¡Buenos días mundo! Ya es hora de ir a la escuela, primer día de clases y estoy algo nervioso, ya no es lo mismo que la primaria, ya crecí, por fin ya es mi primer año en la secundaria y estoy muy nervioso ¿será que me harán bullying por mi estatura? Siempre fui muy pequeño y tengo miedo a que me hagan algo, pero igual estoy emocionado por conocer a más gente, a hacer nuevos amigos y a estudiar muchísimo, claro.
Mi uniforme no me gusta tanto, un pantalón de vestir negro, camisa azul turquesa, chaleco negro con franjas turquesa, suéter negro con franjas turquesa y una corbata ¿adivinan qué color? Si, turquesa, por alguna extraña razón no me gustaba mucho el color turquesa en el uniforme, pero, no puedo hacer nada, no soy el director de la escuela o algo así, pero por suerte La primer semana podíamos ir vestidos como quisiéramos sin usar el uniforme feo.
Bien, hora del desayuno, llegue a la mesa y me encuentro ya con varios platos servidos, uno de mi mamá y otro de mi hermano mayor, no tengo papá o bueno, si tengo, pero nunca lo conocí, al parecer se separó de mi mamá después de tenerme, no sé entendían bien y decidieron tomar caminos separados, mi hermano se llama Dante, es un chico alto, 1.78 de altura, moreno, fornido, ojos color caoba y una hermosa sonrisa y de 17 años, en cambio yo, chaparro de 1.65, algo blanco de piel, flaco, ojos más cafés que el mismo color café y una sonrisa metálica, así es, tengo brackets, 11 años (Ya casi por cumplir los 12) y mi nombre es Christopher.
Me senté en la mesa ya para desayunar, mi mami había hecho huevos con longaniza y frijoles refritos, pero mi hermano siempre me ofendía por mis gustos musicales, ya saben, el es el típico chico que escucha electrónica, rock, metal, esas cosas, en mi caso es algo muy distinto, soy lo que le pueden decir un chico "Fresa" me gusta más el pop, trendy, alternativo, R&B, así que siempre me decía joto, maricon, gay, etcétera; esa mañana decidí vestirme algo casual, pantalón entallado, una playera blanca con manchas negras, una sudadera rosa que siempre he amado con toda mi vida y unos converse, así que cuando mi hermano bajo para desayunar, tuvimos una pequeña platica del porque me vestía así:
- Christopher, ¿es enserio que te vas a ir así vestido a la escuela? -
- Si, ¿está sucia mi ropa o porque lo dices?
- No está sucia, pero, solo mírate, ese pantalón pegado, con lo flaco que eres hasta parece que te chuparon hasta los huesos y ese suéter rosa, se ve demasiado afeminado, pero claro, que esperamos de un joto en la familia.En ese momento mi mamá lo escucho ya que iba llegando para desayunar, así que ella le gritó:
- ¡DANTE, VUELVES A DECIRLE ESAS COSAS A CHRISTOPHER Y AHORA SI TE QUEDARÁS CASTIGADO TODA LA SEMANA! -
Yo en ese momento me espanté y di un pequeño brinco en la silla, ya que me sorprendió que le gritara mi mamá así a Dante.
- Dante - Dijo mi mamá algo un poco más calmada - Vámonos, te llevo a la secundaria para que veas el camino y te acostumbres por si un día no puedo traerte o no pueda ir por ti -
Yo afirmé con la cabeza y salimos camino a mi nueva escuela, yo aún seguía nervioso, no sabía que tan grande era la escuela, como serían mis maestros y compañeros, como serían las nuevas materias y cómo sería mi vida diaria usando esta corbata turquesa, de verdad que me molestaba.
