No Estare Para Toda La Vida.

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Los problemas en mi casa eran de lo mas normal, mamá y papá discutiendo por el dinero o por mi actitud o la de mi hermana (la mayoría de las veces por mi actitud) siempre que sentía que mi mamá no tenía la razón trataba de decirlo pero siempre existía un contra argumento más firme con el que me reclamaba, así que la mayor parte solo intentaba no decir nada, pero contestando lo que me preguntaba.

Solía tener un bajo promedio en la escuela, no tanto por no ser inteligente, si no que nunca encontré un indicio para querer ser bueno, pero el día que Samara me empezó a ayudar, algo cambio en mi, recalcó que ella era muy linda, me gustaba no lo voy a negar, pero siempre contuve ese secreto ya que, nos llevábamos bien que no quería arruinarlo todo.
Cada que yo no entendía algo, dejaba de hacerlo o me distraía llegaba Samara y me ayudaba, me decía que me concentrará, siempre adore que hiciera eso, cómo que era el impulso que necesitaba.

Cuando Alex no estaba y Erandi, Nelly y Sofi estaban en sus "asuntos" Samara lo notaba y venía conmigo, recuerdo una vez una frase que me dijo.
- Se lo que se siente estar solo, por eso no se lo deseo a nadie.- me gustaba mucho realmente, pero yo la veía muy lejos de mi alcance, pero después de esas palabras sentí que me comprendía como si supiera como era yo, aunque no me hice muchas iluciones siempre tuve una llama de esperanza.

Erandi era muy linda conmigo, Nelly no tanto pero era muy carismática, como un gato pequeño y Sofi pues era ella, demostraba amor a su manera, cuando estaban conmigo siempre eran muy lindas y amables, se comportaban como unas señoritas muy correctas eran la definición de niñas bien portadas, las tres, aunque yo no les agradaba del todo, yo era más vándalo, más vago que ellas, sentía como si fuera un pequeño insecto en medio de un bosque inmenso, eran demasiado inteligentes, bastante se podría decir. Siempre me ayudaban en lo que no entendía, solo me lo explicaban, no eran como Alex que me aventaba la libreta y me decía
- Cambiale un poco y dilo con tus palabras, no lo copies igual -aunque siempre lo copié igual.

Casi nunca me preocupaba por las tareas pero aún así llevaba calificaciones con un promedio medio, por más que le pusiera huevos en una materia, siempre se me fugaba algo malo en las materias, si yo no era dedicado sin un buen impulso menos haría algo al respecto.

-¡Equipos de 4!- Grito la maestra de ciencias sociales (la materia que más me gustaba si así podría decirle a la única materia en la que si entregaba las cosas)

Mire a Axel y luego voltee a ver a Sofi ella solo nos hizo la seña de que nos recorrieramos hacia su lugar, cuando le dije que Alex sería con nosotros Sofi dijo de modo sarcástico.
- ¿Si sabes escribir?- obviamente Erandi, Nelly y yo nos reímos por el chiste muy bajo. Alex solo se enojó un poco y se rió, comenzamos a hacer el trabajo y en 10 minutos estaba terminando, cuando me levanté a entregarlo Samara me dijo que si podía estar en el recreo con ella, pues últimamente se sentía un poco triste, sonará muy culero pero me gustaba la idea de que estuviera así, porque era de los momentos en los que ella quería estar conmigo. Mi oportunidad.

En el recreo Alex no pregunto y solo salió del salón al igual que Erandi, Sofi y Nelly, me levanté y camine a la banca de Samara estaba recostada con su cabello cubriendo su rostro y unos audífonos reproduciendo música pop de moda, no la quise molestar y solo me senté a su lado admirando su cabello, al parecer solo tenía un audífono en función y dijo
- De verdad estoy tan fea que tienes que mirarme tanto - me percate de su voz quebrada note que estaba llorando, me levanté y le pregunté qué pasaba se limitó a contestar y me abrazo, yo solo la sostuve y le dije en el oído
- Se lo que se siente estar solo, por eso estoy aquí, para apoyarte - solo me apretó más y yo acaricie su cabello dándole afecto de alguna manera para que parara de llorar y recobrará  la cordura.
Desde la ventana del aula pude ver a Alex coqueteando con una chica y a otros morros con el, en ese momento pensé en lo mal que de debe sentir para tener que estar rodeado de chicas y otros chicos todo el tiempo, no podía imaginar que pasaba por su mente en esos momentos solo pensé, en lo bien que sentía un abrazo cargado de emociones y muy reales, de alguien que puede estarla pasando verdaderamente mal.

La tuve abrasada todo el recreo, mientras sentía como su respiración volvía a ser la misma y sus ojos volvían a tener brillo; me sentía mal, no por el cómo se encontraba ella, si no por el echo de que no podía hacer nada, mas que darle un abrazo y esperar, que maldita impotencia de no poder ayudarla en algún otro sentido, no se cómo lo supo o si sintió algo malo pero ella me dijo.
- Con que estés ayudándome emocionalmente para mí, es todo lo que necesito, alguien que me escuche, que me entienda y que no insista, gracias por esto en serio lo valoro mucho, te lo contaré a su tiempo.-

Esto último me dejó en un mar flotando, como si no pudiera hacer nada mas que esperar la ayuda...