vínculo

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Me desperté de golpe con un grito, uno que hace que cualquiera quiera correr y esconderse. Salté del sofá en el que estaba durmiendo y salí corriendo de la sala de estar, subí las escaleras hacia donde estaba el grito. Pasé por delante de la forma eliminada de Snow, sin mirarla, la culpa me devoraba vivo. Cuando estaba a mitad de camino por el pasillo de arriba, los relojes dieron la medianoche. Escuché otro grito, haciéndome correr más rápido a la habitación en la que estaba alguien. Cerré la puerta para ver qué le pasaba a Regina. Estaba sentada en la cama, con una fina capa de sudor en ella, agarrando su brazo.

"¿Estás bien?" Pregunté, agachándome para recuperar el aliento. Ella levantó la vista, sorprendida de ver que estaba en su habitación.

"¿Qué diablos estás haciendo en mi habitación?" Ella preguntó con los dientes apretados. Ella dejó escapar un siseo de dolor y sostuvo su brazo con más fuerza

"Salvándote. Ahora, déjame ver tu brazo". Ordené, abofetearme mentalmente por cómo empecé la oración.

"¡No!" Ella gritó, apartándose de mí. Rodé mis ojos hacia ella.

"¡Deja de actuar como una niña de dos años, Regina! ¡Muéstrame el brazo!" Grité, agarrando su brazo. Miré su piel pálida al principio todo lo que vi fueron sus venas negras de medianoche. Miré más de cerca y vi una línea quemada en su brazo. Lo presioné un poco, tratando de averiguar qué lo había causado, solo para obtener un silbido de la Reina.

"¿Qu-qué pasó?" Pregunté, soltando el brazo pálido. Miré en los ojos de Regina, solo notando las lágrimas.

"No lo sé. El reloj se quedó en la medianoche y lo vi. Estoy segura de que no soy Cenicienta".

Sentí crecer mis ojos. Medianoche medianoche ¡Tres noches es todo lo que consigo! Es una advertencia. Solo quedan dos noches para salvar a Regina.

"Probablemente no sea nada". Mentí. "Gritaste antes de la medianoche, ¿por qué?" Yo le pregunte a ella. Sabía que ella odiaba parecer débil frente a los demás, pero necesito saber por qué.

"Tuve un sueño." Ella dijo llanamente. Quería poner los ojos en blanco, pero mi mente regresó a algo que hizo que se operara antes.

"Bueno, creo que quieres hablar de eso." "Le dije. Ella me miró con una mirada divertida en sus ojos."

¿Y por qué piensas eso? "Preguntó, con el veneno goteando de las palabras."

Porque si no, Probablemente no estaría aquí ahora mismo. "Dije, tratando de no repetir nuestro primer corazón a corazón. Ella soltó una risita ahogada, sobre la vieja Regina." Ella dijo asintiendo con la cabeza. Vi como los movimientos que ella hizo, causaron que sus suaves rizos rebotaran. Me fascinó esta hermosa criatura, esa es mi alma gemela. Cómo es la cosa más hermosa en todos los reinos, incluso si ella era malvada. Sus ojos oscuros se clavaron en los míos, la tensión entre nosotros se espesó

"¿Ves algo que te guste, ladrón?" Preguntó, mordiéndose el labio inferior. Una sonrisa astuta apareció en sus labios, sus labios llenos y suaves. Quería reírme de ella, ser honesta, y depositar un suave beso en sus labios, permitiéndole agregar el calor habitual que tienen. Ella miró hacia abajo, una vez más.

"Sí, pero es posible que quieras contarme acerca de los sueños que tienen en ellos". Puse un dedo debajo de su barbilla, dejando que sus ojos marrones encontraran mis azules.

" No vas a dejarlo pasar, ¿o si ladrón? "Preguntó. Sacudí mi cabeza, rápidamente, haciéndola sonreír."

" No, majestad. "Me burlé."

" Bien. Mis sueños tenían personas y lugares ", dijo, levantando las piernas y abrazando las rodillas.

¿Por qué no hablas de eso?" Yo dije, con calma. Mi mano se estaba acercando lentamente a la Reina.

"No creo que haya pedido terapia, doctor Hopper". Ella chasqueó. Dejo escapar una risita suave.

"Sabes que no soy nada como ese grillo ". Le dije. Su sonrisa creció un poco, una que la vieja Regina me regalaría."

" Primero vi un chico y yo en los establos. Madre le arrancó el corazón. Lo siguiente fue mi primer contacto con la magia. Después de eso fue el horrible día después de casarme con el rey. Luego fui yo matando a mi padre. Entonces estaba llorando porque el niño, creo que se llamaba Henry, se escapó. Entonces, cuando mi madre murió. A continuación, el niño parecía muerto en una cueva. Entonces, me despedí como una nube, en la que parecía la maldición, corría hacia todos. Finalmente, te mostró, casi muerto. "Sabía que debía haber más en los sueños, por la forma en que se veía, pero optó por no presionarla, debido al hecho de que acaba de abrir algunos". los sueños significan ", dijo ella, con la cabeza cayendo de rodillas.

"Bueno, Milady, diría que esos eran recuerdos". Ella me miró confundida. De repente me di cuenta de lo cerca que estábamos. La sonrisa en mi cara cayó cuando mis ojos encontraron sus labios.

"Bésame ya". Ella siseó. No segundos después mis labios estaban sobre los míos. Su lengua exploró mi boca, haciendo el beso mucho más profundo. Rompimos cuando la necesidad de aire creció demasiado para ignorar. La miré a los ojos, esperando que fueran más suaves, se parecieran más a los de Regina sobre los que tiene esta Reina. Nada cambió

"No entiendo". La sonrisa de la reina cayó. "¿Qué?" Ella preguntó. Me aparté de ella, tratando de alejarme de ella.
"¿Por qué no se rompió la maldición?" Pensé en voz alta. Podía sentir alguna lágrima creciendo en mis ojos.

"Estabas jugando con migo. "Ella gritó. Me di vuelta, saltando al ver a la reina enojada. Sus ojos brillaban, la púrpura se mezclaba con el marrón, y sus rasgos se oscurecieron."

¡No! ¡Nunca haria eso! ¡Te amo, Regina! ", Supliqué, con el corazón destrozado."

¡Es, majestad, ladrón! ¡Sal de mi habitación! ", Gritó. Cuando no me moví, me empujó con magia, haciéndome volar por el pasillo. La puerta se cerró de golpe detrás de mí. La oí llorar y el sonido de cosas rompiéndose. Las lágrimas comenzaron a caer. Bajé la cara ante el ruido. Sabía que era peligroso quedarse, pero nada iba a separarme a mí ya mi alma gemela de nuevo.

Un Gran Amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora