Archivo #07.5: Luka Mikhailov y la camara secreta.

5 2 0
                                    

[29/01/29 - 00:14 UTC: ±0]
[Océano Atlántico]

- L: Veamos... La luz roja ya está prendida, debe estar grabando.
- E: ¿Hmm? ¿Y esta cámara Luka?
- L: Ah, es la cámara vieja de Ziro.
- E: ¿Te dió permiso de usarla?
- L: Este... Si...?
- E: Ahh... Ya sabes que no le gusta que le toquen las cosas.
- L: Si, ¿Pero cuál es el problema? Si no la vamos a volver a usar a la cámara.
- E: Ah, bien. ¿Y para que la trajiste?
- L: Ziro ahora tiene las cámaras nuevas, pero no nos las quiere dar, ¿No es así?
- E: Así es, ya que Bruno rompió varias de las viejas.
- L: Bueno, pensaba usar la última que quedó para grabar lo que nosotros hagamos.
- E: ¿Algo así como una cámara exclusiva para nosotros?
- L: ¡Claro! ¿Que te parece?
- E: Hmm... Bien, puedes usarla, solo ten cuidado de que Ziro no te vea con ella.
- L: ¡Entendido! Bueno, supongo que tengo que hacer el monólogo...

Eran las doce de la noche, y por la ventana del avión se podía ver como el azul del océano, se fundía con el negro cielo estrellado. Ziro, nuestro general y líder de la base, había sido encomendado con la misión de proteger a una chica, y llevarla hasta Londres, mientras que nosotros, asignados como sus acompañantes, en realidad podríamos disfrutar de un segundo destino vacacional.

- L: Vaya, no pensé que me saldría tan bien.
- B: ¡¿Que dijiste, dientes chuecos?!
- A: ¡Que tenés que dejar de romper cualquier cosa que veas!
- B: ¡Yo voy a romper lo que quiera! ¡Cómo está maldit-
- L: Tocas la cámara, y 10.000 voltios van a recorrer tu cuerpo en tan solo 15 segundos.
- B: ...o vaso! ¡Estúpido telgopor que no se puede reciclar!
- A: Si se puede reciclar... Por cierto, ¿Esa cámara no es...
- L: Si, es la vieja cámara de Ziro.
- A: ¿Y porque la tenés vos?
- L: Para grabarnos a nosotros, ya que Ziro no nos presta alguna de las cámaras nuevas.
- A: Ah... Y todo culpa de este mono que tenemos acá.
- B: ¿Que mono?
- A: Ah, uno que se escapó del Zoológico de París.
- B: Uh, eso es malo. ¡Ah, esa cámara!
- L: Si, es la vieja camara de Ziro.
- B: Vaya... ¡Yo también quiero usarla!
- L: Jajajaja, no.
- B: ¡Ahh! ¡¿Por qué no?!
- A: Porque rompiste 8 de estas cámaras el año pasado.
- B: ¡No fueron 8!
- A/L: . . .
- B: Fueron 9... ¡Pero a está si la voy a cuidar!
- L: Hmm... Bien, bien, pero solo por un rato.
- B: ¡Yay! Ahora, veamos...

Eran las doce de la noche. Y por la vent-
- L: Esa parte ya la hice.
- B: ¿Ah si? Bueno, entonces...

Nuestros aviones volaban uno detrás de otro. Nosotros, los Seventy Seven viajabamos en nuestro gran avión, mientras que Ziro y su chica viajaban solos en su propio jet privado. Ella era hermosa como una joya preciosa, con su piel blanca como el diamante, sus ojos verdes como esmeraldas, y su pelo rubio como finas sedas de oro.
- B: Aunque le faltaba en las tet-
- A: Bien, alto ahí. Ya habíamos dicho que no haríamos ningún comentario discriminatorio. Además, cuando Ziro escuché esto, o incluso peor, ella...
- B: Ninguno de ellos está acá.
- L: Y Ziro no debería saber que tengo la cámara.
- B: Entonces... Puedo decirlo, ¿No?
- A/L: No.
- B: Ahh... son unos aburridos.
- A: No pienso dejar que te burles de una mujer.
- B: Ah, perdón, señor justiciero, caballero de la noche, no era mi intención ofenderla a ella, o a usted.
- A: Sabes, ofendes a todo el mundo. Directamente tu existencia es molesta.
- B: ¡Ah, bien! Si soy tan molesto e inutil entonces, párate acá e intenta narrar algo.
- A: Bien, lo haré, y voy a demostrarte que puedo hacerlo mucho mejor que vos.
- B: Quiero ver qué lo intentes.

Londres era nuestro destino. Una ciudad que por el día era tan maravillosa como cualquier otra capital europea, pero de noche, la oscuridad y las tinieblas la tapaban. La asquerosidad de esta ciudad rozaba con los límites de lo humanamente aceptable. Ladrones, asesinos, criminales de toda índole paseaban por la nocturna capital inglesa.

- L: ¡Wow!
- A: ¿Hice algo mal?
- L: No, para nada. De hecho, fue bastante profundo.
- A: Gracias, es la primera vez que lo hago.
- L: ¿Encerio?
- A: Así es, es la primera vez que hago una narración frente a las cámaras.
- L: Vaya, para ser tu primera vez, te salió muy bien.
- A: Gracias, gracias.
- L: ¿Tu qué opinas Bruno?
- B: Hmm... No estuvo mal.
- L: Y pensar que hasta Bruno te aceptaría.
- B: Lo que todavía no entiendo es porque odias tanto Londres.
- A: No es que la odie, solo que no quiero ver a mi familia. Son muy... Cómo decirlo...
- L: ¿Amargos?
- B: ¿Imbéciles?
- A: No... Cariñosos, demasiado de hecho.
- B/L: Ah.
- A: Cada vez que voy me abrazan, me acarician.
- L: Te tratan como un niño pequeño.
- A: Exacto.
- B: ¿Y por eso no querés ver a tu familia?
- A: Si. De hecho, fue por eso que me uni al ejercito, para que dejen de tratarme como un niño.
- L: ¿Y funcionó?
- A: Algo, ellos no aceptan que me haya unido, pero tampoco me importa mucho su opinión.
- B/L: Ah.
- L: Bueno... ¿Que mas podemos hacer?
- B: ¿Hacer con que? ¡¿Con sus padres?!
- A: ¡Con la cámara, imbécil!
- B: ¡¿A quien llamas imbécil, dientes chuecos?!
- K: ¿Por que hay tanto ruido acá?
- L: ¡Kau! ¡Eras el único que faltaba!
- K: ¿Faltar a que?
- E: ¿Seguís jugando con la cámara, Luka?
- L: ¡¿Jugando?!
- K: ¿Que cámara?
- A: Parece que ya estamos todos aquí.
- E: Hacia mucho que no nos juntabamos los cinco solos.
- B: ¿No deberias estar pilotando?
- E: Piloto automático. En fin, les parece que aprovechemos para hacer una reunión de equipo.
- L: ¡Si!
- A: No es mala idea.
- K: Es bueno aprovechar el tiempo.
- B: ¿Para que?
- E: Hay varias cosas para hablar, como-

De repente, se sentía un sonido. Era una llamada, era de Zi-
- E: ¡Apaga la cámara! ¡Apaga la cám...

U.N.A.F.: Seventy Seven 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora