En el desván.

Cap.1-Arturo llega al pueblo.

Arturo; llega a casa de su abuela y llama al timbre de la puerta.
Le abre una chica delgada, de piel pálida, cabello castaño oscuro y ojos azules. Ésta llama a la abuela de él.
- Doña Engracia; aquí hay un chico!.
-Ah; es mi nieto Arturo.
Viene a pasar las vacaciones aquí conmigo. Pasa hijo!.
-Hola abuela! Cómo estás?. Quién es, ésta chica?.
-Se llama Cecilia.
Es hija de los vecinos que vivían en la casa de al lado.
Ella quedó huérfana y su madre, antes de morir;me pidió que me quedara con ella. Es una larga historia.
-Es bonita, aunque está un poco pálida. Seremos amigos, si ella quiere.
-Cecilia, acompaña a mi nieto y le muestras su habitación. Para que sepa, dónde va a dormir durante su estancia aquí. Y enseguida, para abajo;que vamos a cenar.
-Si, señora.- Contesta la chica con desgana.
- Arturo; Cecilia es como si fuera tu prima. Entendido?.
-Si abuela, entendido.- Contesta él, muy serio.
. . .

Suben los dos; por unas escaleras para la planta más alta, de la vieja casona.
Y Cecilia le muestra dónde están las habitaciones.
- Mira Arturo, éste es el dormitorio de tu abuela;
éste es el mío y éste es el tuyo; aquí hay un cuarto de baño y . . .
- Y ésta habitación, de quién es?.- Pregunta Arturo, intrigado al ver una puerta cerrada con llave. Pués; las demás están abiertas.
-Ah... esa?... - Empieza a decir la chica, sin terminar de hablar. Poniéndose más pálida, todavía.
- Sí; esa. Porqué te pones así.? Parece, que has visto un fantasma.
- Es que . . .
- Arturo, Cecilia, bajar ya; que está la cena, hecha!.- Se oye la voz de la abuela, llamándolos, para cenar.
- Ya bajamos!.- Contesta Arturo. Quedándose con las ganas; de saber lo que puede haber, en ese cuarto.
. . . . .

Después de cenar, ven una película en el televisor, acompañados de la abuela. Al terminar, suben las escaleras para ir cada uno, a su recámara. Se despiden de la abuela y se encierra cada uno, en su cuarto para dormir. A la hora siguiente; cuando Arturo por fin, empezaba a conciliar el sueño; empieza a oír una música de piano. Y viene el sonido de la habitación, contigua a la suya.