Pocos minutos después de caminar hacia la escuela, pensando y escuchando un poco de música con mis audífonos puestos, me di cuenta de que estábamos a punto de llegar, ya que veía a muchos jóvenes, wow, ya no eran niños, ahora son jóvenes y yo con 11 años, bueno, veía a muchos jóvenes caminar hacia la misma dirección que yo y me percaté por igual que estaban usando el mismo uniforme, solamente me quede pensando porque habría 2 colores distintos en las franjas y corbatas de los compañeros, los más grandes tenían las franjas y corbatas de un color vino y había otros que eran de color amarillo y aparte los de nuevo ingreso que iban con ropa normal, me gustaba muchísimo más como se veían en color vino que en turquesa, pero en fin, por algo teníamos colores distintos.
Llegamos por fin a la escuela donde empezaría todo de nuevo, desde ceros, así que me puse nerviosos, solamente le di un beso a mi mamá en la mejilla y me despedí de ella casi sudando por los nervios de entrar a la secundaria, pero tome aire, respire y entre.
Como lo tenía previsto, era un lugar muy grande, pasillos hermosos colores blanco, botes de basura y de reciclé muy bien acomodados, casilleros de color verde que en verdad me sorprendieron ya que yo nunca tuve uno y una recepción muy hermosa, con sillones, y un logro en medio de un águila, al parecer era el loto de la escuela.
Después de un rato admirando lo que iba a ser mi nueva escuela, escuché por las bocinas de la escuela que los alumnos de nuevo ingreso deberían de ir a la sala de comunicación en donde se nos asignarían nuestros grupos, yo por ende, no sabía donde era esa sala ya que como les dije, la escuela era demasiado grande, así que le pedí a un prefecto que si me podía dar un mapa de la escuela, claro, eso fue en su momento porque ahora me pongo a pensar del porque no le pregunté en donde estaba la sala de comunicación, pero en fin, agarré el mapa, lo abrí y no entendía nada, así que camine como 10 minutos a lo tonto y sin destino alguno, haya que de repente escucho una voz la cual me dice:
- Hola chavo ¿estás perdido? -
Me di la vuelta para ver quien era y me di cuenta de que era un joven de tercer año, ya que tenía su corbata y franjas de color vino, era un chico más alto que yo (como todo el mundo) creo que podría medir como 1.75 más o menos, morenito, de ojos claros, un poco robusto y nada feo, así que yo solo le respondí:
- Creo que si, estoy buscando la sala de comunicación pero no la encuentro, ¿crees que me puedas ayudar o llevarme?
- Claro que si, no te preocupes se ve que eres un chico lindo ¿cual es tu nombre?
- Christopher, me llamo Christopher y gracias por decirme lindo, pero no lo soy, simplemente ve esta sonrisa metálica, es horrible, pero bueno, ¿tú cómo te llamas?
- Yo no creo que porque tengas brackets seas un chico feo, al contrario, hasta atractivo te ves, me llamo Abraham, tengo 15 años y soy piscis.
- Pues muchas gracias por el cumplido Avraham, yo me llamo Christopher, tengo 11 años y me gustan las gomitas, ah, y soy Aries, no sé qué tenga que ver el signo zodiacal, pero si, soy Aries.
- Bueno Chris, es aquí el salón de comunicación, mucho éxito y bienvenido, échale muchas ganas y espero verte pronto.
- Gracias Abraham.Entre al salón y ya había varios chicos de nuevo ingreso sentados en sillas e igual seguían llegando varios, así que decidí sentarme en una silla y me puse a pensar lo que acababa de pasar, se me hizo muy buena onda de Abraham que me acompañara, pero algo más pasaba por mi mente, no sé qué pasaba, era algo que nunca en la vida había sentido, un latido un poco más fuerte en mi corazón que lo normal, algo extraño, un sentimiento raro y no me podía sacar de la mente a Abraham y su cara, su sonrisa, sus palabras y hasta su olor, olía muy rico, ¡OH POR DIOS! Creo que me empezó a gustar Abraham, ¿Qué? UN CHICO ME EMPEZÓ A GUSTAR...
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Cenizas de Amistad
Ficção AdolescenteDe Niño todo parece un juego, un juego del que nunca quieres salir y siempre vivir en el, sin pensar que tu amigo podría ser el amor de tu vida.