, si, eso tenía que ser, una pésima broma.
—Pete, jamás dije que odiara al anciano
—Tony... esto es serio —Por fin Steve Rogers se armó de valor para hablar sin titubear—. Pete, hace algunas semanas tu padre y yo decidimos iniciar una relación
—En primer lugar soy Peter no pete, papá es el único que puede llamarme de esa forma
Por primera vez pudo ver la expresión seria de Tony Stark entonces deseó hacerse pequeño y desaparecer de aquél momento tan incómodo. Después de varios segundos el mayor fue el primero en romper el silencio.
—Está bien Peter, sólo quiero que seamos amigos, no sé como lidiar con un adolescente pero confió en que Tony pueda ayudarme —El capitán trató de sonreír.
—Anciano, suerte con eso.
Dijo para salir prácticamente corriendo del taller, pudo escuchar a su padre llamándolo por su segundo nombré el cual no le agradaba del todo, fue a su habitación donde se encerró por largas horas, no podía asimilar la idea de su padre junto a Steve eso era realmente patético, además estaba cien por ciento seguro que Tony seguía amando a su madre como el primer día. Sus labios se curvaron en una pequeña sonrisa, tenía el plan perfecto para separar a la nueva pareja. Steve Rogers no era el candidato para ser su padrastro, y el mismo se encargaría de ese pequeño problema. Sin embargo su sonrisa desapareció al instante en que escuchó como alguien golpeaba la puerta.
—Adelante —Suspiró al ver a Tony delante de él, Stark lo miró por unos largos segundos hasta que decidió hablar.
—Pobre Capi-paleta lo has hecho sentir mal —Anthony negó a sus propias palabras—. Pete, quiero que bajes ahora mismo y le pidas una disculpa a Steve
—¿Un Stark pidiendo disculpas? —Sonrió con ironía—. Esto es nuevo
No es que Benjamín fuese una persona egocéntrica o algo parecido, era todo lo contrarió, amable, respetuoso, bondadoso y lo más importante una persona con sentimientos. El mayor se cruzó de brazos sin dejar de mirar al pequeño castaño.
—Entiendo que estés en modo ¿Protector? No tiene que ser así, Stevie no es una amenaza
—¿Stevie? —Rodó los ojos—. ¿Ahora tienen sobrenombres ridículos?
—Lo amo ¿Bien?
Esas simples palabras bastaron para romperle el corazón y hacerlo llorar ¿Hace cuanto no lo hacía? Tony se acercó y trató de abrazarle pero Peter no se lo permitió, rápidamente se alejó y se secó las lágrimas con rencor.
—Tu no lo amas, tu amas a mamá y siempre será así
Ahora fue Anthony quién se marchó sin decir nada más, una vez que el mayor hubo cerrado la puerta Peter se lanzo a la cama para llorar durante el resto de la tarde. Sin duda haría cualquier cosa para alejar a Steve Rogers de la vida de los Stark.
